VIRGEN DE LOS TREINTA Y TRES



Peregrinaciones, Encuentros, Congresos, Poesías y Oraciones de los fieles, especialmente de Tacuarembó y Rivera - 1ra. parte - http://tacuarembo.diocesis.ws/catedral/V33003.pdf

Peregrinaciones, Encuentros, Congresos, Poesías y Oraciones de los fieles, especialmente de Tacuarembó y Rivera - 2da parte - http://tacuarembo.diocesis.ws/catedral/V33004.pdf





PRESENCIA DE LA DEVOCIÓN A LA VIRGEN DE LOS TREINTA Y TRES EN LA DIÓCESIS DE TACUAREMBÓ - RIVERA

(Primera Aproximación)
Rivera, 21 de Octubre de 2005

(Segunda Aproximación)
Rivera, 25 de Marzo de 2006

(Tercera Aproximación)
Tacuarembó, 8 de Noviembre de 2008

A los 60 años de la visita de la Imagen Histórica al Departamento de Tacuarembó
A los 45 años de la creación de la Diócesis de Tacuarembó - Rivera

En memoria de:
De Mons. Miguel Paternáin en los 35 años de su Pascua
Del P. Pascasio Bresque
De Mons. Carlos Parteli

En reconocido agradecimiento a quienes sembraron en el
corazón de nuestro pueblo el amor a la Virgen de los Treinta
y Tres: Gaucha y Nuestra y a la interminable caravana de
peregrinos y peregrinas que han puesto, año a año, a sus pies
las esperanzas de nuestras familias de Tacuarembó y Rivera

Recopilación de documentos: P. Edgar Arambillete Uhalde

Fuentes:

Vida Diocesana. (Archivo Obispado Diócesis de Tacuarembó - Rivera)
Vida Diocesana. (Archivo Obispado Diócesis de Florida) 
El Camino del Bien (Archivo Parroquia Inmaculada Concepción Rivera (1921 - 1928) (1944 - 1960)
Periódico Informaciones. (Tacuarembó)
Manantial. (Diócesis Tacuarembó - Rivera)
Monografía de Paso de los Toros: P. Daniel Franco omi
Archivo Parroquia Nuestra Señora de Lourdes (Tacuarembó)
Archivo Parroquia San Fructuoso (Tacuarembó)
-----------------------------
---------------
LA VIRGEN DE LOS 33
MONOGRAFÍA HISTÓRICO - TRADICIONAL
SÍNTESIS DEL LIBRO DE
Raúl Montero Bustamante
Por el Pbro. Walter Silva Godoy
 
I - Una pequeña obra de arte
La Virgen de los Treinta y Tres, es una pequeña imagen de treinta y seis centímetros de altura, esculpida en cedro paraguayo.
La histórica escultura reproduce el tipo clásico de las Vírgenes de Murillo, y su dibujo, proporciones, actitud, vestiduras y atributos, han sido tomados del conocido cuadro de "La Asunción" del maestro sevillano. El modelado es suave, pero en su blandura existe el vigor claro oscuro suficiente para fundir los diversos planos en una noble armonía formal que produce la sensación del movimiento y de la proporción perfecta.
La obra pertenece, sin duda, a la primera mitad del siglo XVIII. Conserva todo el carácter de la época y del estilo en que fue concebida: la amplitud de ropas, la prodigalidad y el movimiento de los pliegues, la suntuosidad del manto, y cierto sabor de preciosismo que se advierte en el rostro, admirablemente terminado, y en las breves cabecitas aladas que decoran el basamento.
Un dato, que contribuye a fijar con precisión la época en que fue tallada, lo constituye el hecho, de que las órbitas de los ojos son huecas y se hallan preparadas para recibir los ojos de cristal que se empezaron a usar en aquella época.
El carácter artístico de la obra pertenece a la época en que florecieron los artistas anónimos de las Misiones jesuitas. Tres tipos produjo la imaginería jesuítica de Las Misiones:
El netamente indígena, escultura bárbara y primitiva que revela el torpe candor de la mano inexperta que empezaba a trabajar la madera; el tipo de escultura correcta, pero trivial, enteramente ajustada a la iconografía corriente, y el tipo de escultura superior, punto terminal de una evolución artística completa, el cual solamente produjo algunos ejemplares de excepción, entre ellos la Virgen de los Treinta y Tres.
Del silencioso e ignorado taller de las Misiones salieron muchas de las imágenes y de los lienzos que poblaron las iglesias y capillas coloniales.
Los saqueos de las guerras guaraníticas y el pillaje que siguió a la expulsión de los Padres de la Compañía de Jesús, aventaron los últimos restos de la sociedad jesuítica y dispersaron las reliquias sagradas por todas las tierras del futuro Virreinato.
¿Fue entonces cuando esta pequeña imagen de María Inmaculada llegó a la Banda Oriental? ¿La habían conducido con anterioridad los Padres Jesuitas que evangelizaban estos territorios? ¿Vino posteriormente con las huestes de Artigas, o la trajo de las Misiones Rivera, el prócer que hubo de invocarla más tarde?
Veamos lo que dicen al respecto la tradición y la historia.


II - Lo que dice la Tradición
Hay una hermosa tradición que afirma que en los tiempos primitivos de la agrupación del Pintado, el laboreo de los campos, y la ruda faena de aserrar maderas a que se entregaron los pobladores, eran presididos por la pequeña imagen de la Virgen, la cual había sido colocada dentro de un tosco nicho de madera enclavado en un palo a pique, a la intemperie.
La sagrada imagen dominaba así la humilde ranchería, la pradera y el bosque, donde los pobladores se dispersaban al salir el sol, después de la oración en común. Desde el surco o desde el linde del bosque los primitivos colonos veían argüirse en lo alto de la loma, sobre las humildes viviendas, la pequeña imagen cobijada en su nicho de madera.
A la hora del descanso, cuando el arado quedaba inmóvil sobre el rastrojo y las largas sierras se detenían sobre los altos caballetes, hombres y mujeres, regresaban lentamente hacia la cima de la loma, donde la imagen tutelar, congregaba a los colonos a la hora del reposo.
La pequeña imagen, alumbrada por el medroso farol, vela entonces el sueño de la aldea recién nacida, donde la piedad, el amor y el trabajo, fecundizan el germen de la futura sociedad rural, cuyo símbolo se encierra en el tosco nicho que mordieron los soles, castigaron las lluvias, azotaron los vientos, y sahumaron con sus sencillas plegarias los primeros pobladores blancos del desierto.


III - Lo que dice la Historia
- A mediados del siglo XVIII, los Padres de la Compañía de Jesús, poseían los vastos campos llamados entonces de la Calera, bañados por los ríos Santa Lucía Grande y Santa Lucía Chico.
Ocho leguas sobre el naciente medía la hermosa posesión que penetraba 19 leguas en el corazón del territorio. Era aquella la mayor estancia cedida por el Monarca español al norte del Plata a los Padres Jesuitas quienes la bautizaron con el nombre de Nuestra Señora de los Desamparados. Eran campos ricos en maderas y pasturas, y los poblados se llenaron de viviendas y ganados. Construyeron una capilla en la que colocaron la imagen tutelar de la posesión; edificaron barracas y habitaciones para los esclavos y peones y a la vez que se dieron a evangelizar a los indígenas de la comarca, comenzaron, a labrar el suelo, faenar maderas en los bosques y enriquecer los rodeos. Obra sin duda de esta acción evangelizadora de los Padres Jesuitas fue la devoción que los habitantes de aquellas comarcas tuvieron por la Virgen María, patrona del lugar, devoción, que si ha de aceptarse el testimonio tradicional, se manifestó, en la erección de un santuario en la cumbre de la cuchilla del Pintado, donde se colocó la imagen de Nuestra Señora. Fue de ese primitivo monumento que tomó forma el arroyo de la Virgen, cuyas fuentes brotan en las faldas de la cuchilla del Pintado, como tomó nombre el arroyo Conventos, afluente del Pintado, de las construcciones de piedra que levantaron los Padres en sus incursiones por el lugar.


IV - El Pintado
Expulsados del territorio los Padres Jesuitas, en 1767, el santuario por ellos levantado en la cuchilla, quedó como recuerdo de su civilizadora. Las lluvias arruinaron acaso el monumento, pero la piedad de los vecinos veló por la conservación de la querida imagen de María. Tampoco se entibió el fervor con la ausencia de los Misioneros. Y fue precisamente uno de sus discípulos, un indio reducido, quien se encargó de mantener el culto a la Madre de Dios. Afirma el señor L. Cerapio de Sierra en una noticia histórica, publicada en el periódico "El Progreso", de Florida, de fecha 12 de mayo de 1895, que "ante el Juez de lo civil de 1er. turno hay una declaración de Don Bernardo Suárez a fojas 11, que dice: "Que en 1779 donó el indio Antonio Díaz seis cuadras de terreno al Reverendo Padre Don Vicente Chaparro, para construir en la cumbre de la cuchilla del Pintado un templo a la reina de los ángeles bajo la advocación de Nuestra Señora de Luirán hecho que se llevó a cabo de orden expresa del Obispo de Buenos Aires Monseñor Melgar".
Es singularmente importante este testimonio, por cuanto Don Bernardo J. Suárez es el mismo, que en su carácter de Síndico Procurador del Cabildo de Montevideo, fue comisionado en 1809 para la fundación de la nueva villa de San Fernando de la Florida y traslado a la misma de los antiguos vecinos del Pintado.
Alrededor del humilde monumento, en el Pintado - nombre derivado de un cacique indígena que dominó por aquellos parajes - los pobladores del futuro pueblo levantaron sus ranchos. En 1790 se decretó bajo la advocación de Nuestra Señora de Lujan, la erección de la vice parroquia del Pintado, como filial de la de Guadalupe. Al finalizar ese año, la vice parroquia fue inaugurada por su primer capellán secular don Juan Manuel Morilla, teniente Cura de la parroquia de Guadalupe.


V - La parroquia de Luján del Pintado
En 1804, servía la vice parroquia de Lujan en el Pintado, como teniente cura de la sede parroquial de Guadalupe, el Pbro. don León Porcel de Peralta joven sacerdote, natural de estos países y egresado del Real Colegio de San Carlos de Buenos Aires. Porcel de Peralta juntamente con Gómez, Figueredo, Peña, Larrañaga, Gadea, Muñoz, Lamas, Monterroso, Barreiro, etc. formó parte del núcleo de sacerdotes que en 1811 fue alma y nervio de la Revolución Oriental. Teniente Cura de Guadalupe, Vicario del Pintado, Párroco más tarde de Canelones, dónde lo sorprendió en 1811, la primera sangre, amigo y partidario de Artigas, miembro del Congreso de la Capilla de Maciel de 1813, pasó después a Buenos Aires, dónde durante más de 30 años sirvió el curato de Morón. Este fue el Vicario, durante cuyo gobierno fue erigida en Parroquia la humilde capilla.
En noviembre de 1804, llegó al paraje el limo. Sr. Obispo de Buenos Aires, don Benito Lúe y Riega, venía de consagrar solemnemente la Iglesia Matriz de Montevideo.
¿Qué vio el Señor Obispo en su visita al Pintado? ¿Qué presintió en el humilde oratorio donde oró por la felicidad de sus pueblos? La pobreza del lugar no era estímulo para moverle a grandes empresas, y sin embargo, antes de partir, recibió del vecindario, el petitorio para que la iglesia fuera erigida en parroquia.


VI - El Padre Figueredo, fundador de Florida
Erigida la nueva parroquia, don León Porcel de Peralta recibió, con la cédula de erección de la Parroquia de Nuestra Señora de Lujan del Pintado, su nombramiento de cura interino de la misma. Entre tanto en Buenos Aires, los opositores la disputaban. El doctor don Santiago Figueredo joven sacerdote recientemente ordenado, presentó oposición al curato de Pintado, y producidas las pruebas en forma brillante, fue instituido canónicamente por el Prelado, cura Vicario en propiedad de la nueva Parroquia.
Sí Porcel Peralta honró a la Virgencita, su patrona, con el lustre de su actuación sacerdotal y patricia, el doctor Figueredo igualó con sus hechos y su influencia a las más insignes figuras del clero de la Revolución.
Nació en Guadalupe (Canelones) alrededor de 1870, de padres que dieron a la Patria soldados, cuyos nombres se leen en los cuadros de la oficialidad artiguista. Cursó teología en el Real Colegio de San Carlos de Buenos Aires; en la Universidad de Córdoba recibió las sagradas órdenes y más tarde, en 1805 se graduó en derecho Civil.
En 1808, llegó al Pintado, su Parroquia. El cuadro que se le presentó a su llegada fue desolación y ruina; solamente cinco familias permanecían en la cumbre de la cuchilla. La población había bajado a las praderas en busca de tierras más hospitalarias; las fuentes de agua se habían cegado; la vegetación escasa, se moría de sed; no existían huertos ni sembrados; las viviendas se desmoronaban.
La miseria reinaba por doquier. Inmediatamente comprendió que el pueblo de la Virgen estaba condenado a desaparecer, si con sus feligreses no abandonaba la áspera e inhospitalaria cuchilla del Pintado, y sin vacilar tomó la determinación. Reunió a los vecinos, y previo novenario rezado en honor de la Patrona de la Iglesia, redactó un memorial dirigido a la Junta de Gobierno de Montevideo elegida a raíz de los Cabildos abiertos de 21 de Setiembre de 1808, en que describía la dolorosa situación de la Parroquia y pedía al Cabildo cediera la estancia que poseía en las cercanías, entre los arroyos Santa Lucía Chico y Pintado, a fin de trasladar allí el pueblo y repartir la tierra de laboreo entre los vecinos.
El 25 de febrero de 1809, bajó personalmente a Montevideo a poner en manos de la junta el extenso petitorio. El mismo día, la junta de gobierno, destinó el petitorio al Cabildo. El caballero síndico Procurador de la ciudad, que lo era a la sazón, don Bernardo Suárez, se pronunció tres días después a favor del memorial del párroco del Pintado: "La menor duda en decidirse por la solicitud del Presbítero Don Santiago Figueredo, debe ser un delito", decía don Bernardo en su extenso informe.
Aprobada la cesión de la estancia "Rincón del Cabildo" por la J. de Gobierno, fueron comisionados el Caballero Síndico Procurador de la ciudad, don Bernardo Suárez, y el comandante del regimiento de voluntarios del Río de la Plata, don Prudencio Murguiendo, para que con la asistencia del Párroco y peritos procediera a delinear la nueva villa, deslindar sus solares etc.
El Padre Figueredo se encargó de asesorar a los comisionados, fijó sitio de erección de la iglesia y sus anexos, cabildo, casa de policía, etc. así como fue él quien en compañía de los funcionarios reales, procedió al reparto de solares entre sus feligreses y colocación de los mismos en sus tierras. No paró ahí el celo del párroco, pues su diligencia y liberalidad, consiguieron levantar en breve tiempo, varias poblaciones de de adobe alrededor de la plaza mayor, delineada sobre el terreno, y edificar, con singular rapidez, un rancho de mayores dimensiones con armadura de madera sobre el frente, para sostener la campana. Aquella había de ser la nueva sede parroquial de Nuestra Señora de Lujan del Pintado, cuya imagen, aguardaba aun en su antiguo santuario, la hora en que había de ser llevada en piadosa procesión a su nueva morada. Obra de romanos fue para el Padre Figueredo, obtener la traslación de su sede parroquial al paraje fijado para la villa, y proceder a la formación del nuevo pueblito. Todavía en el Pintado, el 28 de Marzo de 1810, por cuarta vez urgía al Cabildo de Montevideo con estas palabras: habiendo representado a S.E. por tercera ocasión la necesidad de trasladar mi Parroquia a la nueva villa de San Fernando, solo ha obtenido un decreto de 3 de noviembre ppdo. en que me ordena informe lo conveniente a cierta representación hecha por cinco vecinos del Pintado, y presente las licencias originales de mi prelado para la pretendida traslación, como lo he ejecutado en 9 de Febrero pasado. En esta virtud, no me queda otro recurso que suplicar a V. S. interponga con S.E. toda su representación, a fin de que preste su superior permiso para la ejecución de una empresa tan sencilla, como colocar una Iglesia provisional en San Fernando, y tan interesante como formar un Pueblo en la Campaña. V. S. es el verdadero Padre de estos infelices que a la sombra de su favor buscan su felicidad; ellos han abandonado gustosos sus antiguos hogares para unirse en sociedad, cooperando en esto las benéficas intenciones de V. E. que seguramente quedarían del todo desairadas, sino se colocase en medio de ellos la fuente inagotable de auxilios espirituales, que como cristianos necesitan y desean. Es, pues, necesario, que V.S. recomiende mi solicitud como merece, a S.E. interesándose en su pronto despacho".
Y después de muchas dificultades, fue fundada la actual población de Florida por Real Cédula fechada en Cádiz a 11 de agosto de 1811.


VII - Hora propicia
Cuchilla abajo, dando tumbos por la pedregosa ladera marchó el convoy que abandonaba a la soledad del desierto las ruinas de la "Villa Vieja", en demanda del paraje dónde había de levantarse la nueva población, siempre a la sombra tutelar de la Virgen María. Al frente, quizás, marcharía la carreta que conducía el modesto altar con retablo con la sagrada imagen de la Virgen del Pintado. Detrás de la Virgen, el Padre .Figueredo y los vecinos, a pie unos, a caballo, otros, formando pintoresca caravana: carretas cargadas con muebles o conduciendo a mujeres y niños; más lejos marcharía el ganado, arreado por sus dueños. Así debió llegar el pequeño pueblo, en pos de su patrona, a su nuevo destino, dónde ya se alzaba la humilde capilla de terrón y totora. Y allí alboreaba efectivamente la patria.
Del sur, del norte, de los cuatro vientos, llegaban los misteriosos mensajeros, y detrás de ellos dejaban el azoramiento y la inquietud. Se pronunciaban palabras extrañas, y se hablaba de libertad y de patria. De los humildes pulpitos de campaña, descendía sobre los feligreses, una elocuencia nueva y ardiente que dejaba perplejos a los paisanos. Se proclamaban nuevos derechos y se hablaba de futuras conquistas. Las arengas de los padres franciscanos de Montevideo se reproducían en los lejanos partidos. Los padres Martínez y Maestre, al norte, en Paysandú, el doctor Peña en Colonia, don Tomás Gomensoro en Soriano, don Gregorio" Gómez en San José, don Juan José Ximénez en Minas, don Valentín Gómez y Porcel de Peralta en Canelones, don Santiago Figueredo en la Florida hablaban de la patria a sus feligreses. La campaña, encendida por los párrocos, ardía por sus cuatro costados. Y Artigas trae la buena nueva que todos esperaban impacientes. Los pueblos se congregan entonces tumultuosamente; se arman de prisa y toda la campaña marcha detrás de Artigas. San José, Las Piedras, el sitio, son los primeros jalones de la epopeya que ha de desfilar delante de la pequeña Imagen de la Florida, que desde su nicho, bendice a los héroes que pasan sobre las colinas estremecidas.


VIII - La Misa por la Patria
El 1er. partido criollo, que desde 1809 se organizaba en Montevideo, contó con el padre Figueredo desde sus primeros días. La humilde casa Parroquial del Pintado, fue ya ese año, teatro de las primeras reuniones secretas de los patriotas. Los hermanos y primos del párroco, D. Francisco Meló, don Celestino Bauza, don Joaquín Suárez y otros vecinos se congregaban allí para enterarse de las comunicaciones recibidos de Montevideo, y hablar del por venir. Armas, dinero, vituallas, llegaron de todas partes a pedido del padre Figueredo como también hombres para marchar en pos de Artigas. El párroco veía cumplirse así sus sueños. Una madrugada de Mayo de 1811 la pequeña aldea de Florida, vio formado en la plaza mayor, el primer escuadrón de patriotas. Allí estaban, don Joaquín Suárez, don Rufino Bauza, don Manuel Calleros, don Francisco Meló. El padre Figueredo disponía los detalles de la marcha. Cuando todo estuvo pronto, el párroco se dirigió a la iglesia, seguido de soldados y vecinos, se revistió junto al altar, y luego de arengar a su pueblo, y de impetrar para sus armas la protección de la Virgen María, cuya sagrada imagen recibía la ofrenda, celebró el santo sacrificio de la Misa. Aquella fue la primera Misa por la Patria.

IX - La primera epopeya
Quedó el santuario sin ministro y las ovejas sin pastor. La Virgen tutelar de la comarca vio alejarse al pequeño batallón. Desde su nicho iba a asistir a la primera epopeya libertadora. Breves días después de la partida de su párroco", le llegaron las resonancias del triunfo de Las Piedras. El Padre Figueredo, en medio del combate, en tanto curaba a los heridos, absolvía a los moribundos y se batía en las guerrillas extremas, debió invocar constantemente a su Patrona. El capellán, de la futura Virgen Nacional se cubrió de gloria en la batalla memorable. El propio Artigas escribió en el parte oficial del combate, estas palabras: "No olvidaré los distinguidos servicios de los presbíteros don José Valentín Gómez y Santiago Figueredo, cura vicario, éste de la Florida, y aquél de Canelones; ambos no contentos con haber colectado varios donativos patrióticos, con haber sufrido la penosa marcha del ejército, participando de las fatigas del soldado, con haber ejercido las funciones de. su sagrado ministerio en todas las ocasiones que fueron precisas, se convirtieron en el acto ,de la batalla en bravos campeones siendo de los primeros que avanzaron sobre las filas enemigas con desprecio del peligro y como verdaderos militares".
Después llegaron del norte nuevos invasores; la derrota mordió sin piedad los pobres batallones de la patria, pero el fuego que había incendiado la campaña no se extinguiría jamás.



X - Los héroes ante la Virgen
La libertad marcha esta, vez a, paso de carga. Lavalleja desembarca el 19 de abril en la Agraciada. Se 21 obtiene la primera victoria en San Salvador; el 24 ocupa el pueblo de Soriano. El 24 de mayo, realizada ya la fusión con Rivera, San José y entrar triunfantes a los libertadores; en dos jornadas caen sobre Guadalupe y enarbolan en el Cabildo la bandera tricolor, y, el 7 del mismo mes, Lavalleja saluda con una salva, desde la cumbre del Cerrito, a la ciudad paterna, sobre cuyos muros tremola la bandera del Imperio.
Mientras Oribe y Calderón formalizan el asedio, Lavalleja marcha sobre Florida, donde han de echarse los cimientos de la República. Como en la primera epopeya la antigua Virgen del Pintado, recibía la oración de los héroes de 1825; Lavalleja que ha establecido su cuartel general cerca de la Florida, se postra, con sus compañeros, a los pies de la imagen venerada.
Los pueblos han sido convocados para que constituyan un gobierno representativo provisorio. El 2 de mayo, Lavalleja se ha dirigido a los Cabildos, para invitarlos a designar sus diputados. La semilla republicana, sembrada por Artigas en la homérica época de la patria vieja, germina así nuevamente en la tierra oriental.
El 14 de junio, los miembros del congreso patrio se reunieron en la casa de doña Ana Hernández, próxima a la iglesia parroquial y, declararon instalada la Asamblea Soberana, bajo la presidencia de don Manuel Calleros, el más anciano de los próceres.
Al mediodía, Lavalleja y los miembros del gobierno, asistidos de funcionarios civiles y jefes militares, seguidos por el pueblo, que llenaba la plaza mayor de Florida, se dirigieron a la Iglesia, donde se cantó un solemne Te Deum y el párroco dio la bendición a los héroes y pueblo. La bandera tricolor se inclinó entonces, por primera vez, ante la imagen sagrada de María, y próceres y soldados doblaron su rodilla ante la futura Patrona de la República.
El 25 de agosto, la Asamblea se volvió a reunir en un humilde rancho de terrón, que no tenía más muebles que una mesa con recado de escribir y algunos asientos de madera.
En el testero de la sala un tosco santo Cristo de talla, ante el cual Lavalleja había jurado fidelidad a Dios y a la Patria, al recibir el 22 de junio la investidura de Gobernador y Capitán General de la Provincia.
Al mediar el día, entró a deliberar la asamblea de próceres; el padre Larrobla ocupó la presidencia; los convencionales se distribuyeron en los modestos asientos. El debate fue breve; los documentos que concretaron la decisión soberana poseen la viril sencillez de las proclamas legendarias. Declarada la Independencia, se dirigieron a la iglesia parroquial, para implorar del Señor de las gentes, días de gloria y prosperidad para la patria, y poner bajo la protección de la Madre de Dios, la obra cuyos cimientos acababan de ser colocados.
La antigua imagen del Pintado, vio entonces nuevamente postrados a sus pies, a los representantes del pueblo, como había visto en junio del mismo año a Lavalleja y a sus compañeros de gloria inclinar la bandera tricolor.
 
XI - Tradición e Historia
La época de la Independencia no concebía ceremonia oficial que tuviera carácter solemne, sin que fuera acompañada por las bendiciones de la Iglesia. En 1815, por ejemplo, en Montevideo, cuando entraron los orientales, el primer acto oficial de Otorgues es ordenar la celebración de un Te Deum; cuando en 1829, la ciudad paterna ve entrar por segunda vez vencedores a sus hijos, se repite la ceremonia del 15; cuando en 1830 se jura la Constitución, los convencionales van a postrarse ante el Señor y piden las luces del Espíritu Santo. Así, todas las ceremonias oficiales se confunden, en aquella bendita época, con las religiosas, como se confunden en el corazón del hombre la fe y el sentimiento de la patria.
De muchos de esos actos quedó constancia en documentos históricos; de otros, sólo la tradición conservó el recuerdo; en este caso, están, las ceremonias religiosas celebradas en 1825 ante el altar de la Virgen de la Florida. Pero la tradición del culto histórico llega hasta nosotros por buena fuente. Ya es Rivera qué en sus primeras disensiones civiles, invoca en sus proclamas de guerra a la Virgen Tutelar de la República; ya es Oribe, el segundo Jefe de los 33, que en 1857, ofrenda a la histórica imagen la corona de oro que ciñe sus sienes; ya es la viuda de Atanasio Sierra, uno de los cruzados de 1825, que dona una cuantiosa suma para que se erija un nuevo Santuario a la Imagen, ya es por fin la devoción popular, que reverencia a la efigie, como reliquia venerada, y levanta en su honor, el magnífico templo que hoy la cobija.
Es por todo esto, que la vieja tradición la llama “Virgen de los 33"..

------------------------------
---------------

1924 -  PARROQUIA INMACULADA CONCEPCIÓN. RIVERA
(El Camino del Bien. Agosto 1924)

A los pequeños predilectos de la Patria.
Es el día aniversario de tus glorias Patria mía; y desde el vislumbre esplendoroso de tu aurora todo sonríe: las plantas, las flores, el aire, la luz
Y tu amanecer magnífico es saludado por los trinos de los pájaros, que unen sus alegres gorjeos el armonioso repicar de las campanas y al estruendo sonoro de los cohetes y de las bombas.
Día de Patria! Naturaleza sonríe… y las almas conmovidas acuden presurosas a perfumar el templo santo con plegarias y las elevan fervientes por ello, por los pequeños elegidos, valientes Vanguardias del Norte, que respondiendo a la voz de su digno Jefe rodean el altar de la Virgen sin mansilla, y la ofrendan con el cariño de sus corazones infantiles. La blanca y celeste enseña de la Patria.
Y a los pies de la augusta María y ante el trono de luces y de flores flameó ufana la hermosa tricolor; la de las nueve blancas y celestes listas y roja franja que estampó en su centro la firme mano del sin par Artigas. ¡Salve bandera de la Patria mía!
La bendición de Dios Omnipotente descendió del cielo; y a la bendición sacrosanta se unió la mirada amorosa de la Virgen madre quien sonriendo a sus hijos extendió las manos purísimas, estrechó sobre su seno la bandera cubierta de tantas glorias y depositó en fila con toda la ternura de su corazón amantísimo un ósculo ardiente de amor.
Salve bandera de la Patria mía! Salve Vanguardias del norte es vuestra.
Es la reliquia santa que debéis venerar, honrar y defender. Es el premio a vuestra constancia, a vuestra caballerosidad, a vuestra virtud, que en nombre del cielo deposita, en vuestras manos infantiles el pueblo de Rivera.
Representáis el porvenir; y es vuestro deber que en el futuro vislumbrado apenas la elevéis alta, muy alta hasta mezclarla con el azul del cielo, para poder mirarla amantes y altivos, uniendo en vuestro pecho los dos amores que tan grandes hicieron a nuestros héroes: Dios y Patria.
------------------------------
---------------
1934 - LA VIRGEN DE LOS TREINTA Y TRES
(Vida Diocesana Nº 8, 1934)

En el antiguo pueblo del Pintado, hoy Villa Vieja, a veinte kilómetros al oeste de la actual ciudad de Florida, se erigió a fines del siglo XVIII, una capilla que se llamó Capilla del Pintado. En ella se rendía culto a una Virgencita que, según todas las probabilidades, había llevado del Paraguay, a mediados del mismo siglo, los Padres Jesuitas al paraje formado por la falda occidental de la cuchilla del Pintado, en cuyos bosques faenaban madera con sus queridos indios. Cuando a principios del siglo XIX, el vecindario del Pintado consiguió que se estableciese en su pueblo una Parroquia, los principales moradores juraron por su Reina y Patrona a la Inmaculada Concepción bajo la advocación de Nuestra Señora de Lujan. Su primer Párroco, el Pbro. Don Santiago Figueredo en vista de la pobreza y aridez de aquel terruño, resolvió trasladar la Parroquia a otro lugar más acomodado, y donde pudiese florecer más fácilmente el culto de su amada Virgencita. Acudió, pues, al Cabildo de Montevideo y al Obispo de Buenos Aires, y obtenidos los competente permisos, pueblo y Parroquia del Pintado, trasladáronse a la que es hoy ciudad de Florida.
Construida en el nuevo sitio la capilla, colocóse en ella la Imagen de la Inmaculada de Lujan o del Pintado, y se fue edificando en tomo suyo la Villa de la Florida. Al pie de esa Imagen, cobraba a día a día nuevos bríos su ilustre Capellán, el Padre Figueredo, para enardecer las almas de Don Joaquín Suárez, Don Pedro C. Bauza y Don Francisco Melo en pro de la Independencia Nacional. Y llegó el fausto día, 25 de Mayo de 1825, en que Lavalleja estableció su cuartel general en la Florida y el 14 de Junio en la misma Villa quedó constituido el primer gobierno provisional de la provincia oriental bajo la presidencia dé la figura patricia de Don Miguel Calleros. Dos meses más tarde, quedó instalada la primera Asamblea, llamada Sala de Representantes, el 20 de Agosto de 1825, ocupando la presidencia de la Sala el gran sacerdote y gran patriota, Padre Juan Francisco Larrobla; y cinco días después, o sea el 25 de Agosto, en el modesto rancho de totora en que sesio¬naba la Asamblea, rancho vecino a la capilla de la Virgen, se firmaban las dos Actas memorables, que fueron leídas después solemnemente en la Piedra Alta.
La Virgencita del Lujan o del Pintado contempló, pues, desde su humilde trono estos acontecimiento trascendentales que dieron vida libre a un pueblo heroico; y es tradición que Lavalleja, al frente de sus valientes el 14 de Junio inclinó su bandera, jamás vencida, la gloriosa tricolor, ante la imagen de la Virgen, y que los Convencionales de la Asamblea de la Florida, presididos por el Padre Larrobla, después de firmar las Actas de la Independencia, se dirigieron en corporación a la humilde Capilla, y arrodillados al pie de la sagrada imagen de la Madre de Dios, pidiéronle fuerza y valor para llevar a término feliz sus grandiosos anhelos de emancipación, como así sucedió.
Profesemos, pues, gratitud, veneración y amor intensos a esta bendita imagen de la Virgencita de los Treinta y Tres que, como reliquia de los viejos y legendarios tiempos de nuestra Independencia Nacional, se guarda con cariño en la Catedral de nuestra amada diócesis para recordar a todos los uruguayos la fe cristiana de aquellos bravos que nos dieron libertad, para recordar a todos los uruguayos las grandes glorias de la patria amada.
------------------------------
--------------
Himno a la Virgen de los Treinta y Tres
Autor: el gran poeta, nacional
Dr. Juan Zorrilla. De San Martín.
¡Viva la Virgen que vio en la Florida
Nuestra, bandera la recién nacida,
Flameante a sus píes!
¡Viva la Virgen que en nuestra mañana,
Fue de la patria gentil soberana,
Guía y Capitana
De los Treinta y Tres!
Ante su imagen los héroes velaron
Firmes las armas que en triunfo llevaron
Hasta Ituzaingó
Nuestras batallas fueron oraciones,
Nuestras victorias de Dios eran dones
¡Florida, Misiones!
¡Sarandí, Rincón!
Madre de Artigas, del viejo vidente,
Que en plena noche llevaba, en la frente
Nuestro patrio sol!
Por ti la patria, es eterna y santa:
Al invocarte su gloría agiganta
Y el salmo levanta
Que es propicio a Dios,
Hoy renovamos y hacemos eterno,
Ante la Virgen el voto paterno,
Con firme altivez;
¡Viva la patria que nació cristiana!
¡Viva la estrella de nuestra mañana
Virgen soberana
De los Treinta y Tres!
------------------------------
---------------
1935  - LA SEMANA DE ACCIÓN CATÓLICA EN FLORIDA
(Vida Diocesana Nº 24. Diciembre de 1935)

Dos magníficas jornadas se han realizado en la ciudad de Florida, en un breve lapso de tiempo: la primera, la Misión que llevó la paz a innumerables almas, la luz a muchas inteligencias y el amor al corazón de multitud de cristianos, dejando más fervor en todos, labrando un ambiente de mayor piedad e interés por las cosas del alma; la segunda, la Semana de Acción Católica, semana de oración y estudio, dedicada a los Párrocos de la Diócesis y a los fieles de la ciudad episcopal, semana vivida intensamente por los unos y por los otros, que tuvo su magnífico término en los solemnísimos actos del domingo 24, y será un poderoso principio de vitalidad para la Diócesis entera.

EL OBISPO
El Exmo. Sr. Obispo, incansable organizador, preparó con gran tacto y acierto un amplio programa, dentro de cuyas líneas habían de desenvolverse los diversos actos de la semana. No perdonó sacrificio para llevar al terreno de los hechos lo expresado sobre el papel, y pudo gustar la legítima satisfacción de ver realizados los sucesivos números del programa con toda solemnidad, entusiasmo, fervor y marcados indicios de frutos duraderos.
El mismo, como en otras ocasiones, se encargó personalmente de enseñar al pueblo los cantos litúrgicos, como la Misa de Angelis, "Veni Creator", "Tantum ergo" y varios y apropiados motetes. Merced a esto, el domingo 17, por la mañana, todo un pueblo con su Obispo a la cabeza y dirigido por él, invocaba las luces y bendiciones del Espíritu Santo sobre la Semana que se iba a emprender, haciendo retemblar las bóvedas de la suntuosa Catedral con las notas graves y emotivas del canto del "Veni Creator".
Escenas como ésta se repitieron diariamente por la noche y por la mañana. La Misa, que se celebraba en el altar mayor, a las 7, era explicada con claridad y sencillez por el Exmo. Señor Obispo, quien, después de rezar las preces del mes de María, entonaba con el pueblo las Letanías de todos los santos.

LOS PÁRROCOS
Respondiendo al llamado que les hiciera su Prelado, se congregaron en Florida los Párrocos de nuestra Diócesis. Asistieron con verdadero interés y viva preocupación a las conferencias especiales que para ellos dictaba el eximio maestro de la Acción Católica, el R. P. Federico Rademacher S. V. D., acudiendo también, todas las noches, a las conferencias destinadas a los fieles.
En aquellos días se vieron reunidos en un mismo sitio, presididos por su Obispo y dedicados al estudio y oración, a nuestros Párrocos, jóvenes y viejos, religiosos y diocesanos, a los que vivían cerca como a los que estaban a grandes distancias...
EL PRESIDENTE DE LA JUNTA NACIONAL DE A. C. después de departir, familiarmente, por un buen rato, regresó a Montevideo, visitándonos nuevamente el domingo 24, por la tarde, en compañía de su señora, para actuar de padrinos en la bendición de la capilla de la Virgen de los Treinta y Tres para asistir a estos actos, el doctor Quagliotti hubo de realizar verdaderos sacrificios y sustraer su presencia de algunas ceremonias que lo reclamaban en Montevideo.

EL CONSEJO N. DE J. C. DE U.
El viernes, por la noche, tuvimos el .gran gusto de tener entre nosotros una delegación del Consejo Nacional de Jóvenes Católicos del Uruguay, compuesta por su presidente el Escribano Héctor López Fernández y por el Ingeniero Mateo Fernández.
Asistieron a dos conferencias y platicaron con algunos caballeros de la ciu¬dad, con los Sres. Párrocos y con el Exmo. Sr. Obispo.

EL Dr. SECCO ILLA
Actuaron, también, de padrinos del nuevo altar y capilla de la Virgen de los Treinta y Tres el Dr. Joaquín Secco Illa y su esposa, Sra. Faustina García Gómez de Secco Illa.
Cabe destacar que para hallarse presente a este acto el Dr. Secco Illa adelantó su regreso del Brasil, efectuando un viaje por tierra que naturalmente envuelve mayores molestias que por vía marítima.

LA CRUZ MISIONAL
Se había señalado el jueves 21 para inaugurar solemnemente la Cruz que quedaría como recuerdo de la magna Misión predicada en Florida en cinco partes simultáneamente.
Debido al mal tiempo, hubo de postergarse este acto, para el sábado 23, y todo contribuyó en este día a realzar el homenaje ofrecido al símbolo de nuestra Redención.
Desde muy temprano, comenzaron a congregarse los fieles alrededor de la Cruz, que, enclavada en el terreno del futuro seminario, se alzaba majestuosa entre un montecito de pinos, artísticamente engalanada. Unos llegaban de a pie, otros en automóviles y muchos en ómnibus. Alrededor de la Cruz formaban guardia de honor los acólitos, con hachas encendidas. La Misa fue oficiada por el Sr. Cura Párroco de Treinta y Tres, Pbro. Félix Pellerey, que es hijo de Florida, y en aquella mañana plácida y serena, los fieles, dirigidos por el Exmo. Sr. Obispo, entonaron con afinación, justeza y entusiasmo, la Misa de Angelis, alternando en el canto con un grupo de sacerdotes.
Al terminar la Misa, el Padre Jaime Ros, Decano de los sacerdotes del Uruguay, Párroco y Vicario Foráneo de Tacuarembó, dirigió a la multitud una vibrante arenga marcando con su palabra inspirada y llena de unción los triunfos de la Cruz, desde que fue santificada por Cristo.
Un espontáneo aplauso subrayó las últimas palabras del orador. Inmediatamente el Sr. Obispo procedió a dar la bendición a la concurrencia y a toda la ciudad con la reliquia de la verdadera Cruz, que se veneraba sobre el Altar, y luego después de los sacerdotes, se acercaron, uno por uno, todos los asistentes en religioso silencio, a venerar aquella reliquia del madero sobre el que corrió un día la Sangre redentora de Jesucristo.

PUNTO FINAL
El domingo 24 se notó en Florida un movimiento extraordinario. Los trenes expresos, ómnibus y autos particulares volcaron en sus calles un río de peregrinos que se dirigían en heterogénea caravana hacia la Catedral a saludar a la Virgen de los Treinta y Tres y a fortalecerse, su mayoría, con la Sagrada Comunión. De casi todas las Parroquias de la Diócesis había representaciones. Muchas eran las casas que estaban engalanadas con flores, colgaduras, banderas nacionales y pontificias.
La banda de música de los Talleres de Don Bosco, que durante todo el día prestó sus calificados servicios, recorrió las calles sembrando notas de animación y de alegría.
A las 10 se celebró la Misa de Pontifical por el Exmo. Sr. Obispo Monse-ñor Paternáin, estando el canto a cargo de la Schola Cantorum del Manga, que dirige el R. P. Ortega, S. S.
El templo rebosaba de gente, y muchísimos fueron los que desde el atrio y la calle aguzaban el oído y la mirada para seguir las ceremonias que se desenvolvían adentro.
Cantado el Evangelio, el Pbro. Doctor José Carlos Freiré pronunció unas enfervorizantes palabras, haciendo resaltar la justicia y necesidad de aquel homenaje debido a la Virgen legendaria de los Treinta y Tres. Por la tarde fue la apoteosis de aquella imagencita. Se bendijo su nueva capilla y paseó triunfalmente por las calles de Florida, recibiendo el testimonio de amor y veneración de miles de almas, que lo traslucían en sus cantos, en sus rezos y en sus vítores.
Al llegar a la Catedral en hombros de los sacerdotes, fue saludada con una nutrida salva de aplausos, que invadió hasta el mismo templo. El entusiasmo era delirante. El Sr. Obispo ocupó el trono, mientras la imagencita era sostenida en el presbiterio por algunos caballeros que se iban turnando, en tanto que el Presbítero Dr. Freire hacía vibrar las fibras patrias y religiosas del corazón de los oyentes.
Se procedió luego a colocar la histórica imagen en su nuevo altar y capilla definitiva. El Sr. Obispo la recibió de manos de un sacerdote y la colocó en el nicho preparado de antemano. Al aparecer aquella imagencita esbelta y devota, rodeada de luz y de flores, asentada como en su trono, el público, en incontenible entusiasmo, prorrumpió en un aplauso que, más que un palmetear de manos, era un agitarse de corazones.
Estas ceremonias culminaron con la bendición con el Santísimo Sacramento, que llevó al alma de todos los asistentes una ola de paz y fervor religioso.
Tanto estas ceremonias de la tarde como las de la mañana fueron trasmitidas por la estación CWI 33 -Radio Florida.

PRIMERA MISA
La primera Misa celebrada en el nuevo altar de la Virgencita de los Treinta y Tres fue oficiada por S. E. R. Monseñor Paternáin, el lunes 23, quien la ofreció por la Patria, por la Diócesis y por la ciudad de Florida. Numerosa fue la concurrencia que asistió a esta Misa y muchos fueron los fieles que se acercaron a la Mesa Eucarística.

------------------------------
---------------
1936 - EXHORTACIÓN P. MIGUEL PATERNÁIN

NOS, Don MIGUEL PATERNÁIN, de la Congregación del Santísimo Redentor por la Gracia de Dios y de la Santa Sede, OBISPO de FLORIDA y MELO.

Considerando: por carta del 28 de Octubre de 1934 ha sido establecida por el Episcopado nacional la Acción Católica en nuestra República.
Considerando: que corresponde ahora implantarla en Nuestra Diócesis y designar a las personas que han de integrar la primera Junta y los primeros Consejos Diocesanos de la misma;
Por las presentes: en virtud de Nuestra Autoridad y de conformidad con los Estatutos de la Acción Católica Uruguaya, decretamos:

1º - Queda oficialmente establecida en la Diócesis de Florida y Melo la Acción Católica Uruguaya.
2º - Nombramos para integrar los Organismos diocesanos de la misma a las siguientes personas:

 Para la Junta Diocesana
Asesor: Pbro. Dr. Martín E. Pérez
 Para el Consejo Diocesano de Hombres Católicos
Asesor: Pbro. Dr. Pascasio Bresque
 Para el Consejo Diocesano de Jóvenes Católicos
Asesor: Pbro. Dr. Carlos Parteli
 Para el Consejo Diocesano de Mujeres Católicas
Asesor: Pbro. Dr. Anacleto A. Torres
 Para el Consejo Diocesano de Señoritas Católicas
Asesor: Pbro. Dr. Mario S. Rodríguez

Desde ya ponemos la Acción Católica Diocesana bajo el amparo de la Santísima Virgen María, Madre, Reina y Maestra de los Apóstoles, a la que nombramos y constituimos Patrona de esta providencial organización en la popular, simpática y querida advocación de Virgen de los Treinta y Tres. Ella, que en frase del vate nacional y poeta cristiano fue “Guía y Capitana de los Treinta y Tres” y desde su imagen venerada los alentó para llevar a cabo la empresa de la patria libertad. Sea también Guía y Capitana de los Nuevos Cruzados de la Acción Católica que lucharán con denuedo por conseguir para la Diócesis el mayor de los bienes: el reinado de Jesucristo Rey.
Para que así sea imploramos del Espíritu Santo, por mediación de la Santísima Virgen, derrame sobre los nombrados la plenitud de sus dones.
Comuníquese a quienes corresponda, insértese en el Libro de Decretos de la Curia, publíquese en VIDA DIOCESANA y léase a los fieles de la ciudad episcopal en todas las misas del próximo Domingo.

Dada en Florida, el día santo de Pentecostés, 31 de Mayo del año del Señor de 1936.

+MIGUEL
Obispo de Florida y Melo
Por mandato de Su Excia. Rvma.
Martín E. Pérez
Canciller del Obispado
--------------------------
--------------
1936 - SAN GREGORIO DE POLANCO

Semana de Oración y Estudio
Del 1 al 14 de Noviembre se celebró en esta Parroquia la Semana de Oración y Estudio, para pedir a Dios por el feliz éxito de la implantación de la Acción Católica en nuestra querida Diócesis. Todos los días, rezado el rosario, tentamos una conferencia sobre Acción Católica, terminando con la Bendición. El día 9 correspondió a San Gregorio tener expuesto el Santísimo Sacramento, viéndose durante todo el día la Iglesia visitada por, numerosos fieles que acudían a rendir su tributo de adoración al Dios de la Eucaristía, rogándole por las intenciones de nuestro querido Sr. Obispo y por el éxito de la Acción Católica en nuestra Diócesis.
El día 24, en adhesión a los festejos de Florida y en homenaje a la Virgencita de los Treinta y Tres, tuvimos Misa cantada de Comunión general, y por la tarde rosario, bendición y sermón.

Mes de María
Todos los días se celebró en nuestra iglesia el ejercicio del mes de María, que tuvo excepcional fervor, sobre todo la novena de la Inmaculada Concepción.
La Imagen de la Inmaculada, colocada sobre un altarcito improvisado, se hallaba rodeada de hermosas y perfumadas flores, que diariamente le ofrendaban sus hijos a los alegres acentos del "Venid y vamos todos". Terminada la novena, todos los días teníamos unos minutos de ensayo de la "Misa de Angelis", que debía ser cantada el día de la fiesta por todo el pueblo, y otros cantos piadosos.
Durante el mes de María, como ofrenda a Nuestra Madre, se colocaron en la iglesia los bancos nuevos, hechos con donaciones de los feligreses, la iglesia presenta ahora un nuevo aspecto, con dos filas de hermosos bancos.

Inmaculada Concepción
El día 8 fue un día de regocijo popular: los alegres repiques de las campanas y el estallido de los cohetes sembraron, desde muy de mañana, el regocijo y entusiasmo en los corazones de todos. A las 7 1/2 se celebró la Misa solemne de Comunión general.
La iglesia, primorosamente engalanada, presentaba el aspecto de sus grandes días, y en el centro del altar mayor se destacaba la imagen de la Virgen Inmaculada, rodeada de gran profusión de flores blancas.
En esta Misa hizo la primera Comunión un hermoso grupo de niños y niñas, quienes se acercaron a recibir a Jesús con tanto orden, alegría y recogimiento, que llenaron de emoción a. todos los presentes. Después de ellos, se acercaron a comulgar las congregaciones de Santa Teresita y del Corazón Eucarístico de Jesús, gran número de señoras y señoritas y, finalmente, un nutrido número de socios del Centro San José. La Misa fue celebrada por el K. P. Daniel Franco O. M. I. y cantada por todos los fieles, acompañados con el armonio por la distinguida profesora Sra. Matilde M. de García. Terminada la santa Misa, el R. P. Daniel Franco obsequió a los niños de primera Comunión y a sus padres con un abundante desayuno de chocolate y exquisitas masas, que fue servido en la casa parroquial, reinando gran alegría. Antes de dispersarse los pequeñuelos, se les sacaron algunas fotografías, distribuyéndoseles, al despedirles, hermosos recordatorios de ese inolvidable día.
Por la tarde, a las 6, se terminó solemnemente la novena de la Inmaculada, haciendo también los niños la renovación de las promesas del Bautismo y rezándose, después, la consagración de todos a. la Santísima Virgen. Terminó el acto con la solemne Bendición con su Divina Majestad.
La coral ejecutó todos los cantos litúrgicos con gran acierto, acompañada al armonio, con singular maestría, por la inteligente señorita Nydia Puértolas.

------------------------------
---------------
1937  - EXHORTACIÓN Y MANDATO EPISCOPAL
 (Vida Diocesana Nº 37)

N0S, DON MIGUEL PATERNAIN, DE LA CONGREGACIÓN DEL SANTÍSIMO REDENTOR, POR LA GRACIA DE DIOS Y DE LA SANTA SEDE, OBISPO DE FLORIDA Y MELO.


Al Clero, Comunidades y fieles de nuestra sede.
El próximo 19 de Setiembre vivirá, Florida otra jornada de intenso fervor mariano.
Ese día, como lo acaba de disponer el Excmo. Sr. Arzobispo de Montevideo, nuestros hermanos de la Arquidiócesis se trasladarán en devota peregrinación hasta esta histórica ciudad para rendir su homenaje filial a la Madre de Dios y Madre de los hombres, en la Imagen venerada en nuestra Santa Iglesia Catedral, y a la que todos llamamos con cariño Virgencita de los Treinta y Tres.
Esa bendita Imagen, ya lo sabéis, reúne en sí, por modo admirable, los dos grandes amores del corazón humano: el amor a Dios y el amor a la Patria; y Florida, elegida providencialmente entre todos los pueblos y ciudades del Uruguay para ser depositaría de tan precioso tesoro, ¿podía permanecer indiferente en ocasión semejante?
No, amadísimos hijos; que, cuando se trata de honrar a la Virgen, no debemos escatimar ni esfuerzos ni sacrificios. Pongamos cuanto esté de nuestra parte para que los actos a realizarse en Setiembre revistan singular esplendor, para gloria de María; y aprestémonos desde ya a recibir a nuestros hermanos peregrinos con sentimientos de verdadero amor cristiano, y junto con ellos postrémonos ante la Imagen de María para venerar su grandeza, cantar sus alabanzas y pedirle que vuelva hacia nosotros y hacia la Patria sus ojos de misericordia.
Queremos que la Junta Diocesana de la Acción Católica prepare a nuestro pueblo con una extraordinaria propaganda para los actos del 19 de Setiembre; y ordenamos que en los tres días precedentes a esa fecha se celebre con la mayor solemnidad en la Santa Iglesia Catedral un triduo para conmemorar el cincuentenario de la coronación de la Virgen de Lujan, que ocurre este año.
Esta Exhortación y Mandato serán leídos al pueblo en todas las misas que se celebren, en la ciudad el próximo domingo, y los Sres. Párrocos seguirán recordando a los fieles, en los días festivos siguientes, el acontecimiento a celebrarse, y los invitarán a tomar parte en el triduo y en los actos del 19 de Setiembre.

Florida, el 15 de Agosto de 1937, fiesta de la Asunción de la Santísima Virgen.
+ MIGUEL, Obispo de Florida y Meló.
Por mandato de Su Excia. Rvma.
Martín E. Pérez, Canciller del Obispado.

------------------------------
---------------
1937 NOVIEMBRE - LA PEREGRINACIÓN DIOCESANA
(Vida Diocesana Nº 37)

Estamos a las puertas de un grandioso acontecimiento para toda la Diócesis. Este acontecimiento lo constituirá la peregrinación a realizarse el 12 DE DICIEMBRE a la ciudad de Florida, para venerar a María Santísima en su histórica imagen que se conoce con el nombre de Virgencita de los Treinta y Tres.
¡12 DE DICIEMBRE DE 1937! he ahí la fecha señalada por nuestro Exmo. Prelado para que la gran familia diocesana se reúna bajo las bóvedas de su templo máximo, su casa común, la Catedral.
Allí, a la Catedral, cabeza y corazón de la Diócesis, donde la Virgen de los Treinta y Tres es objeto de afectuoso y esplendente culto, afluirá una ansiosa y devota multitud de peregrinos, que regresarán a sus hogares, a sus pueblos y a sus parroquias, como nuncios y portadores de grandes y selectas bendiciones.
¡12 DE DICIEMBRE DE 1937! fecha gratísima en que el espíritu diocesano, que es manifestación de sincero cristianismo, se traducirá en los contingentes de fieles, que, presididos por sus Párrocos, o sus representantes, se llegarán a Florida, para entonar sus mejores himnos, fusionar sus plegarias, hermanar sus sentimientos y palpitar al unísono pagando en común una deuda de gratitud a la Madre de Dios y Madre de los hombres.
Todos, por la gloria de Dios, por el bien propio de la Diócesis, de la Patria, deben TRABAJAR y ROGAR por el éxito de esa peregrinación.

------------------------------
---------------
1937 - Setiembre Peregrinación Aragone
EXHORTACIÓN PASTORAL
(Vida Diocesana Nº 45)

Una gran peregrinación a Florida

NOS, EL Dr. DON JUAN FRANCISCO ARAGONE, POR LA GRACIA DE DIOS Y DE LA SEDE APOSTÓLICA, ARZOBISPO DE MONTEVIDEO.

Al Venerable Cabildo Metropolitano, a nuestros amadísimos sacerdotes, miembros de la Acción Católica, Asociaciones piadosas y fieles, salud y bendición en el Señor,
Se ha cumplido, en el presente año la grata y memorable fecha del quincuagésimo aniversario de la coronación de la Santísima Virgen de Luján, Patrona de las Repúblicas hermanas Argentina, Paraguay y Uruguay.
Con tal feliz motivo, nos es sumamente grato el anunciaros la realización, de una peregrinación a la Florida, sede de aquella Diócesis donde se venera la piadosa Imagen de Nuestra Señora de Lujan, ante la cual rindieron sus banderas en época singularmente gloriosas los héroes de nuestra independencia nacional.
Tan solemne acto, para el cual encarecidamente os exhortamos, tendrá lugar el domingo 19 de Setiembre, de acuerdo con los horarios y programas que oportunamente serán anunciados.
Deseamos también que esta Peregrinación, al tiempo que sea un ferviente homenaje a Jesús Sacramentado y a la Santísima Virgen, constituya, además, un acto de preparación y adhesión al Segundo Congreso Eucarístico Nacional Argentino, que en la primera quincena de Octubre tendrá lugar en Lujan, y para el cual hemos sido deferentemente invitados,

Dada en Montevideo, a diez de Agosto de mil novecientos treinta y siete.
+ JUAN FRANCISCO,
Arzobispo de Montevideo.
Por mandato de Su Excia. Revma. se dará conocimiento a los fieles de la presente;
Exhortación, encareciendo la asistencia al acto anunciado.
Luis R. de Santiago, Secretarlo General.

------------------------------
---------------
1938 - PARROQUIA INMACULADA CONCEPCIÓN. RIVERA
(Vida Diocesana, Noviembre 1938)

Adhesión a la Peregrinación diocesana.
En la imposibilidad de tomar parte activa en la peregrinación diocesana por la distancia y horario de trenes la parroquia se adhirió a este acto con una nutridísima comunión general en una Misa con cánticos y plática.
De noche tuvo lugar la anunciada Hora Santa.
-----------------------------
---------------
1940 - I SÍNODO DIOCESANO
(Disposiciones Sinodales)

PEREGRINACIÓN DIOCESANA
423. Celébrese también en todas las parroquias el mes de María que los párrocos aprovecharán para ilustrar a los fieles acerca de la verdadera devoción mariana.
424. Teniendo esta Diócesis el privilegio incomparable de poseer la imagen de la SSma. Virgen, conocida con el nombre de Virgen de los Treinta y Tres, y guardada en la Catedral, cada año, el segundo domingo de noviembre, se realizará una peregrinación diocesana de todas las parroquias a Florida, con el fin de honrar pública, solemne y colectivamente a la Virgen bendita, que presidió desde su imagen veneranda, las gestas inmortales del ano veinticinco culminadas en la Declaratoria de la Florida. Piensen todos los párrocos, que ninguna parroquia debe dejar de estar representada en este acto por un buen número de fíeles, a pesar de todas las dificultades. Estas, los primeros años parecerán insalvables, pero todos esos sacrificios serán grandemente recompensados por la Madre de la divina gracia.
------------------------------
---------------
1941 - PARROQUIA DE SANTA ISABEL
(“Monografía de Paso de los Toros. P. Daniel Franco OMI. 1950. pág. 144)
COPIA DE LA IMAGEN DE LA VIRGEN DE LOS TREINTA Y TRES


En 1941 pedimos a la Casa Mosca, de Montevideo, nos hiciese una copia de tamaño natural, lo más fiel posible, de la estatua que se conserva en al catedral de Florida.
Creemos que lo ha conseguido bastante satisfactoriamente, con la artística imagen que se venera en el Altar de los Treinta y Tres de nuestro templo. Al mismo tiempo le pedimos hiciese otra grande para la Capilla que le dedicáramos en el Pueblo Centenario.
------------------------------
---------------
1942 - FRAY DOMINGO DE TACUAREMBÓ
(Boletín Especial. Parroquia Virgen de los Treinta y Tres. Maldonado)
CELEBRAMOS 65 AÑOS 1942 - 12 DE OCTUBRE - 2007

Estamos de fiesta. Los dones de Dios, se recuerdan, agradecen, festejan y nos alientan a perseverar.Nuestra querida capilla Virgen de los Treinta y Tres, está cumpliendo sus 65 años.
Ella fue una inspiración capuchina, con un aletear mariano. Aquí el Padre Domingo soñador en noches y obrador de días, quería comenzar a sembrar capillas, templos, monumentos, templetes. Quería a través de las obras, signos materiales, congregar la adhesión del espíritu, para llevar con su celo de discípulo misionero de Jesús, la Buena Noticia del Evangelio a todos los rincones de su parroquia.
El 25 de agosto de 1941 se coloca la piedra fundamental. No habiendo recursos, hubo que esperar seis meses, para iniciar las obras. Solo esfuerzos de rifas, beneficios, donaciones y oraciones, hizo posible que luego de pocos meses culminaran las obras.
El P. Domingo había sido el proyectista, el dibujante, el albañil y el peón trepando por andamios y cornisas.
El 12 de octubre de 1942, la presencia de Monseñor Dr. Antonio Maria Barbieri, dio relieve al acontecimiento. La bendición de una capilla, que por supuesto tendría la advocación a Maria. Y así nació y elevó la Capilla Virgen de los Treinta y Tres, que según nos decía el P. Domingo, era la primera en el País con el nombre de la Patrona de la Patria y que acompañaría a su "hermana mayor ", que preside desde Florida el Altar de la Patria.
Hace 65 años, el humilde primer barrio de Maldonado, llamado «La Cruz», y también «Bella Vista», estaba de fiesta. La estampa de una hermosa capilla, toda blanca, con sus líneas voluptuosas ahora se elevaba en la parte más alta del barrio. Con su forma acogedora, llegaba para cubrir las necesidades materiales, sociales y espirituales.
Desde aquel día a la fecha, resaltamos el 12 de diciembre de 1943, en la que con vibrante procesión desde plaza San Fernando se llevó ataviada con flores y banderas de la patria, la Imagen de la Virgen de los Treinta y Tres, obra del escultor Benjamín Daminco Mosca.
La Capilla fue luego testigo de pobrezas, y compartir el ritmo de un Maldonado más pujante. Pasamos por el 25 de agosto de 1992, y celebramos con nuestro fundador, nada menos que las bodas de oro, y posteriormente fuimos organizadores de la histórica visita de Imagen de la Florida, con motivo de los 500 años de evangelización en América.
El 5 diciembre del año 1993, Monseñor Rodolfo Wirz, la jerarquizara, designándola a la categoría de Parroquia, teniendo al padre Javier Castello, como su primer párroco.
El 30 de mayo de 1999 fue otro gran acontecimiento. El pueblo fernandino trasladó los restos del P. Domingo, hasta la Catedral. En su recorrido, pasó y se detuvo frente a las escalinatas de la capilla. La sombra de Domingo aun inquieta se fijó en el pavimento, mientras la luz de su espíritu se conjuntaba en comunión pascual. Una oración del P. Javier y de nuestra comunidad, prontamente arrebatada se presentaría seguramente ante Jesús y una bendición descendería a todos nosotros.
Si en verdad nuestra capilla se ha mantenido silenciosa, no por ello menos perseverante.
Así fue brindando, derrotero de valores cristianos. Centro de servicio comunitario, taller de costura y tejido, sede de acontecimientos vecinales, merendero, centro de ayuda social, espacio de oración, ambiente de alegre compartir, fuente de nacimientos a la vida de la gracia, mesa del Pan de Vida, testigo de alianzas de amor, mudo silencio de secretos del alma. y eco de reflexiones de vida.
Estimados feligreses y vecinos, además de recordar y agradecer fecha que celebramos, nos corresponde renovar un nuevo espíritu de discípulos misioneros, que Jesús sea conocido, amado y servido en los más necesitados, en el cuerpo y el alma.
Que María con su advocación de Virgen de los Treinta y Tres, tienda su maternal manto y bendiga a cada uno de nuestros queridos vecinos.
La Comunidad Parroquial
El jueves 8 de noviembre festividad de la Virgen de los Treinta y Tres celebramos las fiestas patronales.
Te invitamos a participar.

------------------------------
---------------
1942 -  PEREGRINACIÓN DIOCESANA A LA VIRGENCITA DE LOS TREINTA Y TRES
(Vida Diocesana N.° 107. Diciembre 1942)

Fue un día de gloria. Mucho sol y mucha luz en el ambiente; mucha alegría y mucha claridad en las almas.
Ya desde la mañanita anunciaron jubilosas las sonoras campanas de nuestra Catedral la fiesta magna del día, sin faltar las consabidas salvas de bombas.
Empezaron las Misas y empezaron a llegar peregrinos que iban presurosos a postrarse a los pies benditos de la Virgencita ante quien se prosternaron otrora para recibir su bendición como mansos corderos, los 33 Orientales, que luego se levantaron trocados en leones para cubrirse de gloria en la heroica gesta que los ha hecho eternamente famosos.
Era bello ver el pintoresco cuadro que presentaban las principales arterias de la Ciudad transitadas en diversas direcciones por peregrinos que ostentaban las insignias de tales con las banderas nacionales y pontificias artísticamente entrelazadas con el nombre de la Parroquia a que pertenecían. Durazno, con más de doscientos cincuenta peregrinos y una numerosa delegación de alumnos y alumnas de sus Colegios de San Luis y de la Inmaculada, respectivamente; Sarandí del Yí también con un buen grupo de alumnas del Colegio de la Virgen Niña; Isla Mala, Villa Sarandí, Fray Marcos, Paso de los Toros, Pueblo del Carmen, Casupá, San Gregorio de Polanco, Tacuarembó y Rivera.
La gente de Florida se empezó a echar a la calle y mezclóse entre los peregrinos forasteros como para dar la bienvenida a los que en tan gran número y con tanto entusiasmo venían a honrar a la Virgencita.
A las diez estaba anunciada la Misa de la Peregrinación. Pero muchísimo antes ya estaba llena la Catedral de fieles y por toda la plaza Asamblea bullía la muchedumbre que se iba agolpando a las puertas del Templo.
Llegada la hora hizo su entrada en el recinto sagrado, a los acordes solemnes del órgano, nuestro amadísimo Sr. Obispo, que tomó asiento en su trono. Seguidamente empezó la Santa Misa que celebró el Visitador de Parroquias Pbro. D. Agustín Torres y que siguieron con gran devoción todos los asistentes, entonándose en ella el Himno de la Virgencita de los Treinta y Tres y otros cantos religiosos.
Terminada la Misa subió al púlpito el Excmo. Sr. Obispo Monseñor Paternáin, y dirigió a todos los Peregrinos y fieles de Florida una hermosa y sentida alocución sobre la necesidad e importancia de la devoción a la Santísima Virgen.
Acto seguido se organizó la procesión con la venerada Imagen, que recorrió las calleas Gallinal, Ituzaingó, 25 de Mayo, Flores, Independencia, doblando otra vez por Ituzaingó para llegar hasta Gallinal, entre los acordes de la banda municipal y las plegarias y cánticos piadosos de la multitud que la aclamaba como a Reina y Madre.
De vuelta, se paró la comitiva en la puertas y atrios de la Iglesia Catedral y ante la bendita Imagen colocada de cara al pueblo sobre un. sencillo trono engalanado con banderas y multitud de flores naturales, se entonó el Himno Nacional que fue coreado por la concurrencia con gran precisión y entusiasmo.
Apagados los aplausos y vivas a la Virgencita, a la Religión y a la Patria Uruguaya Católica, tomó la palabra el Canciller del Obispado, Pbro. D. Pascasio Bresque, quien supo conmover a la muchedumbre que le interrumpió varias veces con espontáneos vivas y aplausos que se repitieron entusiastas al final de su bello discurso.
Entre cantos y aclamaciones entró de nuevo en el Templo la procesión y colocada la Santísima Virgen en su sitial y después de incensada por el Sr. Obispo se rezaron unas breves plegarias, impartiendo a los presentes, Monseñor, su bendición pastoral.

ACTO EN EL SEMINARIO
Por la tarde se realizó la Asamblea de todos los Peregrinos y fieles de Florida junto a la Cruz de la Misión que hay al lado del Seminario Diocesano en construcción.
A las cuatro de la tarde era ya inusitada la animación que ofrecía la hermosa avenida de Artigas y los alrededores del Seminario, llenos de ómnibus de los Peregrinos y coches particulares de los floridenses que venían para asistir al acto.
A las cuatro y treinta se empezó la ceremonia, entonándose un canto religioso. Acto continuo subió a la Tribuna el Presidente del Consejo Diocesano de los Jóvenes de la A. C. Rubén Costa Lizaso, quien expuso a grandes rasgos la obra eminentemente patriótica del Clero Nacional desde los primeros tiempos de la Independencia hasta nuestros días, teniendo frases de agradecimiento para el Clero Parroquial que en gran mayoría estaba allí presente al lado de sus feligreses. Su bien preparado discurso fue interrumpido varias veces por los calurosos aplausos de los presentes.
A continuación hizo uso de la palabra el Rector del Seminario Pbro. Pedro Hernández Duran con gran entusiasmo y aplauso de todos.
Con palabra clara y emotiva puso de manifiesto los terribles males que amenazan a nuestra Patria a causa de la vida poco cristiana que reina en el seno de las familias y de la sociedad, señalando el oportuno remedio en la acción de los sacerdotes, por cuyo aumento todos debían de bregar. Recordó las palabras de un político moderno que aseguraba que la falta de sacerdotes daña más al bienestar de la Patria que a la propia Religión.
Ante un altar improvisado se expuso al Santísimo Sacramento traído desde la Catedral y después de cantado, el Tantum Ergo se impartió la bendición a todos los allí reunidos.
Terminada la ceremonia se lanzaron al vuelo por primera vez las campanas del Seminario en obsequio de los Peregrinos. Estos pasaron al nuevo edificio y visitaron todas las dependencias del mismo quedando gratamente impresionados de la magnífica obra realizada en poco más de dos años por nuestro querido Sr. Obispo Monseñor Paternáin con la colaboración de los buenos católicos de la Diócesis.
Quiera Dios que pronto podamos verlo completamente terminado gracias a una santa comprensión de todos de lo que es la "Obra de las Obras" raíz y fundamento del progreso espiritual y del engrandecimiento de la Patria.

------------------------------
---------------
1942 - PARROQUIA DE SANTA ISABEL (Paso de los Toros)
(Vida Diocesana. Nº 107. Diciembre 1942)
Empieza a tomar forma la torre de nuestra Iglesia
Bajo la dirección del constructor señor Miguel A. Rubbo, prosiguen con todo entusiasmo los trabajos de nuestra Iglesia. La torre - antes esquelética forma de cemento - deja traslucir la esbeltez de sus líneas. El éxito, obra exclusiva de la Virgencita de los Treinta y Tres, es una realidad positiva, y a no mediar circunstancias adversas, dentro de muy breve plazo, los católicos de esta Villa podrán contemplar con inmensa satisfacción su completa terminación.
------------------------------
--------------
1942 - PARROQUIA SANTA ISABEL ( Paso de los Toros)
(Vida Diocesana. Nº 106. Noviembre 1942)

Comisión Pro Templo
Esta Comisión, previa licitación, adjudicó la obra de la terminación de Iglesia Parroquial al Sr. Miguel A. Rubbo el más capacitado contratista y frentista local. El Sr. Rubbo inició enseguida los trabajos y pronto la Villa de Santa Isabel verá cumplido sus anhelos de ver terminada su Iglesia, ya que el plan quinquenal, por gracia de la Virgen de los Treinta y Tres, es ya una realidad encontrándose suscriptos los 50 mil pesos necesarios para terminar la obra.


Peregrinación a la Virgencita de los Treinta y Tres
Se activa la campaña para la peregrinación a la Virgen de los Treinta y Tres. Reina mucho entusiasmo en las distintas esferas locales, y si se consigue un expreso - ya que por falta de combustibles se han suprimido - esperamos que este año sea muy numeroso el número de peregrinos, en acción de gracias por el señalado favor obtenido para nuestra parroquia.
------------------------------
---------------
1942 - PEREGRINACIÓN DIOCESANA.
EXHORTACIÓN PASTORAL
(Vida Diocesana Nº 104 Setiembre 1942)

NOS, Don MIGUEL PATERNAIN, de la Congregación del Santísimo Redentor, por la gracia de Dios y de la Santa Sede, OBISPO DE FLORIDA Y MELÓ.
Muy queridos hijos:

Nuestras Constituciones Sinodales señalan el segundo domingo de Noviembre de cada año para rendir a la Madre de Dios y Madre nuestra amadísima, la Santísima Virgen María, en su venerada imagen de la Virgencita de los Treinta y Tres, el homenaje colectivo de veneración, de agradecimiento y de amor de la Diócesis entera.
Ese gran día mariano diocesano, que este año ocurre el 8 del próximo Noviembre, ya se acerca, amadísimos en el Señor. Y ¿no es verdad que este anuncio conmueve profundamente vuestros corazones de Hijos de la Virgen y de sinceros patriotas?
Sois hijos de la Virgen; y bien sabéis que Ella, según el sentir unánime de todos los Padres y Doctores de 1a Iglesia, es la Medianera de todas las gracias. Sois hijos de la Virgen, y ¡cuántas veces la habéis aclamado en las Letanías como "Auxilio de los cristianos", "Consoladora de los afligidos", "Reina de la paz"! ¿No necesitamos acaso, hoy más que nunca, de su intercesión poderosa y de su auxilio de Madre"? ¿No tiene sed de consuelos nuestro pobre corazón? ¿No deseamos ardientemente con el Vicario de su Hijo, el Papa, que Ella alcance de Jesús para el mundo la deseada paz?
Sois también patriotas y patriotas de verdad. ¿Cómo no desear entonces venir a honrar a María en este mismo solar histórico de la Patria, y en aquella misma sagrada imagen suya queridísima que veneraron los heroicos Treinta y Tres, y ante la cual se prosternaron aquellos ilustres varones de la Asamblea de la Florida presididos por el sacerdote Juan F. Larrobla?
¡Oh!, sí; venid a Florida el 8 de Noviembre; venid aún a costa de sacrificios, venid numerosos de todas las parroquias de la Diócesis, para que unidos todos, formando un solo corazón y una sola alma podamos venerar a María, aclamar a María, y levantar hasta el trono de María, Omnipotencia suplicante, nuestra súplica ferviente y pública por nuestras propias necesidades y por las de nuestros seres queridos, por nuestra Patria, por la Iglesia, por el mundo.
Vuestro Obispo os espera; y entre tanto, os bendice con paterno afecto.
Los Sres. Párrocos comenzarán de inmediato, cumpliendo las disposiciones sinodales, la preparación de este acto para que resulte verdaderamente grandioso.
Esta Exhortación será leída a los fieles en todas las Misas del domingo siguiente a su recepción.

Dada en nuestra sede, el 25 de Agosto del año del Señor 1942 aniversario de la Asamblea de la Florida.
+ MIGUEL
Obispo de Florida y Meló.
Por mandato de Su Excia. Rvma.
PASCASIO J. BRESQUE,
Canciller del Obispado.
------------------------------
---------------
1943 - PARROQUIA SANTA ISABEL - CAPILLA PUEBLO CENTENARIO
(Monografía de Paso de los Toros . P. Daniel Franco OMI. 1950. pág.83)

El Pueblo Centenario se halla ubicado en el Departamento de Durazno, y por lo tanto pertenecía a la Parroquia de San Pedro. En 1943 el Excmo. Sr. Obispo Diocesano juzgó oportuno transferirlo a la Parroquia de Santa Isabel modificando los límites con la de Durazno.
Concedido esto, se trató de construir inmediatamente una Capilla, aunque fuera modesta, que fue dedicada a la Virgen Santísima bajo la patriótica advocación de “Virgen de los Treinta y Tres”, en acción de gracias por los señaladísimos favores obtenidos por su mediación para esta Parroquia. El terreno donde se halla ubicada fue donado por la Sra. María E. Bengoechea de Volpe, quien, junto con su esposo, hicieron de Padrinos en la bendición de la Piedra Fundamental, ceremonia que se realizó el 29 de Abril de 1945. La Capilla se construyó ese mismo año, aún cuando no fue bendecida solemnemente hasta el 23 de Marzo de 1947.
-----------------------------
---------------
LA VIRGENCITA DE LOS TREINTA Y TRES
(Vida Diocesana Nº 134-135. Abril-Mayo 1945)

Saldrá de su casa Florida para atravesar los campos de nuestra Diócesis y derramar, sin duda, sobre ellos, sus bendiciones maternales, y presidir en Melo los actos conmemorativos del congreso. Estos se realizarán en octubre, los días 11, 12, 13 y 14.
Grabe esa fecha y prepárese para tan gran acontecimiento.
Prepárese con tiempo para asistir a los actos conmemorativos del primer Congreso Eucarístico Diocesano de Melo.
-------------------------------
--------------
1945 – TACUAREMBÓ. PREPARACIÓN PARA LA VISITA DE LA VIRGENCITA DE LOS TREINTA Y TRES
Carta del P. Mario Rodríguez

Tacuarembó 18 de mayo de 1945

Excmo. y Rvdmo Sr. Don Miguel Paternain.
Excmo. y Rvdmo. Señor:

Fui a las Toscas de donde vine ayer después de pasar diez días en aquella zona. Quedaron muy entusiasmados con la noticia de la visita de la Virgencita de los Treinta y Tres y programarán una gran recepción.
-----------------------------
--------------
¡ARACHANES!¡FLORIDENSES!¡DIOCESANOS!
(Vida Diocesana Nº 136. Junio 1945)

Preparaos desde ya para las grandes fiestas marianas de octubre en conmemoración del Primer Congreso Eucarístico Diocesano en Melo del pasado noviembre.

Centro de esas fiestas, dulcísimo imán que atraerá hacia sí miles y miles de corazones creyentes y patriotas, será la histórica Imagen de la VIRGENCITA de los TREINTA Y TRES
--------------------------
-------------
Pbro. J.M. FONTES ARRILLAGA
(Vida Diocesana Nº 136. Junio 1945)

Por ti Virgen María
Que fuiste la primera
Guardiana de la gloria
De nuestros Treinta y Tres.
Que el corazón de Cristo
Y el solo de la bandera
Sobre la Patria extiendan
Su santa esplendidez
------------------------------
---------------
OCTUBRE 11, 12, 13 Y 14
(Vida Diocesana Nº 136. Junio 1945)

En estos días, Melo, la Ciudad del Congreso, y conmemorando el primer aniversario de los inolvidables días eucarísticos del pasado noviembre, honrará con un homenaje sin segundo, cálido de fe, de entusiasmo, de amor filial a la MADRE de DIOS en la venerada Imagen de la Virgencita de los Treinta y Tres.
----------------------------
-------------
Carta del P. Mario Rodríguez
Tacuarembó, 20 de junio de 1945.

Excmo. y Rvdmo. Sr. Don Miguel Paternain
Excmo. y Rvdmo. Señor: …

La solución que se me ocurre para poder visitar Minas de Corrales y Rivera, sería la siguiente:

Martes 16 – Llegada y recepción en las Toscas
Miércoles 17 – Misa de Comunión en las Toscas. A las 10 hs. Confirmaciones
Jueves 18 – Llegada y recepción en Minas de Corrales
Viernes 19 – Misa de Comunión en Minas de Corrales
Sábado 20 – Llegada y recepción en Tacuarembó
Domingo 21 – Los actos que habíamos programado en Tacuarembó
Lunes 22 – En un tren que llega a Rivera a las 10 de la mañana, llegada a Rivera
Martes 23 – Misa en Rivera y los actos que se programen
Miércoles 24 – En tren a Paso de los Toros que ha de llegar alrededor de las 12
Jueves 25 – Viaje a Durazno
Viernes 26 – A Sarandí Grande
Sábado 27 – Llegada a Florida

Creo que sería la única forma de combinar para poder hacer la visita a Rivera y Minas de Corrales.
------------------------------
---------------
Carta de P. Miguel Paternáin

Melo, 27 de Junio de 1945



Sr. Pbro. Don Mario S. Rodríguez,
Cura Párroco de S. Fructuoso
Tacuarembó

Estimado Mario; aquí recibí tu carta, que agradezco. Creo que complica mucho los viajes a Minas de Corrales y Rivera, además que lleven en tren a la Virgen no parece conveniente, no pudiendo llevarle como se debiera. Así que escribí al P. Lor poniéndole las razones de no ir a Rivera, y diciéndole que me gustaría que en Tacuarembó se hiciera una Concentración de católicos de Rivera y Minas de Corrales. Tú procura ahora algo en ese sentido, pues el tiempo pasa y cuando menos lo pensemos estaremos en Octubre.
Ahora, hablamos con el P. Ramón, parece que en Fraile Muerto bastaría una visita corta y que quedar hasta el martes 16 sería mucho. Entonces, ¿no sería mejor llegar a Las Toscas el 15 de tarde? Así se da más tiempo a aquella gente. Dime, pues, si se podrá llegar a Las Toscas el lunes 15 para fijarlo en el programa. La contestación me la mandas a Florida, pues yo seguiré para Río Branco, Vergara y T. y Tres.
Recuerdos al P. Emilio.
Lo de Aurea irá al volver a Florida

Affe.
Miguel Paternáin
Obispo de Florida y Melo
--------------------------
---------------

Carta del P. Domingo A. Lor
Rivera, junio 27 de 1945


Excmo. y Rvdmo. Mons. Don Miguel Paternáin
Obispo de esta Diócesis:
                                     Florida

Excmo. y estimado Mons.

Recibí la carta de V.Exc. ¡Qué pena que no pueda llegar hasta acá la Virgencita con V. Exc.
Los de acá están celosos con los de Tbó; dicen que todos los mimos son para ellos y que Rivera no es hija, sino entenada.
¿No habría posibilidad todavía, de las Toscas a Vichadero, de Vichadero acá y el regreso por Corrales a Tbó?
Creo que podrá ir a Tbó. un buen número; sobre todo consiguiendo un expreso que pueda salir el domingo y regresar el mismo día.
Lo malo es para nosotros en domingo; venir, por lo menos tendrá que quedar, el P. Carlos quería ir, yo también, y tendré que quedar yo, si la Providencia no ha previsto otra cosa para entonces.
Saluda respetuosamente a V. Exc. y Rvdma. A.P.
Domingo A. Lor

--------------------------
---------------
HACIA ELLA
(Vida Diocesana Nº 137. Julio de 1945)

Entre las joyas que el Uruguay puede llamar suyas, hay una de inestimable valor, que es un verdadero tesoro de riqueza sin igual, que en admirable síntesis de fe y patriotismo, al hablarnos de la patria terrena nos recuera la patria celestial: es una imagen que la tradición no ha legado con el nombre de “Virgencita de los Treinta y Tres”.
Esa bendita imagen, es la que veneró nuestro pueblo cuando apenas balbuceaba las palabras libertad e independencia; es la que, desde una colina del Pintado, presidió la ruda labor de nuestros mayores; la que, en 1811, vió a sus plantas postrado al primer escuadrón de patriotas; la que, en 1815, recibió a los hijos que, tras un duro y fatigoso batallar, volvían salpicados de barro y de sangre, y nimbados de gloria.
Esa bendita imagen recibió el homenaje de amor y devoción de Rivera que, ante ella, se arrodilló piadosamente, para asistir a la Misa de celebrara Fray Benito Lamas; recibió el homenaje de amor y devoción de Lavalleja que, acompañado por sus bravos soldados, gobierno y pueblo, inclinó ante ella la tricolor bandera que no había de inclinarse jamás ante ningún poder de la tierra; recibió el homenaje de amor y devoción de los Convencionales de la Asamblea de la Florida que, presididos por el Padre Larrobla, se postraron ante ella después de labrar el Acta de nuestra Independencia; recibió el homenaje de amor y devoción de Oribe que, a más de invocarla y venerarla, le ofreció áurea corona.
Y esa bendita imagen, en la sucesión de los años, ha continuado recibiendo en todas las épocas y de todos los rincones de la República, el homenaje de amor y devoción de los verdaderos orientales; a ella han acudido en la seguridad que si invocación era agradable a la Madre de Dios y propicia a la Patria.
Y esa bendita imagen, en la pequeñez de las dimensiones de su talla y en la grandeza inconmensurable de su significado, con su perfume de historia patria y sus contornos de algo sagrado, pasará por los campos de nuestra Diócesis, visitará las principales Parroquias y se detendrá en Melo para presidir los actos conmemorativos del Congreso. Ante este acontecimiento que se avecina, ¿qué hacer, qué decir, qué pensar?
Una sola cosa pensemos, digamos y hagamos.
Pensemos que debemos honrar a la Madre de Dios y de los hombres en esa bendita imagen; digamos, en público y en privado, que queremos honrarla; hagamos de manera que nosotros y los que están cerca de nosotros la honren de verdad.
Con ello demostraremos nuestra noble prosapia espiritual y terrena: la espiritual, porque demostraremos ser verdaderos cristianos al honrar a la Madre de Cristo; la terrena porque demostraremos ser verdaderos patriotas al seguir el ejemplo de los creadores de nuestra Patria.
----------------------------
--------------
OCTUBRE DE 1945
(Vida Diocesana Nº 137. Julio de 1945)

La Santísima Virgen, en su bendita Imagen de la Virgencita de los Treinta y Tres, bendecirá, a su paso triunfal, los campos, los pueblos, las parroquias de la Diócesis, y sonreirá a las almas como sonriera otrora, desde el rancho humilde que le servía de trono, a los patriotas de la Asamblea del Florida y a los bravos Treinta y Tres.
¡Jesús, mi amor! ¡María, mi esperanza! (S. Alfonso)
----------------------------
--------------
¡ARACHANES!¡FLORIDENSES!¡DIOCESANOS!
(Vida Diocesana Nº 137. Julio de 1945)

Preparaos desde ya para las grandes fiestas marianas de octubre en conmemoración del Primer Congreso Eucarístico Diocesano en Melo del pasado noviembre.
Centro de esas fiestas, dulcísimo imán que atraerá hacia sí miles y miles de corazones creyentes y patriotas, será la histórica Imagen de la VIRGENCITA de los TREINTA Y TRES.
“¡María!...tu nombre es tesoro de amor, fuente de ternura, áncora salvadora, luz del alma, consuelo en nuestros infortunios, socorro en nuestros desfallecimientos, fortaleza y escudo de nuestra debilidad, lazo de unión entre Dios y el hombre, esperanza de nuestra dicha eterna.”
¡Sálvanos María!...¡Vida, dulzura, esperanza nuestra!
-----------------------------
---------------
SED DEVOTOS DE SANTA MARÍA
(Vida Diocesana Nº 137. Julio de 1945)

DIOCESANOS DE FLORIDA Y MELO: Mostrad esa acendrada devoción mariana en el próximo mes de Octubre, honrando de la mejor manera posible a la Virgen en su venerada Imagen de la Virgencita de los Treinta y tres.
Una de las cosas mas consoladoras para el cristiano es la valiosísima intercesión de María.
Los ejemplos que la demuestran son numerosísimos.
Uno de ellos es el siguiente:
                                        La Reina Blanca de Castilla, madre del rey de Francia Luis IX, era conocida en todo el reino por su ánimo misericordioso y dado a la compasión. Un día, en el momento que paseaba con las damas y caballeros de su séquito junto a una de las prisiones de París, un preso desde una de las ventanas imploró piedad a la señora. “Yo por mi, no puedo darte la libertad que tanto anhelas, pero intercederé para que te sea concedida”, le contestó la reina; y sin perder un solo instante llegóse donde estaba su hijo diciéndole: “Por el amor que me tienes y el que yo te tengo concede la libertad a ese pobre infeliz que se pudre en su mazmorra”. Así lo hizo el rey, y disponiendo que el preso fuese traído a su presencia, antes de soltarle, le habló de esta manera: “Eres libre, pero no olvides que todo lo debes a mi madre; sin ella nada habrías conseguido”.
Así el Rey de los cielos no sabe denegar una petición de su Madre, como con harta claridad nos lo enseña lo acaecido en las Bodas de Caná, donde, el Salvador, a instancia de las súplicas de su Madre, obró su primer milagro.
----------------------------
---------------
Carta del P. Mario Rodríguez
 
Tacuarembó 3 de julio de 1945


Ecxmo. y Rvdmo. Mons. Don Miguel Paternain
Excmo. y Rvdmo. Señor:

Podemos estar como S.E. dice el lunes en las Toscas y quedar hasta el viernes, para venir el viernes a quedarnos a unas cinco leguas de Tacuarembó. O, si S.E. prefiere, podemos el miércoles ir de las Toscas a Minas de Corrales, para venir el viernes a quedarnos a cinco leguas de ésta, probablemente en casa de un hermano de María Esther Castrillón, donde pasaríamos magníficamente, pues tanto él como su sra. son gente muy piadosa.
Ya hemos tratado el asunto en la Junta y se hará una campaña intensa. En Setiembre iré yo a las Toscas a preparar las cosas, aunque allí ya anuncié y quedaron muy animados. Ya tengo el auto para todos los viajes. A fines o después de la primera quincena de este mes, iré yo a Montevideo aprovechando que Sosa andará por aquí, para dejar listo todo lo concerniente a nuestro liceo. La solicitud hay que hacerla en septiembre y cuando se haga, hay que tener ya todas las cosas. Entonces llegaré por ahí y, si S.E. tiene alguna novedad sobre lo de la Virgencita me lo dirá.
María Esther Castrillón está enferma con tifus.
Por lo demás no hay novedad.

Besa reverente el anillo de S.E.
P. Mario Rodríguez

Me gustaría que con motivo de la visita de la Virgencita, se oficializara la Acción Católica, pero esto lo pensaremos. El chofer será siempre Echenique, que ya está haciendo todos los planes.
--------------------------
--------------
LEMA Y DILEMA
(Vida Diocesana Nº 138. Agosto de 1945)

UN PAR DE MESES MÁS, y la bendita imagen de la Virgencita de los Treinta y Tres saldrá de Florida a realizar su paseo triunfal por nuestra Diócesis. A su paso se iluminarán los ojos, se doblarán las rodillas, se juntarán las manos, vibrarán los labios y hablarán los corazones. Hablarán para decirle a la Virgen, que la veneramos porque es la Madre de Dios; que la amamos porque es nuestra Madre; que la honramos porque es nuestra Soberana, que la invocamos porque es nuestro auxilio.
En su manto lleva los colores de aquellas bandera que llevaba grabado en su franja central un lema; un lema que quedó grabado para siempre en el terreno de los hechos con caracteres indelebles. Lo grabaron los Treinta y Tres Orientales con la sublimidad de su espíritu, con la pujanza de sus brazos y con la fortaleza de sus corazones: “Libertad o Muerte”.
Este fue el lema que, en años duros de temores y esperanzas, de posibles victorias y probables derrotas, adoptaron y cumplieron los componentes de la Cruzada Libertadora.
Y, libertad o muerte, es el dilema que se plantea en tdos los años y a todos los hombres; o la libertad de los hijos de Dios, o la esclavitud de los hijos del mundo.
Entre estos dos términos se debate y desenvuelve la existencia de los seres humanos; o en la posesión de la verdad “que hace libres”, o en el camino equivocado de la mentira, que hace esclavos. Fuerzas opuestas chocan y luchan en el hombre: interiores y externas, secretas y manifiestas, naturales y sobrenaturales. Unas, lo empujan hacia el bien, hacia la verdad, hacia la libertada; otras, hacia el mal, hacia la mentira, hacia la esclavitud.
Los esclavos se arrastran por el suelo y se hunden en el lodo mal disimulado por pétalos de rosas; los libres caminan con la frente erguida, aunque deban pisar alguna espina.
Para avanzar con la frente erguida es necesario poner bien alto la mirada; para ponerla bien alto, fijemos nuestros ojos en la resplandeciente imagen de María. El culto que tributamos a su imagen va dirigido a la Madre de Dios y Madre de los hombres. Y la Madre de Dios y de los hombres sabe obtener de Dios todo lo que precisa el hombre.
Ella que es el camino, el puerto y el árbol de la vida, ahuyentará la muerte, la muerte irremediable, la muerte eterna que introduce el pecado; junto con esta ahuyentará las otras muertes, que son los demás males.
Ella nos hará libres, pues nos pondrá en posesión de la Verdad, que es Cristo, y Cristo nos pondrá en posesión de la verdadera vida, que es la gloria.
Sin Ella, no podemos llegar a Cristo, y sin Cristo no podemos llegar a la gloria.
Por tanto: veneremos, amemos, honremos e invoquemos a María. Y para invocarla, honrarla, amarla y venerarla, tributemos el culto debido a sus imágenes. El culto debido a su imagen, a esa pequeña imagen llamada “Virgencita de los Treinta y Tres”, que vió a sus plantas un pueblo que se redimía inclinando ante Ella una bandera en que brillaban dos palabras: “Libertad o Muerte”
----------------------------
--------------
(Vida Diocesana Nº 138. Agosto de 1945)

AYUDE a preparar los grandiosos festejos en honor de la “Virgencita de los Treinta y Tres”, difundiendo la Revista VIDA DIOCESANA.
Suscripción: $ 1.50 al año.
-----------------------------
-------------
11. 12, 13 Y 14 DE OCTUBRE DE 1945
(Vida Diocesana Nº 138. Agosto de 1945)

MELO, la ciudad del Congreso Eucarístico, celebrará el aniversario de aquel inolvidable acontecimiento, con la misma fe, con el mismo amor, con las mismas vibraciones de entusiasmo que en los días memorables de Noviembre de 1944, bajo la mirada dulcísima de la Virgencita de los Treinta y Tres.
“María es nuestra Madre, Madre incomparable en bondad y ternura. Dios ha escrito esta verdad en la portada de la historia de nuestra Redención, y la ha grabado en lo más secreto de nuestro corazón”
------------------------------
---------------
Carta del P. Mario Rodríguez

Tacuarembó 14 de agosto de 1945


Excmo. y Rvdmo. Mons. Don Miguel Paternain
Excelentísmo Señor:

Ha surgido un pequeño tropiezo en los preparativos para la fiesta de la Virgencita. Resulta que se ha establecido la fecha 21 de Octubre para la Exposición anual de ganadería y de toda industria. Esta exposición, se hace todos los años con un gran bombo social. Puede decirse que concurre a ella todo el pueblo. Los hoteles se llenan completamente, de modo que deben habilitar otros locales para hospedaje. Vienen siempre Ministros, etc.,etc.
Esto nos servirá por un lado y nos estorbará por otro. Nos ayudará para la recepción de la Virgencita, pues la gente ya está desde el sábado e igualmente nos ayudará para la Misa con Asistencia Pontifical, pues la Inauguración solemne siempre se hace de tarde, empezando a las 14.30 con los discursos y etc. que llegan hasta la tardecita.
Nos estorbará para la proyectada procesión de Parroquia a Parroquia, pues de tarde no podemos contar con la gente, porque está en la Exposición.
Terminada la Exposición hacen una recepción en la Intendencia en la que invitan a todo bicho viviente y luego vienen los bailes en los clubes. Creo pues que no se podrá hacer la procesión. De mañana saldría también muy larga y es hora impropia por las comidas, etc, etc.
Yo he pensado que se puede obviar esto en la siguiente forma. El sábado y el domingo de mañana dejar todo como se había planeado, incambiado.
El domingo de tarde, suprimir la procesión y establecer los siguientes actos: a las 14 súplicas por nuestros enfermos y pobres – a las 16 presentación de la niñez a la Santísima Virgen - a las 18 concentración en la Parroquia de la Santa Cruz y recepción de la Virgencita que se llevaría en privado. Podría bajarse la Imagen una cuadra antes y llevarla en procesión. En la Parroquia de la Santa Cruz se velaría la Imagen esa noche y el lunes se diría la misa de despedida. Esto creo que sería lo mas conveniente. Porque hacer una procesión de Parroquia a Parroquia con ausencia de mucha gente resultaría una mascarada
Con estos actos, en cambio, con un regular concurso de pueblo, ya resulta digno. El 28 D.M. voy a ir a las Toscas. Para estar una semana y dejar todo combinado ya se ha empezado la propaganda en ésta. En las Toscas murió el viejito Azpiroz. Los vales de nafta aun no han venido
La cuestión hoteles va a estorbar a los de Rivera, pues si consiguen hospedaje tendrán que pagarla como buenos.

Sin más pide la bendición de S.E.
Afmo. In Xto. Mario S. Rodríguez
-----------------------------
--------------
EXHORTACIÓN PASTORAL
(Vida Diocesana Nº 139. Setiembre 1945)

NOS, Don MIGUEL PATERNAIN, de la Congregación del Santísimo Redentor, por la Gracia de Dios y de la Santa Sede, OBISPO DE FLORIDA Y MELO.
Venerables Sacerdotes y amados hijos:
Nos vamos acercando ya a los dichosos días de octubre en que toda la Diócesis tributará filiales homenajes a la Santísima Virgen.
No dudamos que esos homenajes serán grandiosos, solemnísimos, apoteósicos, y constituirán un hecho sin precedentes en la historia de la Diócesis. El entusiasmo que personalmente hemos notado en todas partes al dar a conocer la fausta nueva de la visita de la Virgen de los Treinta y Tres, nos hacen concebir tan dulces esperanzas.
¡Cuántas gracias derramará María al pasar en su graciosa e histórica Imagen por todos los caminos de la Diócesis!
Preparémonos, pues, hijos muy amados, preparémonos fervorosamente para recibir embajada tan excelsa.
Esa sagrada Imagen de María, reliquia querida de aquellos ya lejanos y heroicos tiempos de nuestra Independencia, vió postrados a sus plantas a los patricios de la Asamblea de Florida, presididos por el Padre Larrobla, su egregio Presidente, y ante Ella inclinaron también su bandera tricolor los inmortales Treinta y Tres.
Pero, además de ese valor histórico inapreciable, esa Imagen representa a la Santísima Virgen María, a la augusta Madre de Dios y amabilísima Madre nuestra.
¿Quién podrá expresar adecuadamente con palabra humana lo que es María?
Los Santos nos enseñan que María es la criatura más perfecta, más hermosa, más santa y amable de todas las criaturas. San Juan Crisóstomo la llama “honor de la raza humana”; San Cirilo: “abismo de milagros”; San Ignacio Mártir: “prodigio celestial”; San Bernardo: “la obra maestra de Dios”; y San Anselmo, como en magnífico resumen, expresa: “sólo Dios es más grande que María”.
La Virgen es nuestra Madre. Siendo Ella Madre de Jesucristo, Cabeza del Cuerpo Místico, es también Madre de los redimidos, que somos los miembros de ese Cuerpo. Verdad ésta que Jesucristo quiso proclamar oficial y solemnemente, cuando, clavado en Cruz y agonizante, pronunció estas palabras de divina caridad y de inefable consuelo: “He aquí tu Hijo, he ahí tu Madre”.
La Virgen es nuestra más grande Bienhechora. Todo cuanto tenemos de bueno se lo debemos a Ella, y todo lo que nos falta, de Ella nos ha de venir, conforme a lo que enseña San Bernardo: “Dios ha querido que todo bien pase por manos de María”.
La Virgen es nuestra esperanza. “Vida, dulzura, esperanza nuestra”, le decimos con emoción todos los días en la Salve. San Alfonso la llamaba así, repitiendo siempre, hasta los últimos momentos de su larga existencia: “María, mi esperanza”; y añadía también el santo Doctor: “El verdadero devoto de María no se condenará”.
Ved, pues, amados hijos, cuántos motivos santísimos y poderosísimos tenemos para rendir a la bendita Imagen de María nuestros mejores y fervorosos homenajes. Todo lo que hagamos en ese sentido será siempre poco y exiguo, porque nunca honraremos a la Madre de Dios y Madre nuestra celestial como Ella lo merece.
Preparémonos, pues, dignamente, para recibir embajada tan excelsa. Y cuando llegue la hora feliz, salgamos al encuentro de María para aclamarla llenos de regocijo, de entusiasmo, de fervor patriótico y de amor filial, y digámosle: “Tú eres la gloria de Jerusalén, Tú la alegría de Israel, Tú el honor de nuestro pueblo”; pero a la par que la aclamamos y le cantamos así, ofrezcamos a la Virgen lo que Ella más quiere, el obsequio más grato a su Corazón: almas santificadas por la gracia divina, almas que amen a Jesucristo con todo el corazón, almas encendidas en el celo de la gloria de Dios y de la salvación de sus hermanos.
Haciéndolo así, en este paseo triunfal, María de los Treinta y Tres derramará a raudales sobre esta Diócesis, consagrada en día inolvidable a su Corazón maternal, sus misericordias y celestiales ternuras.
Os bendecimos de corazón.
Esta Exhortación será leída a los fieles en todas las Misas del domingo siguiente a su recepción.

Dada en Florida, el 15 de Agosto del año del Señor mil novecientos cuarenta y cinco, fiesta de la Asunción.

+MIGUEL
Obispo de Florida y Melo
Por mandato de Su Excia. Revma.
PASCASIO J. BRESQUE
Canciller del Obispo.
-----------------------------
--------------
LA BANDERA DEL CONGRESO EUCARÍSTICO
(Vida Diocesana Nº 139. Setiembre 1945)

NUESTROS LECTORES recordarán que, terminado nuestro Primer Congreso Eucarístico Diocesano, nuestro Prelado anunció que la Virgencita de los Treinta y Tres presidirá, en Melo, los actos del primer aniversario del Congreso, y que la Bandera Patria que flameó durante aquellos días inolvidables junto al Altar del Parque Zorrilla, sería depositada en rico cofre, como perpetuo recuerdo, en la Iglesia Matriz de aquellas ciudad.
La realización del Congreso Eucarístico de Salto, precisamente en los días en que ocurre el aniversario del nuestro, ha hecho anticipar la fecha para los días 11, 12, 13 y 14 de octubre.
En cuanto a la Virgencita de los Treinta y Tres ya saben los lectores de VIDA DIOCESANA, y lo sabe la Diócesis entera, lo que estamos preparando. Pero, ¿la Bandera del Congreso?...
Ella estará este año junto a la Virgen de los Treinta y Tres en los días en que la Santa Imagen de María permanezca en Melo; el domingo 14 de octubre, cuando llegue la Procesión al Parque Zorrilla de San Martín, será izada en el mismo lugar del pasado año; terminando el acto, se llevará de nuevo a la Matriz, siempre junto a la Imagen de la Madre de Dios, y entonces será colocada definitivamente bajo la mesa del altar del Sagrado Corazón, en cuyo lugar se está preparando el artístico cofre. Allí, una hermosa placa dirá a todos los que vienen y a las generaciones del porvenir:

AÑO DEL SEÑOR 1944
Esta Bandera Nacional, bendecida por el Excmo. Señor Obispo de Florida y Melo en la mañana del 10 de Noviembre, estuvo izada junto al Altar del Primer Congreso Eucarístico Diocesano levantado en el Parque Zorrilla de San Martín de esta ciudad de Melo hasta la tarde del 12 del mismo mes.

¡SEÑOR, SALVAD LA REPÚBLICA!
-----------------------------
---------------
TODOS LOS DÍAS RECE TRES AVEMARÍAS
(Vida Diocesana Nº 139. Setiembre 1945)

PARA QUE LA VIRGEN, AL PASAR POR NUESTROS CAMPOS, POR NUESTROS PUEBLOS, POR NUESTRAS PARROQUIAS, NOS ALCANCE DEL SEÑOR GRANDES GRACIAS EN EL ORDEN ESPIRITUAL Y EN EL ORDEN MATERIAL

Todos los días tres Avemarías
----------------------------
-------------
(Vida Diocesana Nº 139. Setiembre 1945)

EL MES DE OCTUBRE, mes en que la Santísima Virgen se paseará triunfalmente por nuestra Diócesis, debe ser un mes de ORACIÓN. Ninguna oración mas grata a la Virgen que el ROSARIO.
Que el ROSARIO se rece ininterrumpidamente, día y noche, delante de la Imagen Sagrada de María. Forme Ud. en los coros de su parroquia o de su Pueblo para el ROSARIO CONTÍNUO.
-------------------------------
---------------
OCTUBRE DE 1945
(Vida Diocesana Nº 139. Setiembre 1945)

La Santísima Virgen, en su bendita Imagen de la Virgencita de los Treinta y Tres, bendecirá, a su paso triunfal, los campos, los pueblos, las parroquias de la Diócesis, y sonreirá a las almas como sonriera otrora, desde el rancho humilde que le servía de trono, a los patriotas de la Asamblea de la Florida y a los bravos Treinta y Tres.
“¡Jesús, mi amor! ¡María, mi esperanza!” (S. Alfonso)

------------------------------
----------------
Carta del P. Mario Rodríguez

Tacuarembó 10 de setiembre de 1945


Excmo. y Rvdmo. Sr. Don Miguel Paternáin
Estimadísimo Señor: ….

Ruego me diga si a las Toscas podrá llegar de Fraile Muerto a las cuatro de la tarde, el 15, me dicen en las Toscas que de Fraile muerto, a las Toscas hay dos hs. De viaje. No se si almorzarán en Fraile muerto o Paso Aguiar. La hora de las cuatro sería muy buena para la gente que vive a varias leguas y asi podrán volver a sus casas con luz. Este dato lo quería saber pronto porque voy a mandar los volantes a campaña y quiero tener bien los horarios, los caminos están buenos. Yo fui después de las lluvias y no hubo dificultad en ningún lado, tengo un poco de dificultad en conseguir sacerdotes para la misa de asistencia. Parteli me dijo que de allí difícilmente vendrá algún sacerdote. Tal vez convendría S.E. le hiciera una insinuación en ese sentido.

Sin más besa reverente el anillo pastoral y pide la bendición de S.E.

Afmo. In Xto.
Mario S. Rodríguez
----------------------------
--------------
1945 - Preparación de la visita de la Virgen en Tacuarembó
Libro de Actas de Mujeres de Acción

Acta Nº 60
En la ciudad de Tacuarembó, el día miércoles 25 de julio de 1945, siendo las 17 hs., bajo la dirección del Sr. Cura Párroco Pbro. Mariol S. Rodríguez, presidiendo, la Pta. Sra. Filomena A. Dini de Aldabe, actuando en Sª Blanca S. Viñas Jáuregui, se reunió el Centro de mujeres de la Parroquia de San Fructuoso.
Luisita Calcagno. Maria Luisa L de Imaz. Emilia Ortiz de Albarez. Aurea Bentancur. Gabina B de Correa Espinosa. María H. Reggi e Isaura V. de Aranquiz.
Con aviso faltaron.
Nélida López de Castro. Mercedes B. de Ferreira. Ciriaca Ramos. Juana S. de Cáceres. Dina G. de Cappetta y Celedonia P. de Cortada…
Con motivo de la próxima visita que, por gracia de Dios, hará a nuestra ciudad la bendita imagen de la Virgencita de los 33, se ha dado comienzo para que los actos a realizarse tengan la solemnidad que se merece la bendita viajera, que llegará a este pueblo, trayendo polvo nuevamente de los caminos de esta bendita como Ella, tierra uruguaya.
Y como base sólida se empieza con la oración para así suscitar y enfervorizar la devoción que se debe sentir por la Santísima Virgen.
A.C invitará para que concurran los sábados al Santo Rosario.
También se organizó una cadena de comunión permanente porque el éxito corone estos actos piadosos.

Filomena A. Dini de Aldabe - Presidente
Blanca S. Viñas Jáuregui - Secretaria

Acta Nº 61
En la ciudad de Tacuarembó, el día miércoles 8 de agosto de 1945, siendo las 17 hs, bajo la dirección del Sr. Cura Párroco Pbro. Mario S. Rodríguez, presidiendo la Sra. Filomena A. Dini de Aldabe, actuando en Sria. La Srta. Blanca S. Viñas Jáuregui, se reunió el Centro de mujeres católicas de la Parroquia de San Fructuoso.
Estaban presentes los siguientes miembros.
Maria Luisa L. de Imaz – Emilia Ortiz de Albarez – Aurea Bentancurt – Gabina B. de Correa Espinosa – Maria H. Reggi – Juana L. de Cáceres – Isaura V. de Aranquiz y Celedonia P. de Cortada.
Con aviso faltaron
Nélida López de Castro – Luisita Calcagno – Mercedes B. de Ferreira y Ciriaca Ramos…
Se continua con la coordinación de ideas preparando los agasajos que se le tributarán a la Virgencita de los 33, y con éste motivo el día domingo del cte. Mes se da comienzo al triduo de la asunción, el cual aprovecharan todos los fieles orando mucho para que el pueblo se prepare dignamente para celebrar esa gran fiesta cristiana…

Acta Nº 65
En la ciudad de Tacuarembó a los 31 días del mes de octubre, siendo las 18 hs., bajo la dirección del Sr. Cura Párroco Pbro. Dr. Mario S. Rodríguez, presidiendo la Sra. Filomena A. Dini de Aldabe, se reunió el Centro de mujeres de a.c de la Parroquia de San Fructuoso, en Sria. la Srta. Blanca S. Viñas Jáuregui… Luego el Sr. Cura Párroco da los informes de las impresiones recibidas que, con motivo de la visita de la Virgencita de los 33, fueron objeto en todos los puntos recorridos quedando en su corazón de buen Párroco, la satisfacción de esa gira triunfal…
----------------------------
----------------

-------------------------
-------------
1945 Diciembre - Gira Imagen Virgen de los 33
(Vida Diocesana Nº 142, Diciembre 1945)
LA PALABRA DE NUESTRO OBISPO
Cuando el año pasado, terminado nuestro Primer Congreso Eucarístico Diocesano, anunciamos en Meló la visita de la histórica Imagen de la Virgen de los Treinta y Tres, estábamos muy lejos de imaginar lo que, casi un año después, contemplarían asombrados nuestros ojos y sentiría conmovido nuestro corazón.
Porque, en verdad, ha resultado todo tan hermoso, tan grande, tan lleno de fervor mariano, y de ternura filial, y de genuino encendimiento patriótico; tantas bendiciones ha derramado palpablemente en su paseo triunfal la Madre de Dios desde su bendita Imagen, que este "Viaje de la Virgencita" quedará consignado en la historia de la Diócesis como algo extraordinario, como verdadera apoteosis, como acontecimiento sin segundo.
Las páginas que siguen, arrancadas de un "Diario íntimo", escrito por quien fue testigo y actor, renovarán en vuestras almas la memoria de aquellos días de bendición. Sí, recordadlos siempre, amados hijos; y no olvidéis nunca los consejos que vuestro Obispo os diera en tan feliz oportunidad, y que ahora se complace en ofreceros de nuevo en apretado ramillete deseando que los pongáis en práctica para bien de vuestras almas.
Sed devotos verdaderos de la Virgen; el verdadero devoto de María tiene asegurada su salvación.
Rezad siempre al levantaros y al acostaros tres Avemarías.
Ofreced diariamente a la Virgen el obsequio del Rosario rezado con gran fervor.
Venerad con particular devoción esta Imagen de María ante la cual se postraron los Convencionales de la Asamblea de la Florida y los Treinta y Tres inclinaron la gloriosa bandera tricolor.
Y a Ella, "de la Patria gentil soberana, guía y capitana de los Treinta y Tres", dirigid cada día vuestra plegaria ferviente por nuestro Uruguay, para que en él, por su maternal y poderosa intercesión, reine Cristo Jesús.
Agradecemos a nuestros amados Párrocos y Sacerdotes, a las Comunidades Religiosas, a nuestros socios de Acción Católica, a las Congregaciones piadosas, especialmente a las Hijas de María, a todos nuestros fieles, a nuestros queridos niños y niñas, todo lo que han hecho para honrar a la Madre del Cielo; y agradecemos a todos tos que, no perteneciendo a la Diócesis, contribuyeron en una u otra forma al éxito de estas magnificas jornadas, y en particular a los Sacerdotes, Comunidades, Junta Parroquial de A. C. fieles y habitantes todos de Minas, nuestra querida ciudad natal; y llegue también nuestra gratitud más sincera a las cristianas familias que a la vera de los caminos de la diócesis nos abrieron de par en par las puertas de sus hogares y nos colmaron de atenciones. A todos, desde lo más íntimo de nuestra alma, impartimos nuestra pastoral bendición.
Y ahora... a revivir las emociones santas ,el fervor religioso y patriótico, los inefables consuelos de aquellos felices días de octubre en las páginas sentidas de este "Diario íntimo".

DIARIO ÍNTIMO P. Bresque
TRES SEMANAS DE CHOFER
OCTUBRE, 1945
DÍA 6
DE FLORIDA
Es el día de la partida y como tal, lleno de interrogantes y preocupaciones; es claro y sereno y algo fresco.
Los fieles han acudido en gran número a la Catedral a despedirse de la Virgen. Es una verdadera despedida, y por lo mismo, no falta una leve brisa de tristeza.
Cantando las letanías acompañan a la veneranda Imagen hasta el automóvil en que he de conducirla por toda la Diócesis; Monseñor Paternáin toma asiento adelante. Hay vítores, aplausos y vivas, y pañuelos y manos que se agitan para dar el saludo de despedida; la Virgen, en su preciosa Imagen, parece sonreír, sonreír con sonrisa de Madre que parte dejando a hijos queridos, para ir a encontrar a otros hijos muy queridos también.
Don Ignacio Urdampilleta nos acompaña en su auto hasta el Camino de Arias, y don Isaac Díaz, en el suyo, escolta a la Virgen hasta Chamizo.
El camino tiene de todo, incluso hasta pedazos muy buenos. Yo voy deseando llegar a la carretera para correr un poco, y ésta aparece por fin, en el lomo de una cuchilla, pero antes de entrar en ella nos detenemos, pues una señora de aspecto humilde sale a nuestro encuentro llevando un cesto, y en el cesto hermosas flores que deposita a los pies de la Virgen. la primera ofrenda floral! ¿Qué manos habrían cultivado aquellas rosas, qué manos las habrían cortado, y qué sentimientos de impetración y de acción de gracias no irían envueltos en aquellos húmedos pétalos? La soberana Reina del Cielo que en la tierra recibía aquel -homenaje, lo sabia todo.

EN CHAMIZO
A poco de entrar en la carretera nuestra vista advierte en el puente de Chamizo. un movimiento Inusitado; a medida que avanzamos nos vamos llenando de admiración y de alegría, pues aquel movimiento se concreta en número extraordinario de Jinetes, autos, sulkis, carros, etc., que esperan la llegada de la Virgen.
Se adelanta el Sr. José Luis Arrillaga y nos da las instrucciones del caso e Imparte algunas órdenes a los de a caballo. Estos se colocan entonces en perfecta formación a ambos lados de la carretera dando el frente hacía el centro; pasamos en medio de ellos que saludan y vivan a la "Virgen de los Treinta y Tres" y al Sr. Obispo, a más no poder. Luego se distribuyen los jinetes en cuatro grupos de treinta y tres cada. uno, llevando cada grupo al frente la Bandera Nacional, la Pontificia y la de los Treinta y Tres. Seguimos muy despacito y detrás nuestro sigue una, abigarrada caravana de vehículos.
De entre todos estos llama la atención un sulky, que pugna por Ir siempre al costado de nuestro auto; lo guía una señora que va con una 'niña y seis chicos, tres de ellos regordetes y sonrosados como los angelitos que tiene la Virgen a sus plantas. Se diría hasta que son muy parecidos los unos a los otros, y quizá lo fueran por la inocencia reflejada en sus ojos. Los niños del sulky van muy atareados en juntar sus dedos, llevarlos a la boca y tirarle así besos a la Virgen; parece, que no se cansan en este trabajo, tierno y conmovedor, y que sería, sin duda, una consigna materna.
A entrada mismo del pueblecito de Chamizo, bajamos la Imagen que es llevada en andas, en solemne, devota y nutrida procesión hasta la Iglesia. En este Iglesia, la dueña de casa es la Patrona de la Diócesis, Santa Teresita.
Antes de entrar al templo dos niñas declamaron magistralmente sendas poesías: la una del Padre Fontes Arrillaga, y la otra del Padre Raúl Porto,
El Sr. José Luis Arrillaga dio la bienvenida a la Virgencita y al Sr. Obispo, destacando el providencial momento qua comenzaba a vivir nuestra Diócesis. Luego después el Padre Ortells se apoderó del micrófono para apoderarse después de la multitud que aplaudía, y vivaba sin cesar. Un amiga mía y del Padre Ortells, me dijo despacito: "este Padre habla en uruguayo, y sólo por el acento se nota que es español".
Siguió después la Santa Misa en la que un buen número da fieles, a pesar de lo avanzado de la hora, cerca de las once, se llegó al Comulgatorio. Terminaron estos actos con el rezo del primer Rosario. Lo dirigió el mismo Sr. Obispo,, quien después despidió, con emocionadas palabras a los fieles. Estos, agrupados en diversos turnos, perseveraron en esta devoción ante la bendita Imagen en ininterrumpidos coros.
POR LA TARDE, a las 16 horas, volvimos al templo; éste ya estaba rebosando de fieles. Rezado el rosario, el Sr. Obispo agradeció el grandioso recibimiento tributado a la histórica imagencita, manifestando su Íntimo gozo por la filial devoción "y entusiasmo puestos de manifiesto por los habitantes de Chamizo y lugares circunvecinos, y como prenda de todas las gracias espirituales y materiales que a todos les deseaba, les impartió la bendición episcopal.
Entonces nos ponemos en marcha hacia Fray Marcos; nos acompañan los jinetes por un rato, y antes de volver grupas, se cuadran marcialmente, saludan a la Virgencita y vivan al Sr. Obispo.
Detrás nuestro siguen algunos autos; entre otros el del Sr. Arrillaga que, a la vuelta, se da vuelta, con toda la familia dentro, sin que nadie sufriera, el más leve rasguño.

HACIA FRAY MARCOS
Nuestra marcha se ve de continuo interrumpida por grupos de personas que salen a la carretera a conocer a la, "Virgencita de los Treinta y Tres". La mayoría llevan flores y las madres levantan y acercan a sus hijitos. Monseñor Paternáin exhorta a toaos a rezarle siempre a la Virgen; reza con ellos algunas Ave Marías, les da la bendición y les deja de recuerdo una estampa con la. Imagen de la famosa Virgencita..

EN FRAY MARCOS
A la entrada del pueblo de Fray Marcos nos espera el Padre Merlo con un buen contingente de fieles; se organiza una devota procesión, llevando en andas a la Virgen hasta la Iglesia que luce, por dentro y por fuera, sus mejores galas. Sigue el rezo con¬tinuo del rosario hasta las 6 y 30, en que emprendemos de nuevo la marcha siguiendo

HACIA CASUPA
Es ya de tardecita y por mitad del camino nos alcanza un propio para decirnos que detengamos la marcha, pues hay que llegar a Casupá después de entrado el sol, de lo contrario las antorchas fracasarían rotundamente.
Cumplimos el pedido y cuando nos aproximamos a Casupá, las luces del pueblo ya están encendidas. Entonces encendemos la luz de adentro del automóvil y queda así la Imagen de la Virgen preciosamente iluminada. De pronto los oíos tropiezan con un ejército de puntos luminosos de diversos colores: ¿qué es aquello? Son las antorchas que, sostenidas en alto por las manos de multitud de fieles, dan la bienvenida a la Virgen.

EN CASUPA
De continuo se organiza una manifestación religiosa; la Imagen es llevada en andas por cuatro señoritas, y el Padre Ortells hace el gasto de locutor y animador desde un auto con altoparlantes.

DÍA 7
EL DESPERTAR
Los que habíamos hecho el firme propósito de dormir hoy hasta tarde, nos vemos chasqueados. Desde muy temprano las campanas y las bambas se encargan da recordarnos a todos, y de recordarnos que en Casupá se celebra una fiesta extraordinaria. También el armonio de la Iglesia, pulsado por el Padre José, desde muy temprano hace oír sus notas amplificadas par los altoparlantes.
Comienzan a celebrarse seguidamente Misas de Comunión y comienzan a caer peregrinos; unos son de nuestra Diócesis; de Fray Marcos, Chamizo, Escobilla, San Gabriel, Reboledo, Cerro Colorado, Milán, etc., etc., que han oído la invitación y el llamado de su Obispo y se han llegado hasta aquí para honrar a la Virgen de los Treinta y Tres; otros son de la Arquidiócesis de Montevideo, que han querido confraternizar con nosotros en el homenaje a la Madre da Dios en su histórica Imagen, y son, de Minas, Tala, San Ramón, .San Jacinto, San Bautista, y no sé de cuantos Santos mas.
Hay ómnibus y autos del año que se pida; pero sobre todo hay mucha devoción, mucho fervor y mucho entusiasmo. También ha llegado la Banda de los Talleres de Don Bosco que, con sus acordes marciales, lo llena todo y lo anima todo.

LA MISA
A las 10 de la mañana, la veneranda imagen de la Virgencita es llevada a un altar erigido en medio de la plaza; también se ha levantado aquí un trono episcopal del cual el Padre José está muy orgulloso, pues, dice, que es lo más litúrgico que pedirse pueda.
La Misa es con asistencia de Pontifical y la canta el Superior de los Palotínos, R. P. Salzer, y hacen de Ministros Sagrados el Neopresbítero Aroldo Ponce de León y el Subdiácono Areosides Silva. Es realmente impresionante el silencio y atención con que aquel mar de gentes siguió todas las ceremonias.
Al Evangelio Monseñor Paternáin pronunció la Homilía, que fue substanciosa, clara, convincente y enfervorizante, tejida con tíos hebras de oro; la presencia de la Virgen en su histórica imagen y el Santo Rosario.
Radio Rural trasmitía, desde la plaza, todos los actos, para toda la República.
Terminada la Misa, al silencio y piedad que imperó en ella; sigue el estruendo de los aplausos, las notas alegres de la música, y los entusiastas vivas promovidos por e¡ Padre Ortells, hasta que la imagen quedó de -nuevo colocada en la Iglesia,

LA PROCESIÓN
Por la tarde, a las cuatro, hay de nuevo desborde de fervor y entusiasmo. Se organiza la procesión que cubre varias cuadras; a la cabeza marcha un escuadrón de jinetes capitaneados por el Br. Aníbal Silva, con paisanos que representan a aquellos gauchos que rindieron homenaje a la misma "Virgen Soberana, Guía y Capitana de los Treinta y Tres". Detrás de la Imagen se forma una imponente columna de hombres; todo el mundo reza. ó canta, o canta y reza a la vez.
Termina la procesión en la plaza; se coloca a la Virgen en lugar bien visible; se da la, bendición con el Santísimo, y hacen uso de la palabra el Ingeniero Miguel Petít García Zúñiga, el Dr. Ricardo Charlone, y... yo. A todos nos aplauden muchísimo; ¿qué más remedio?.
El Himno Nacional, cantado por la multitud y ejecutado por la Banda de los Talleres pone su nota vibrante de sano patriotismo.
La gente parece que no se cansa, y al contrario, se entusiasma cada vez más y más. Por eso se vuelca de nuevo en la Iglesia tras la Imagen .y se sucede sin Interrupción para el rezo del Rosario.

DÍA 8
HACIA MINAS
Hoy partimos de Casupá rumbo a Minas.
Los casupenses han acudido muy numerosos a despedirse de la Virgen; se apiñan alrededor del auto y parece que quisieran quitarnos la Imagen.
Algunos automóviles nos acompañan hasta el limite de la Parroquia; don Alejandro Arrillaga con su familia, y algunas personas más, nos acompañan hasta el limite de Florida con Canelones, hasta el puente de la carretera al Tala, sobre el Río Santa Lucia.
Desde aquí tomamos más velocidad, para llegar a la hora prefijada a Minas, que es la patria de Lavalleja y de nuestro Obispo.

LA RECEPCIÓN
Al anochecer llegamos a los alrededores de la ciudad, donde nos espera una gran cantidad de automóviles. Detenemos la marcha y rodea nuestro coche un gran número de caballeros, de señoras y señoritas. Unas y otras, al ver a la Imagencita, exclaman a coro: "¡pero, qué linda es ¡qué chiquita es! ¡qué preciosa es!"
Colocamos la Imagen en una carroza extraordinariamente arreglada, a cuyos lados han escrito con flores; AVE MARÍA. La imagen, colocada bien alto, lo domina todo, y parece contestar con sonrisas al incesante clamoreo, a los calurosos aplausos, a las férvidas miradas y la profusión de flores con que se ve saludada su entrada a Minas.
El Doctor Ladereche, devoto sincero e hincha número uno de la "Virgen de los Treinta y Tres", pronuncia un breve y elocuente discurso dando la bienvenida a la Virgencita y a Monseñor Paternáin, que la traía allí de paso, en la Jira emprendida por la Diócesis de florida y Melo.
Luego los autos quedan de lado y se organiza una imponente manifestación popular que, a .medida que marcha hacia la Iglesia, va creciendo sensiblemente en número y en entusiasmo. Continuamente se dan vibrante vivas a Lavalleja, Jefe de los Treinta y Tres Orientales, que con su gesto magnifico cambió el nombre de la Virgen de Lujan en el de "Virgen de los Treinta y Tres", y a Monseñor Paternáin que, con su gasto apostólico, propulsaba y difundía sólidamente esa devoción. La casa en que de niño vivió Monseñor, estaba profusamente engalanada, y al parar frente a ella le descargaron una verdadera andanada da flores. Pero el entusiasmo llegó al colmo cuando llegamos a la plaza que perpetúa en el bronce la figura da Lavalleja. Giró la carroza y se puso frente mismo al monumento; aquello era solemne: Lavalleja parecía que miraba exaltado y ofrecía bizarramente su espada a aquella Señora, "Reina y Capitana", ante quien, cien años atrás, inclinara la tricolor bandera.
La banda de música hizo oír los acordes de la diana de Palleja, y aquella Inmensa multitud guardó entonces un impresionante silencio, y pudimos "oír con los ojos" lo que decía y lo que sentía, al ondear en el aire millares de pañuelos y banderitas.
Yo, a pesar de estar cansado y ronco, me sentí con voz y sin cansancio, y encaramado en la carroza, pronuncié una arenga.
Luego seguimos hasta el atrio de la Iglesia, y en un altar allí dispuesto dejamos a la "Virgen de los Treinta y Tres", mirando hacia el Jefe de los Orientales. El Padre Sosa Ponce "se rayó" un discurso de primera, y el Sr. Obispo, visiblemente emocionado agradeció aquel doble homenaje con elocuentes y sentidas, frases.
Colocada la Imagen en el templo, y estando éste desbordado por los fieles que ¡legaban hasta la calle, se rezó en común el primer Rosario, y se continuó en seguida el rezo ininterrumpido del mismo por los diversos coros.
No hay caso, Minas se ha portado, pensaba yo, repasando las escenas, y no en balde el Padre Sosa se puso la sotana nueva de las grandes fiestas, y los Padres Rodríguez y Romero, iban y venían, subían y bajaban.

DÍA 9
MISA DE COMUNIÓN
A pesar de que hoy amaneció lloviendo, los minuanos no se asustan y acuden lo mismo a la Misa de Comunión que celebra el Sr. Obispo. El templo estaba completamente repleto y la Comunión parecía interminable.
POR LA TARDE, a pesar de que "las condiciones climatológicas no son nada favorables", como diría un conocido locutor de radio, acude no obstante un gentío Inmenso a despedirse de la Virgen.
Varios autos nos acompañaban hasta el arroyo Campanero, y allí descienden sus ocupantes y rezamos una Salve de despedida.

HACIA TREINTA Y TRES
Seguimos rumbo a Treinta y Tres, y todavía por un rato nos escoltan algunos automóviles; detenemos la marcha frente a la portera de una estancia desde donde acude una familia a ver y homenajear a la Virgencita.
De aquí para adelante tomamos gran velocidad y comenzamos a acortar camino, pues a las seis de la tardé hay que estar en Corrales y muy cerca de allí, en el límite de la Parroquia, nos espera el Párroco de Treinta y Tres. ¡Pobre! se habrá cansado de esperar, pues recién a las 11 y 30 de la noche llegamos a Corrales y a las 13 en punto, más puntuales imposible, entramos en la ciudad de Treinta y Tres. ¿Qué nos pasó? Nada; se nos atravesó un arroyo que no pudimos atravesar por estar desbordado y carecer de puente; entonces hubimos de desandar casi todo lo andado y dar una gran vuelta.
Al llegar frente a la Iglesia, el reloj de la Jefatura nos anunció que era ya media noche. Entonces se acercaron dos mozos de café y dos billaristas y muy gustosos se ofrecieron a transportar la Virgen hasta el templo, y mientras marchaban muy orondos en acuella rarísima procesión, comentaban por lo bajo que, si hubiéramos llegado en hora, no habrían ellos tenido aquel honor y aquella suerte.
Sabe Dios porqué permitió que así pasaran las cosas.
Al retirarme a descansar, me divierto pensando que, en cuanto a la recepción de Treinta y Tres, todo se ha perdido, menos la crónica de la misma, hecha con iodo lujo de detalles, desde la radio, por el Doctor Gorosito, el día antes.
¡Lo que vale ser previsor! Si deja para hacerla hoy, no lo hubiera podido.

DÍA 10
GRANDES FIESTAS RELIGIOSAS Y POPULARES
Muy de mañana las bombas y las campanas hacen saber hasta a los sordos, que Treinta y Tres está de fiesta, pues la Virgen peregrina, la que lleva en su nombre el nombre de esta ciudad, se halla presente allí en el viejo y remozado templo. Sus naves fueron totalmente colmadas por los fieles que asistieron a la Misa cantada, que fue de Comunión, y de Comunión larguísima e interminable.
Luego dio comienzo el rezo continuo del Rosario, y noté como durante todo el día, y a todas horas, personas de la más distinta condición, edad y posición social, venían a conocer a la "Virgen de los Treinta y Tres" y rezarle un Ave María, trayéndole siempre abundantes y hermosas ofrendas de llores.
Con toda verdad dijo el Padre Pelerey: "un huracán de amor tronchó la flores de nuestros jardines para hacer con ellas alfombra perfumada de sus pies inmaculados".
Cerca del mediodía vamos al hermoso local de la "Sociedad Fomento de 33", donde el Padre Aparicio Pérez tiene concentrados a unos doscientos gauchos. El Sr. Obispo visita los fogones donde corre parejo con el amargo el buen humor y la sana alegría; no faltan tampoco décimas, improvisaciones y vivas.
POR LA TARDE, al son, de las alegres notas de una banda de música, una gran multitud va ocupando la plaza y la acera de la Iglesia. La Imagen de la Virgen es colocada en el atrio en un trono hábilmente dispuesto, y a su lado se apostan el Excmo. Sr. Obispo y el Sr. Párroco. Entonces aparecen los gauchos que, en correcta formación, .jineteando magníficos pingos, comienzan a desfilar de a cuatro en fondo; el Padre Aparicio Pérez, en un lindo tordillo, va a la cabeza. Al llegar frente a la Virgen, vuelven hacia Ella sus rostros, se quitan el sombrero y la saludan con amplios y expresivos ademanes. El público los aplaude frenéticamente, siendo sin duda, en ellos, a nuestra tradición y a nuestros hombres de campo, que rendían un homenaje a la Madre de Dios en aquella imagen que bendijo nuestros campos y que esté, tan ligada a nuestra tradición. Luego los jinetes formaron a un lado casi frente a la Virgen, y hubo payadas, canto de vidalitas y discursos. Habló un jovencito que no sé cómo se llama, el Sr. Julio Bacco y el Padre Pérez; todos extraordinariamente bien. Y para terminar la parte oratoria, el Sr. Alejo Gorosito declamó, con gran entonación y gran acierto las décimas del Padre Porto a la Virgen de los Treinta y Tres. Seguidamente .se realizaron allí mismo las pintorescas carreras de sortija.
Me pareció que estos gauchos tenían todo, menos...la puntería de nuestros viejos criollos.
POR LA NOCHE, se realizó una hermosa procesión con antorchas. Durante BU trayecto, el Colegio de las Hermanas Dominicas hizo el gasto principal en materia de cantos y rezos. La cantidad de público fue tanta, que muchos debieron contentarse con quedarse en el 'atrio y en la vereda. Me cupo el honor de impartir la bendición con el Santísimo y pude entonces ver como en el atrio y en la calle la gente se ponía de rodillas para recibirla. ¡Se había honrado a la Madre, y necesariamente habla que recibir la bendición del Hijo!

DÍA 11
LA PARTIDA
Han concurrido muchos fieles a despedirse de la Virgen, a rezar ante Ella un último Rosario. Nuevamente el templo se halla totalmente colmado; el Sr. Obispo pronuncia unas breves y .penetrantes palabras de agradecimiento, de exhortación y de despedida.
Cuatro gauchos bien ataviados, o bien "pilchados", sacan en andas a la Imagen. Una lluvia de flores cae sobre ella y sobre nosotros; los fieles se arremolinan alrededor del auto baten palmas, agitan los pañuelos, y dan vivas entusiastamente.
Nos alejamos despaciosamente oyendo .todavía, a varias cuadras, las aclamaciones. y percibiendo los saludos.
A unos cuatro kilómetros de la ciudad nos detuvimos unos instantes. Un grupo, formado principalmente por niños y niñas de un catecismo, con su catequista la Srta. Juanita Ipuche, llevando todos sendos ramos de flores, se acercan a ver, a .mirar y a honrar a la "Virgencita de los Treinta y Tres". Una niña declama una poesía; el Sr. Obispo les da una estampa de recuerdo, los exhorta a ser devotos de la Virgen y los bendice a todos. En seguida reiniciamos la marcha

RUMBO A MELO
El día es espléndido y la carretera muy buena; en menos de hora y media llegamos al Paso de las Bochas, sobre el Rio Tacuarí. Aquí vienen a encontrarnos el Doctor Gamio con el Padre Guillermo, el Padre Gómez Tizze, y el Sr. Juan Olmos; a poco llega también el Sr. Furest con su familia, y en el auto del Sr. Paggiola llegan el Padre Atucha y el Sr. Piñeyrúa. Como todavía es muy temprano, hacemos tiempo, y lo hacemos mateando, ya que no tenemos, por el momento, otra cosa que hacer.
Cuando los entendidos opinan que ya es hora de marchar atravesamos las darás aguas del Tacuarí y enfilamos hacia Melo.
Frente a la estancia del Sr. Acosta y Lara nos espera una gran cantidad de automóviles, casi todos adornados. Se organiza una gran caravana y penetramos en la ciudad atronando el espado con las bocinas. Vamos por la calle Treinta y Tres hacia la vieja Plaza de las Carretas; hay muchas casas engalanadas y la gente sale a los balcones y a los zaguanes a aplaudir el paso de la Virgen. En una esquina le la mencionada plaza y en las calles adyacentes, espera una. enorme multitud. Allí anda de un lado para otro dando órdenes y contraórdenes, y con la cara muy colorada, el Padre Javier; allí está también, aguardando para transportar a la "Virgen de los Treinta y Tres", una carreta que, si no era famosa, lo será desde ahora. Dicen que es del tiempo de Rivera, y a juzgar por el aspecto vetusto que presenta, yo creo que si no era del tiempo de Rivera...sería del tiempo de los abuelitos del héroe. Los bueyes si, son bastante mas modernos, aunque algo descorteses.
Treinta y tres jinetes vestidos todos a la antigua usanza rompen la marcha; sigue la carreta con la imagen de la Virgencita, y detrás se forma una inmensa columna de hombres y mujeres, que en medio de un entusiasmo indescriptible, va marchando por le calle principal y aumentando a cada segundo, hasta llegar a la Iglesia Matriz. Aquí también hay mucha gente que guarda la llegada de la Virgen; el Colegio de las Hermanas Salesianas está formado en las escalinatas del templo y todos sus componentes agitan en sus manos banderitas nacionales y pontificias. El Sr. Obispo, revestido con los ornamentos sagrados, espera en el atrio. Llega entonces la imagencita como si hasta allí la hubieran traído las ondas de aquel mar que formaban las banderas y pañuelos, que en un continuo agitar, cantaban la canción del amor, de la fe y de los patrios sentimientos. Los aplausos fueron interminables; la función en la Iglesia, solemnísima. ¡Parecía que estábamos en el Congreso!.
Suenan las campanas y atruenan el aire estrepitosas bombas; pero lo más lucido fue al llegar la imagen frente a la Iglesia, pues entonces se encendieron dos ruedas de fuegos artificiales que rasgando la oscuridad de la noche pusieron en los ojos y en los oídos una nota de fantasía y emoción. Yo observaba desde el atrio de la Iglesia y pude ver entonces cómo el Sr. Cura Párroco, que encabezaba la manifestación, detenía su marcha y los acólitos retrocedían un poco, por las dudas...no resultara que aquello no fuera sólo artificio.
En el atrio hubo también poesías, y sobre todo un hermoso discurso a cargo del Sr. José María Arrillaga Herrán. Un discurso muy bien escrito y muy bien dicho
"La jornada terminó piadosa y brillantemente con el rezo del Santo Rosario y la Bendición con el Santísimo,
Por supuesto que, comienza y sigue durante toda la noche el Rosario continuo.

DÍA 12
LA COMUNIÓN DE SEÑORAS Y SEÑORITAS
Es el día de la Patrona de la ciudad de Melo.
Me levanto con el firmísimo propósito de escribir muy poco en este "Diario" que voy llevando, pues la comprobación de que he perdido mi estilográfica y un lápiz con quienes me entendía maravillosamente, no deja de disgustarme.
Hoy tienen, su Comunión en la Iglesia Matriz las señoras y señoritas. Llenaron completamente el templo y durante un largo rato estamos cuatro, Incluso el Sr. Obispo, distribuyendo las Sagradas Formas.
Al final, el Padre Guillermo no puede disimular una sonrisa de satisfacción que parece estar creciendo: "¡hombre, se han portao"
Por la noche, con el templo desbordante de fieles, el Padre Gómez teje un hermoso panegírico y la Polifónica de Don Bosco hace su "debut" en Melo, cantando los motetes de la Bendición, el Tantum Ergo y un Ave María. Aquello era realmente celestial y cautivante.

DÍA 13
LOS NIÑOS
Hoy es el día en que los niños de Melo tienen su Comunión. A pesar de que el Padre Javier los va "socando" en los bancos, en las naves, en los rincones y en el atrio, siempre falta sitio para tantos "gurises". Después de la Misa tienen su expansión en la plaza realizando diversos juegos.
POR LA TARDE, en el Teatro España, con un lleno completo, la Polifónica de Don Bosco se hace oír y aplaudir a rabiar por la sociedad melense que, poniendo de manifiesto su buen gusto y cultura musical, pide "bis" para tres o cuatro números del selecto programa..

DÍA 14
DOMINGO TRIUNFAL
Culminan hoy en esta ciudad los festejos eucarístico-marianos.
Todo el bullicio, y ruido de bombas y sonidos de campanas que ha habido en otros lados, parece que se ha trasladado para Meló.
Llegan algunas delegaciones de otros pueblos, entre las que se destaca la de Río Branco con el Padre Falero, y la de Treinta y Tres con el Padre Pellerey.
A LAS 8, tienen los hombres su Misa de Comunión- Da gusto ver todos los bancos del templo ocupados exclusivamente por hombres. ¡Estos sí que son hombres de verdad!
A LAS 10, el Exorno. Sr. Obispo celebra la Misa de Pontifical y al Evangelio pronuncia una Homilía sobre la Maternidad de la Virgen, de subidos quilates teológicos, con su parte afectiva y práctica.
¡Hoy sí que no cabe un alfiler en el templo! Nadie pensó en desmayarse porque hubiera sido Imposible prestarle atención, ya que era más que difícil moverse en aquel gentío, decidido y devoto, que rebasando las naves de la Iglesia se prolongaba en el atrio, seguía hasta la vereda, ocupaba la calle y terminaba recién en la Plaza.
¡Esto se llama saber lo que es un Pontifical y darle la Importancia que le corresponde!
El Padre Gómez me dijo al oído: "recién ahora me doy cuenta de lo que es un "mar de gente".
A la salida del pontifical, la nota pintoresca la dio un buen grupo de señoras y señoritas que, elegantemente ataviadas como damas antiguas, traían remembranzas de los tiempos que fueron.
La multitud se dispersó dando vivas a la Virgen de los Treinta y Tres y al Sr. Obispo.
POR LA TARDE, una grandiosa procesión, llevando en andas a la imagen de la Virgen, recorre las mismas calles de la ciudad y las mismas avenidas del Parque, que recorriera el año pasado la procesión con el Santísimo en el Congreso.
Al llegar al Parque, los mismos pájaros que el año anterior homenajearon con sus cantos al Señor de la Eucaristía, saludan ahora a la Madre en su bendita Imagen. Un fervor y un entusiasmo sin límites se apodera de la multitud que parece encontrar en aquellas avenidas las huellas de Jesús Sacramentado, Entre aplausos y vítores es izada la misma bandera que flameara gloriosa junto al Altar del Congreso, y que re¬cibiera "el agua lustral de la bendición y las lágrimas de la emoción de nuestro Obispo" como lo dijera el Excmo. Sr. Nuncio Apostólico; la Polifónica de Don Bosco canta el Himno Nacional, como únicamente ella sabe hacerlo; y yo, con todo mi corazón y toda mi garganta, pronuncio una alocución. No tiene gracia que me aplaudan mucho, pues tengo toda la "hinchada," a mi favor.
La procesión, tomando por las calles Salto y Pilar, regresa a la Iglesia Matriz.
Frente la misma se despliega la inmensa multitud que luego se arrodilla ante el altar en que se ha expuesto al Santísimo. Monseñor Imparte la trina bendición y el Padre Gómez dice unas vibrantes palabras de clausura.
Luego procede el Sr. Obispo a colocar, en un cofre dispuesto debajo de la mesa del altar del Sagrado Corazón, la bandera y el escudo del Congreso con una placa Indicadora.
A mi mente vienen, contemplando aquella inmensa cantidad de fíeles, aquel fervor y aquel entusiasmo, otras palabras del Sr. Nuncio: "Melo, Melo-día"...Realmente aquello había sido una "Melodía eucarístico-mariana" sabiamente arrancada en dos tiempos, por la mano de Monseñor Paternáin, de las fibras más íntimas de los nobles corazones arachanes.

DÍA 15
HACIA CARAGUATÁ
Seguimos devorando el camino y tragando leguas y polvo. Atravesamos el Río Negro en el puente sobre el Paso Aguiar, dejando así el pintoresco y fértil departamento de Cerro Largo para entrar en el no menos fértil y pintoresco de Tacuarembó.
Al poco rato sale a nuestro encuentro el Párroco de San Fructuoso, Pbro. Dr. Mario Socorro Rodríguez. Parece que viene pidiendo su segundo nombre, pues dice que es tarde, que hay mucha gente esperando, que hay que apurar porque la mayoría son de lejos y tienen que volver a sus casas.
Aprovecho para decirle rápidamente, que estoy muy cansado y ya no tengo mas ganas de escribir "diario" ni crónicas.. El, muy amable, me dice que todo se arreglará y que él mismo me dará la crónica de todo lo que pase en Caraguatá.
Veremos si cumple.

DÍA 16
Entramos en el 'hermoso paraje de Caraguatá, en la hospitalaria y cristiana casa que la familia Gamio. No escribo en mi "diario" los detalles de la llegada, pues ya me los consignaran abundantemente en la crónica prometida. Sin embargo, por si el Padre Mario se olvida, apunto dos detalles: ayer al llegar la Virgen junto al puente, los jinetes no siguieron por él, sino que atravesaron el arroyo a ambos lados del puente, con el consiguiente y alegre chapoteo del agua. El otro detalle es que el Padre Mario pronunció un enjundioso y enardecedor discurso.

DÍA 17
Reparo y preparo el auto, y además hago lo que no suelen hacer en general los choferes: predico, confieso, digo Misa, etc.

DÍA 18
Lo mismo que el anterior y urjo la entrega de la crónica.

DÍA 19
Estamos ya a sólo seis "legüitas" de Tacuarembó; el paraje se llama Rincón de Giloca, y la casa es de los esposos Castrillón - Echebarne. ¡Qué bien nos atendieron! Así da gusto llegar cansado a una casa.
El Padre Mario me entrega la crónica que dice así:

"EN CARAGUATÁ"
"Hace ya quince días que la Virgencita de los Treinta y Tres, anda peregrina por los caminos de la Diócesis. El lunes 15, a las 17, llegó a nuestro Departamento. Las Toscas le dio la bienvenida de todo Tacuarembó.
Todo cuanto se diga de la recepción que la octava sección tributó a la Santísima Virgen, será pálido reflejo de la realidad.
Ya desde las horas de la mañana, empezó a congregarse el vecindario. A las 15 amenazó el mal tiempo; pero la gente de la octava no se achica por el tiempo malo: a mal tiempo, buena cara.
Junto al puente y a la casa Gamio, empezaron, desde las primeras horas de la tarde, a agruparse los jinetes.
A las cuatro de la tarde una reunión nunca vista en el paraje; hombres, mujeres, niños, esperaban ansiosos la llegada de la venerada imagen. Las banderitas ondeaban en los aires. Muchas personas habían recorrido varias leguas a pie. Toda clase de vehículos llegaban apurados y llenos de gente. Autos, carros, sulkys, camiones, etc.
Ciento treinta jinetes se pusieron en marcha para escoltar la Virgen, Eran abanderados los vecinos más ancianos del paraje, Don Manuel Casiano Ferreira, de 93 años, y Don Justino Pereira, de 81 años.
Una carreta artísticamente adornada, flotando al aire las banderas de la patria, esperaba junto al puente para llevar en triunfo a la Santísima Virgen.
Conducía la carreta un viejo carretero del paraje, que por muchos años desempeñó esta tarea: D. Fermín Rodríguez, o, como lo llama cariñosamente el vecindario: el Canario Manuel.
Los jefes de los jinetes eran Paco Gamio y Concepción Azpiroz.
Sobre la carreta, iban cuatro hermosas niñitas del paraje, vestidas de ángeles. Eran ellas Mirla Malbares, y Estela, Marta y Titila Gamio. Parecían cuatro ángeles de verdad que el cielo les hubiera prestado al vecindario de Las Toscas para esa oportunidad. Cuando llegó, a las 17 y 15, el Excmo. Sr. Obispo acompañado del Canciller de la Diócesis y del Dr. Gamio, la multitud prorrumpió en una delirante aclamación.
La Virgencita parecía sonreír, a ese vecindario sencillo, que es una espléndida reserva de los valores morales de nuestra patria. En medio de los vivas hosanantes del pueblo, se puso en marcha la manifestación. La emoción del Sr. Obispo era indisimulable. Llegados a la casa Gamio, el Sr. Cura dirigió unas palabras a la multitud.
Todos los días, de mañana y de tarde, la capilla improvisada estaba repleta de gente.
LAS COMUNIONES eran numerosísimas y los sacerdotes no daban a basto para atender a la gente en los Sacramentos.
EL MIÉRCOLES fue el día de las primeras Comuniones, que fueron, por cierto, muy numerosas.
EL JUEVES tuvo lugar, en el amplio y hermoso "piazzale" de la casa del Sr. Paco Gamio, la Misa Campal. Los que asistieron a ese acto, nunca lo olvidarán. Un sencillo y artístico altar, teniendo por fondo una línea de banderas que parecían tremolar orgullosas de ser el dosel del altar del Sacrificio; unos hermosos paraísos, que parecían haber florecido para ese acto; un cielo diáfano; naranjos en flor, y el Caraguatá, formaban el marco magnífico, donde se dio cita todo el vecindario.
Terminada la Misa Campal, se fue en procesión hasta el cementerio, y después de rezar por los muertos, en medio del delirio del pueblo, se condujo a la Virgen a su sitio en la Capilla.
Todos han trabajado en la preparación de esta fiesta. Pero queremos tener un recuerdo para las sacrificadas personas que han trabajado con abnegación y con mucho sacrificio en estas obras, las abnegadas Catequistas: Aníta Vergés de Azpiroz, Santa Malbares, Casimira Azpiroz, Olga Da Luz, Nidia Bertón de Gamio, Otilia Da Rosa de Gamio, Aurora Melgar, Amanda Layes y no podemos olvidar a la obrera de la primera hora, la venerable matrona Doña Feliciana A. de Gamio, cuyos ojos se veían siempre llenos de lágrimas de emoción que le producía este resurgir cristiano.
Llegó por fin el día de la despedida; dichas las Misas, un grupo grande de gente quiso acompañar a la Virgencita, y en un camión y un auto, fue escoltando a la Virgen hasta Cinco Sauces.
Allí, un grupo de vecinos, con Don Chico Castro a la cabeza, esperaban junto a la Cruz de la Misión, en el predio de D. Elbio Brizolara. Se rezó y se aclamó a la Virgen, a la patria, al Obispo y al Papa.
Por el camino se encontraban muchos grupos que salían a la calle a saludar a la Virgencita y orar ante Ella.
El Sr. Obispo, con sus acompañantes los Padres Bresque y Rodríguez, visitó la casa del Sr. Barnech, admirando allí los extraordinarios trabajos de tejidos de lana, obra toda del Sr. Bamech y sus hijos. La dueña de casa cortó un hermoso ramo de rosas para la Virgen.
La octava Sección cumplió ampliamente el encargo de dar a la Virgen el primer saludo de nuestro Departamento."

DIA 20
Recién termino de leer la crónica, del Padre Mario. Aquí, en la Rinconada que forman el Río Tacuarembó y el Arroyo Tres Cruces, en la casa de los, esposos Castrillón-Echebarne, hay también primeras Comuniones; llama la atención lo bien preparados que están los niños.
Rezado el Rosario delante de la Imagen de la Virgen, partimos por la tarde

PARA TACUAREMBÓ
Las seis "legüitas" que nos restan, se hacen muy largas por el calor, por la langosta, por el polvo, por la arena y por las subidas y bajadas inverosímiles del camino.
Por fin llegamos a la carretera; en un coche con su familia se adelanta, el Sr. Juan Carlos Echenique a presentar su saludos, y a medida que andamos, de entre los eucaliptus que bordean el camino, van brotando automóviles.
Se forma una larga caravana y nos encontramos con los "Treinta y Tres Orientales" representados por un gran número de jinetes. Estos se organizan y disponen bajo las atinadísimas órdenes del Sr. Dick González.

LA LLEGADA
En el Parque Rodó, el Padre Torres con mucho nervio y el Padre Emilio con mucha calma, actúan al frente de una inmensa multitud. Esta, en incontenible entusiasmo, se avalanza sobre el auto que lleva la Imagen, y hace caer una profusa lluvia de flores y de aplausos, a la que acompañan en lugar de truenos, resonantes vivas a la Virgen y al Sr. Obispo. De inmediato la imagen es sacada del auto, y llevada triunfalmente en andas, en una apoteósica manifestación popular.
En el atrio de la Iglesia de San Fructuoso, el Padre Torres pronuncia un vibrante discurso de bienvenida, al que siguen luego cánticos, aclamaciones, aplausos y ivivas! Interminables en un ambiente de fervor patrio y fervor religioso. La, multitud se dispersa lentamente saludando a la Virgen con pañuelos y banderitas; ésta entra a la Iglesia y ocupa su trono.
Por la noche, a todas horas, da gusto oír el coro viril, formado por las voces de los hombres que honran a la Virgen con el rezo del Rosario continuo.

DÍA 21
LOS ACTOS MATUTINOS
Ya estoy acostumbrado al movimiento y algazara que hay en todos los puntos donde hay concentraciones; por eso, hoy, no me admiro ni me conmuevo tanto. La nota saliente de esta mañana la constituye la Misa con asistencia, de Pontifical; la Iglesia de San Fructuoso parece que se achicó de golpe, y la gente no cabe. El Excmo. Sr. Obispo pronuncia una hermosa Homilía en la que roza sutilmente el corazón, al exaltar las bondades maternales de María y los deberes filiales para con Ella. El canto estuvo bajo la dirección de un Padre Salesiano de Minas de Corrales y, aunque canta casi todo ti pueblo, sin embargo en esto se llevan la palma las niñas del Colegio Jesús Sacramentado y las del Asilo Nadal.
Concurrieron peregrinos de Minas de Corrales con los Padres Salesianos, y de Tranqueras, Paso del Cerro. Laureles, Bañado de Rocha, y Valle Edén.
En un tren expreso llegó el Padre Parteli con su sonrisa de santa indiferencia y con unos doscientos peregrinos de Rivera. También venía con ellos un grupo de fieles de la Parroquia de "Santa Ana do Livramento do Brasil" capitaneados por su Párroco Don Benedicto.* Este, entusiasmado ante la "Virgen de los Treinta y Tres", le espetó los siguientes sentados, versos:

Soy un forastero — no conozco a nadie...
Llego aquí cansado — a besar tu Imagen....
Virgencita mía. ¡Ay! tiemblo al mirarte
Soy un peregrino — perdido en el valle
De esta baja tierra, — de este mundo Infame...
Válgame tu gracia, Faro de los mares!
Soy un pordiosero — que voy por las calles
Pidiendo un mendrugo, — muriendo de hambre...
Rica y bella Virgen, Tu auxilio me ampare!
Soy un huerfanito — que no tengo madre,
y en el mundo todos — con desdén me escarnen...
Válgame tu amparo, de las madres, madre!.
Soy un desdichado — sin Patria ni padres,
Y en duras cadenas — gimo inconsolable...
Válgame tu gracia, Tu amparo me salve!
Soy un pobre enfermo — soy un caminante,
Que voy persiguiendo — con anhelos grandes
La muerte o la vida, ¡La que tú me alcances!
Soy del mar del mundo — pasajero errante,
Azotado siempre — de las tempestades...
Válgame tu gracia, Para que me salve!
Soy un peregrino, — tengo que alejarme,
Y en la despedida — yo voy a dejarte
Dos velas de cera, — dos cirios bien grandes:
Una gran LEMBRANCA
Y una gran SAUDADE!”
¡Bravo, por los brasileños!

LA PROCESIÓN
El calor de esta tarde es imponente; pero más imponente es el fervor que reina en Tacuarembó pues se impone al calor y al "hermano sol" que nos trata como a hermanastros. Por eso, la procesión que se hace, llevando la Imagen, de la Iglesia de San Fructuoso la de la Santa Cruz, resulta magnífica y grandiosa. En sus filas se destaca un buen grupo de niñas del Colegio de las Hermanas Teresas de Rivera. Rezos y cantos al por mayor. El Padre Torres, que aprendió desde niño a venerar la imagen de la "Virgen de los Treinta y Tres", la recibe en su Parroquia con emocionadas palabras.
Luego, después, unos nutridísimos coros comienzan a sucederse sin Interrupción en el rezo del Rosario.

DÍA 22
LA DESPEDIDA
Ya me parecía que el calor de ayer iba a traer agua; y lo peor es que la trajo a la hora de la Misa de despedida, y torrencialmente. Ello no obstante, el templo parroquial de la Santa Cruz está rebosante de fieles y la Comunión es muy numerosa. Bajo los fríos latigazos de la lluvia transportamos la bendita imagen al auto, en medio de un remolino de gente que reza, canta, aclama, aplaude y se despide de la Virgen y del Sr. Obispo.

Vamos para CURTINA
Ahora nos acompaña el Padre Mario en un auto que maneja el Sr. Echenique.
Curtina, que dista de la ciudad de Tacuarembó 60 kilómetros, es un pueblo chico y de modesta apariencia. Al llegar frente a la Iglesia nos recibe el Padre Domínguez con un grupo de vecinos. Encienden algunos cohetes que salen sigzagueando, llegan arriba y no estallan por impedírselo la lluvia; pero en cambio, por ley de compensación, no falla una formidable bomba... de agua. que cayó justo cuando entrábamos en la Iglesia. A pesar de esto, se veía correr y venir gente de todos lados; en pocos minutos el templo estuvo totalmente colmado.
Celebró la Misa el Padre Domínguez y la explicó Monseñor, terminando las prácticas explicaciones con unas palabras de felicitación para aquellos buenos cristianos de nuestros campos, que habían tenido que realizar verdaderos sacrificios para congregarse allí en tomo a la "Virgen de los Treinta y Tres".
Supimos después que dos personas habían salido el día antes del paraje denominado "Los Cuadrados", a las once de la noche, para hacer su camino a pie y llegar de mañana a Curtina para honrar a la Virgencita.
Terminada la Misa, terminó también la lluvia, y entonces aquellas buenas gentes, rodeando la bendita imagen que colocamos en el auto, exteriorizaron sus sentimientos de alegría por la doble visita, de la. virgen y del Sr. Obispo. El Sr. Semería pronunció en tal oportunidad, unas entusiastas palabras muy aplaudidas.

PAMPA
Dejando Curtina, tomamos la carretera que conduce a Pampa, y dejando la carretera entramos a "campo traviesa" en dirección a la casa del Sr. Félix Rula. En su magnífica residencia de campo habían preparado con sumo gusto un altar y una repisa para colocar a la "Virgen de los Treinta y Tres".
Al pasar la última portera, el Sr. Echenique, a pesar de que la portera era grande y el auto muy chico, casi se la lleva por delante, y entonces, para despistar, comenzó a culparme a mi.
¡Bueno! algo había que hacer, pues aquí veníamos, como quien dice, a descansar.

DÍA 23
En efecto, descansamos muy bien, pues la bondad de Don Félix, las atenciones de su esposa y la solicitud de su señorita hermana, son realmente extraordinarias. Celebramos Misa por turno, y a la que celebra el Sr. Obispo, asisten, además de Don Félix y familia, el Ingeniero Carril y señora, y todos los empleados y peones del establecimiento. El Padre Mario les hace una breve y jugosa plática.
Por la tarde, antes de partir, rezamos un Rosario en común; la despedida, como todas, fue también emotiva y cordial.
Cuando íbamos a entrar en la carretera que va de Pampa a Paso de los Toros, nos encontramos con un grupo de niños y su maestra; se acercaron al auto, rezaron a la Virgen y el Sr. Obispo les dio un recuerdito de aquella breve visita. La maestra y los niños eran de la escuela católica que sostienen allí algunas familias pudientes; pudientes y generosas, pues lo primero sin lo segundo no basta para hacer el bien.
En este lugar, que pertenece a la Parroquia de Paso de los Toros, nos esperaban algunos automóviles y diversos vehículos. Frente a la capilla había una gran concentración de fieles; el Sr. Obispo bajó, les habló, rezó con ellos, y después de los infaltables ¡vivas! y cantos, partimos a escape pues el tiempo apremiaba.

PASO DE LOS TOROS
La hermosa Villa estaba engalanada y las banderas lucían por doquier, una caravana de autos salió a encontrarnos, y el Sr. Pedro Rodríguez nos guió hasta el punto en que el pueblo, organizado para marchar en manifestación, aguardaba la llegada de la "Virgencita". A ésta la hicieron graciosa escolta treinta y tres niñas vestidas de ángeles; en el atrio del bellísimo templo, bajo la dirección del Padre Isazo se cantó ese himno a la "Virgencita de los Treinta y Tres" que "inventaron" en Melo; aquello era magnifico y en su canto se distinguieron, las niñas del Colegio de "María Auxiliadora". Luego la Srta. Mirta Rodríguez declamó con mucho acierto una poesía a la Virgen; un acólito dio la bienvenida al Excmo, Sr. Obispo, y el Padre Franco estuvo francamente muy bien en su discurso, en el que destacó que el feliz término de que se estaban llevando los trabajos de terminación de aquella Iglesia, lo atribuía a la intercesión de la “Virgen de los Treinta y Tres" a cuya protección los había confiado y a la cual constantemente se invocaba en la Parroquia. . '

DÍA 24
Los turnos del Rosario han sido muy concurridos y en la Misa cantada de hoy hubo una Comunión muy numerosa.
La despedida resultó muy solemne en la amplia Avenida Centenario; nuestro coche pasó entre dos filas de nutrido y ordenado público que, transportado de gozo, saludaba a la Virgen, y aclamaba al Sr. Obispo.
…..
Luego el viaje continuó llegando a Molles, Durazno, Sarandi Grande y Florida

DIA 27
Por la mañana hay gran movimiento de Misas y de Comuniones en la Iglesia. Preparo el auto para llegar al punto de donde salimos hace ya veintiún día»,

DÍA 28
EL FINAL
Florida amanece vestida de fiesta; la Banda de los Talleres electriza y conmueve; los peregrinos van llegando y haciéndose notar. "¿Quiénes son estos, y de dónde vinieron?" me pregunto con las palabras de la Biblia, y no tardo en enterarme que son de Paso de los Toros, Molles, Durazno, Pueblo del Carmen, Goñi, Sarandi, La Cruz, Pintado, Isla Mala, Berrendo. Cardal, 25 de Agosto, San Gregorio de Polanco, Blanquillo, Sarandí del Yi, Sauce del Yi, Talita; Timote y Mendoza. Además hay otros peregrinos - como quien dice con "lista propia" - que representan a Caraguatá, Tacuarembó, Rivera y Río Branco. Con ellos andan los Padres Mario Rodriguez. Delgado, Franco, Alvarez, Hoberg, Valencia, Sosa Bemadet, Silva y "Walser; por la, tarde se le añaden los Padres Barrera, y Freire Sagaseta.
El Pontifical fue solemnísimo; la procesión devotísima. Al final de la misma habló el Doctor Gorosito Tanco y el Padre Silva.
Con, gran inspiración y palabra ungida de poesía, el Doctor Gorosito cantó las glorias de la Virgen, el celo inteligente de nuestro Obispo, y la grandeza de Florida. A mi, lo que más me gustó, fue cuando al hablar de Cerro Largo, dijo que era "tierra de lanzas y de azahares". Luego el Padre Silva puso el broche final con un magnifico discurso sobre el tema: "Dios y Patria".
Por la tarde, en el Seminario, hubo un acto eucarístico, y a continuación uno literario musical. Entre todos los números brilló con fulgores propios, no podía ser menos, "La Estrella del Uruguay", pieza escénica de gran Inspiración y fuerte contextura, tan fuerte, que se veía que era de la pluma del Padre Fuertes.
El itinerario triunfal de la "Virgen de los Treinta y Tres" ha terminado, pero las huellas benditas que ha dejado la Virgen a su paso por nuestros campos, pueblos y ciudades, no las podrán borrar ni el olvido, ni la indiferencia, ni el silencio.
Nuestro Primer Congreso Eucarístico Diocesano había sido, el año pasado, un sonoro y vibrante "Viva Jesús Sacramentado", canto y grito a la vez; hoy, el paseo triunfal de la Virgen por nuestra Diócesis, ha sido un canto y grito a la vez, en que millares de corazones han dicho, lo que el Bardo nacional lo proclamara en su Himno:

"¡Viva la Virgen que en nuestra mañana,
Fue de la Patria gentil soberana,
Guía y Capitana
De los Treinta y Tres!"

P. Bresque



-------------------------------
---------------
1945 - PEREGRINACIÓN DE RIVERA
(El Camino del Bien. Rivera, 1945)

LA PEREGRINACIÓN
Mañana a las 7.15 emprenderá la marcha el tren expreso a Tacuarembó con los peregrinos que van a rendir su homenaje devoto a María Santísima en su imagen denominada «Virgen de los 33». Hermanados por el mismo espíritu mariano irán también numerosos feligreses de Livramento, presididos por el R. P. Benedicto Rodrigues, Cura Párroco de Santana.
El tren llegará a destino a las 9,50. De la estación, la columna se dirigirá a la Iglesia de. San Fructuoso, donde después de cantada la Salve, comenzará la misa, con asistencia de pontifical. Por la tarde será la procesión. Se recomienda a los peregrinos que lleven su mantilla o velo, como asimismo se les recomienda a todos puntualidad. A las 7.15 parte el tren de Rivera y a las18.50 de Tacuarembó. Regresará a esta ciudad a las 21.50.
Se advierte a las personas que deseen almorzar en los hoteles que probablemente encontrarán alguna dificultad, por la afluencia extraordinaria de forasteros presentes en Tacuarembó con motivo de la Feria Anual.
Buen viaje y buena suerte!

El viaje triunfal
Por las noticias que van llegando, nos enteramos del regocijo y el entusiasmo mariano suscitado en todos los pueblos por donde pasó en viaje triunfal la venerada imagen de María denominada Virgen de los 33.
A la salida de Florida numerosos contingentes de jinetes escoltando por turno, a la Comitiva hasta Chamizo, Fray Marcos y Casupá. En todos estos pueblos como en las ciudades de Minas y de Treinta y Tres la recepción ofreció contornos maravillosos; como nunca visto en esas poblaciones. Pero fue en Melo donde el júbilo popular, el fervor religioso y el brillo de los festejos programados sobrepujaron los cálculos más optimistas, y revistieron caracteres de apoteosis. Fueron cuatro días de fiesta, que reprodujeron la gloria de las jornadas del Congreso Eucarístico del año pasado. Todo induce a creer que la jornada de mañana en Tacuarembó no desmerecerá frente a las otras que acaban de vivirse en las demás ciudades de la República.
------------------------------
---------------
1945 - CRÓNICA DE LA PEREGRINACIÓN
(Camino del Bien)

La peregrinación a Tacuarembó fue un éxito rotundo.
El tren expreso, formado de seis amplio Vagones dio cabida a mas de trescientos peregrinos,.entre los cuales había un grupo de santanenses, presididos por su párroco R. P. Benedicto Rodríguez, que en gesto de cristiana confraternidad quisieron también adherirse al devoto y filial homenaje a la Virgen de los 33.
Sabemos de muchas personas que lamentan no haber tomado parte en el viaje por haberse enfermado de gripe ellas o algunas de sus familiares y otros por el costo indudablemente excesivo de los pasajes.
El Señor Obispo de Florida y Melo y el Párroco de Tacuarembó, acompañados de numerosos feligreses dieron en la estación la bienvenida a los peregrinos. La multitud formó ,en columna y con banderas desplegadas al frente, se dirigió, a la Iglesia de San Fructuoso, en donde el día anterior, en memorable jornada triunfal, fuera colocada la histórica Imagen de María.
La Iglesia, pese a sus dimensiones amplísimas, no pudo dar cabida a todos los presentes, debiendo quedar fuera muchos de ellos, mientras adentro se entonaba el Canto de la Salve y se celebraba la Misa solemne.
Sendos coros de voces; masculinas y femeninas, muy bien disciplinadas, tuvieron a su cargo la parte musical.
En el presbiterio estaba el Sr. Obispo y numerosos sacerdotes, muchos de ellos venidos de las comarcas vecinas.
Terminado el Sacrificio los peregrinos se dispersaron, yendo muchos de ellos a almorzar al Parque Rodó o a orillas del río, donde la sombra y la brisa de tan pintorescos lugares neutralizaban en parte el intenso color reinante.
A las dieciséis se puso en marcha la procesión, que recorrió la calle principal de la ciudad, hasta la Iglesia de la Santa Cruz. Allí quedó la imagen sagrada, expuesta a la veneración de los fieles, que sin cesar se renovaban ansiosos de contemplar de cerca su belleza y de expresarle todas las súplicas y afectos de sus corazones.
En la estación Mons. Paternáin recorrió el tren coche por coche, despidiendo a los riverenses que no cesaban de aclamarlo y aplaudirlo.
Mientras el tren emprendía el regreso envuelto en la sedante brisa de la tarde volvía a la serenidad a los cuerpos cansados y a los espíritus tensos por las emociones de la inolvidable jornada mariana.

-----------------------------
---------------
Décimas a la Virgen de los Treinta y Tres
(Vida Diocesana Nº 140-141 — OCTUBRE-NOVIEMBRE, 1945)

Virgencita a quien la indiada
vio cruzar como luz buena,
alegre, dulce y serena,
y perderse en la hondonada;
la que tendió su mirada
sobre las tribus aquellas,
la que escucho sus querellas
cuando la tarde moría
la que el charrúa veía
al pestañar las estrellas.

La que dejo su frescura
en nuestras verdes lomitas
y formo con margaritas
para una patria futura
una alfombra de hermosura
con arroyos ribeteada,
y en magnifica alborada
entretejió con mil rayos
estos cielos uruguayos
como cúpula sagrada.

En tu imagen pequeñita
como la tierra oriental
y en tu rostro virginal
se viene la mañanita;
flor de ceibo es tu boquita
que amores puros destila,
tus ojos agua tranquila
que viene trayendo a flote
dos flores de camalote
que te sirven de pupila.

Ah Virgencita campera
y dueña de la Florida,
entre los ceibos nacida
y susurros de palmera!
Siempre fuerte y altanera
como el ombú de la loma,
pediste al campo su aroma,
la oración al chingolito,
y buscaste el calorcito
del nido de la paloma.

Virgencita del gauchaje
"Ave María Purísima"
y a tu memoria dignísima
te rendían homenaje...
cuando te hallaba en su viaje
era tu nicho su meta...
ya cejaba el buey corneta
ya la mandaba al mancebo
con unas velas de Sebo,
Al gaucho de la carreta.

Los furores del pampero
con valor las resistió,
a tu lado puso el nido
muchas veces el hornero,
te conoció el teru - teru,
jamás canto a tu llegada;
la calandria en la enramada
canto tu nombre bendito,
y a tus labios fue el chorlito
en busca de una Cañada.

La que seguiste en la guerra,
al gauchaje en sus andanzas,
la que pusiste en sus lanzas
la libertad de mi tierra
que al través de la sierra,
victorioso o derrotado,
siempre te tuvo a su lado
con maternal frenesí,
y acampaste en el Ayuí
junto a un pueblo desterrado.

Y así te vieron, Señora,
los héroes de la Agraciada
y en tu potente mirada
Vieron la luz redentora;
tu manto abriose en la aurora
de la patria primavera,
y la brisa mañanera
descubrió tu dulce encanto
y los pliegues de tu manto
fueron luz de su bandera.

Los Treinta y Tres Orientales
te nombraron capitana,
la primera ciudadana
por derechos inmortales;
tus manos virginales
prepararon la victoria
y escribieron en la Historia
el Acta de la Florida
confundiendo nuestra vida
con el brillo de tu gloria.

Y este pueblo independiente
tus glorias santas difunde,,
y tu nombre lo confunde
con Artigas, el vidente,
con Lavalleja, el valiente,
con Oribe, con Rivera,
y la guitarra campera
en vidalitas te canta,
pues tu gloria sacrosanta,
encierra a la patria entera.

José Raúl Porto S.S.
------------------------------
---------------
1945  - GRAN PEREGRINACIÓN
(El Camino del Bien. Nº 101.- Rivera )

En el primer aniversario del Congreso Eucarístico Diocesano de Melo, se ce¬lebrarán diversos actos solemnes, entre ellos, será llevada en triunfo por las ciudades de la Diócesis la histórica imagen de la Virgen de los 33, llamada así, por haber sido Venerada por los asambleístas de la Florida y los 33 orientales, que inclinaron ante ella su bandera tricolor.
El día 21, de Octubre la imagen Venerada estará en Tacuarembó, en viaje de regreso de Melo a Florida.
Con ese motivo se está organizando una peregrinación riverense a dicha ciudad. Correrá un tren expreso, que deberá llevar por lo menos 200 peregrinos. Saldrá alrededor de las siete horas, y regresará de noche.
Los precios serán de cinco y seis pesos mas o menos, en segunda y primera clase respectivamente. Menores: medio boleto. Es esta una magnifica oportunidad de participar en una piadosa peregrinación en honor de la Ssma. Virgen, bajo una advocación tan simpática y tan patriótica.
Todos quienes proyecten formar en la columna de peregrinos deben alistarse con tiempo en la casa parroquial.
------------------------------
---------------
1945  - La Virgen de los 33
(El Camino del Bien Nº 104)

En estos momentos la histórica Imagen, de la virgen de los 33 es llevada en triunfo por los caminos de la Diócesis. Ayer se le tributó una recepción triunfal en la ciudad de Melo. El domingo 21 estará en Tacuarembó. Allá iremos los peregrinos de Rivera, a ofrendarle nuestro tributo de veneración y amor.
Hace un siglo que esta pequeña imagen de María concita la devoción de los Orientales. Está labrada en cedro paraguayo y todo hace suponer que fue traída; de las Misiones de Paraguay por los padres jesuitas, que en el siglo XVIII poseían la estancia de Los Desamparados en el lugar hoy denominado La Calera, en las cercanías de la ciudad de Florida.
En dicha estancia, los padres jesuitas al par que explotaban la ganadería e industrializaban la cal y la madera de los bosques, evangelizaban a los indios de las cercanías.
En un cruce de caminos, cerca del arroyo que desde entonces se llama de la Virgen fue erigido un nicho con la pequeña imagen.
A mediados del año 1700 el Indio Díaz lega una fracción de campo para que en él se erija un templo dedicado a la Reina de los Cielos.
Junto a la modesta iglesia que albergaba a la antigua imagen se fue formando el pequeño pueblo denominado del Pintado. Años después, su cura Párroco, el Pbro. Santiago Figueredo, Prócer de la Independencia obtiene del Cabildo de Montevideo la estancia que poseía en la horqueta formada por el Río Santa Lucía Chico y el Arroyo, Pintado, y allí en gesto sublime, traslada el pueblo en busca de tierras más fértiles. Al trasladarse el pueblo se trasladó también la Iglesia y la imagencita de la Patrona de la Parroquia.
Esto fue en el año 1809; así nació la Villa de San Fernando de la Florida, que había de ser teatro de hechos tan transcendentales en los anales patrios. En el modesto templo de la Florida, en 1825, Lavalleja, y sus compañeros, y luego Larrobla y demás representantes de los pueblos se arrodillaron ante la imagencita de María, imploraron su protección celestial e inclinaron reverentes la bandera tricolor, jurando ante sus plantas luchar por la justa causa hasta Vencer o morir.
Desde entonces el pueblo Oriental ha asociado a esa Imagen el culto de su devoción religiosa y de su amor a la patria. Desde esos días ha nacido espontáneo el nombre con que la honran las generaciones el nombre de "Virgen de los 33. Múltiples testimonios nos hablan del cariño de que siempre fue rodeada esa imagencita y de las gracias obtenidas, por sus devotos.
El más elocuente quizá, por su antigüedad, es la donación de una corona de oro que aún se conserva, hecha por el Brigadier Gral. Manuel Oribe en el año 1849, en acción de gracias por haberse salvado de un naufragio en el Río de la Plata.
Largo es el historial, de las peregrinaciones llegadas al altar de la Florida, desde los cuatro puntos cardinales, largas de enumerar son las demostraciones de devoción del pueblo uruguayo, a través de los tiempos. En 1925 las damas floridenses se desprendían de sus joyas para ofrecerles una corona de oro y piedras preciosas y últimamente, la imagencita venerada ha sido colocada con pompa y esplendor en su nuevo camarín construido en la hermosa Catedral de Florida, con las contribuciones generosas de todos sus devotos.
Ahora la imagen de María sale a bendecir a nuestros pueblos y campañas y a recibir el homenaje exultante del Uruguay. Este viaje triunfal será, a no dudarlo, prenda de una mayor protección de la Reina da los cielos sobre nuestra patria y de un renacer de la vida cristiana en nuestro pueblo.
------------------------------
---------------
1945 - PARROQUIA SANTA ISABEL
(“Monografía de Paso de los Toros. P. Daniel Franco OMI. 1950. págs. 172- 175)
VISITA DE LA VIRGEN DE LOS TREINTA Y TRES

Otra de las brillantes iniciativas del Excmo. Sr. Obispo Diocesano ha sido la visita, de las Parroquias con la Virgencita de los Tres y Tres realizada en el año 1945, lo que sirvió para reavivar en muchos corazones la devoción a la Sma. Virgen, así como para patentizar la devoción Mariana de los fieles de esta Diócesis.
A la Parroquia de Santa Isabel llegó el día 23 de Octubre. Al cruzar los límites de nuestra Parroquia la comitiva portadora de la veneranda Imagen se unieron a ella algunos autos que salieron a su encuentro desde Peralta y que debían acompañarla hasta la sede parroquial. Frente a la Capilla del lugar se habían congregado numerosos fieles para tributar su homenaje de filial devoción a la Sma. Virgen. También en Chamberlain un grupo de fieles salió a su paso ofrendándola junto con el afecto del corazón, hermoso ramo de flores.
1. Entre tanto en Paso de los Toros un movimiento inusitado se notaba en todos los lugares de la Villa y en todos los hogares: los balcones se adornaban con palmas, flores e imágenes, se embanderaban las casas y se preparaban todos para salir a recibir visita tan extraordinaria.
A las 18 horas, el repique de las campanas y el estallido de las bombas anunciaban al pueblo engalanado que la Virgen peregrina se acercaba a nuestra Villa. Una hora antes se hallaba ya la Iglesia y sus alrededores llenos de gente, todos con hermosos ramos de flores en la mano. A las 18.30, por medio de parlantes colocados en el frente de la iglesia, se impartían precisas instrucciones para la ubicación en el lugar de la recepción, empezando a salir la inmensa columna de gente engrosada continuamente con los que iban llegando en interminables caravanas por todas las calles de acceso. Pronto la calle Sarandí resultó chica para contener a la concurrencia que la llenaba desde la plazoleta de la Estación hasta el templo, trayecto que había de recorrer la Virgencita en marcha triunfal. Allá en el fondo, las Hijas de Marsa, con sus vestidos blancos formaban simbólico cuadro entre las dos columnas humanas, y un grupo de 33 niñas con un cesto de pétalos unas, y con enormes y artísticos canastos de flores otras, estaban preparadas para preceder unas y rodear otras la Imagen de María.
2. Los autos que habían salido unos kilómetros a esperar la comitiva anuncian con sus bocinas la llegada. Las bombas y las campanas inflaman aún más el entusiasmo que estallaba ya en el pecho de fervientes multitudes y que de pronto se desborda al aparecer en alto la bella Imagen que veneraron los Padres de nuestra Patria: ¡Viva la Virgen! ¡Viva la Patria que nació cristiana! ¡Viva la Iglesia Católica! ¡Viva el Papa! ¡Viva el Obispo!
Vítores que salían de tres mil pechos henchidos de entusiasmo y que se prolongaban a lo largo de la Avenida como el eco de una cascada mientras en el aire se agitaban pañuelos, banderitas y ramos de flores. Tal el desborde de entusiasmo provocado por la presencia de aquella bendita Reliquia de la Patria.
3. Tomada en andas por las Hijas de María y rodeada de los angelitos empezó el desfile triunfal pasando entre dos columnas de público que al acercarse la Imagen tiraban sus flores al suelo para alfombrar con ellas el trayecto que debía recorrer. Gracias a la A. C. y Catequistas, encargadas e instruidas previamente, reinó un orden tan admirable como artístico, pudiendo desfilar, la Imagen y su comitiva, sin que se notase la mínima nota menos agradable. Así, entre cánticos y vítores, llenos de júbilo y entusiasmo, se llegó a las puertas del templo.
En la imposibilidad de dar cabida en él a tanta multitud se hizo, fuera la recepción. Una niña y un niño dieron respectivamente la bienvenida a la Virgen y al celoso Portador y Guardián del Tesoro Patrio, el Excmo. Sr. Obispo.
Una Hija de María recitó unos versos, y el Sr. Cura Párroco terminó su alocución pidiendo la bendición de la Virgen de los Treinta y Tres para todas las clases sociales, centros docentes, hogares y habitantes de la Parroquia, de la Diócesis y de la Patria.
Terminado este acto se introduce, la Imagen en el templo, mientras el pueblo cantaba las letanías de la Sma. Virgen. Terminadas se imparte la Bendición con el Santísimo, con que terminó la recepción. Numerosas personas quedaron en el templo rezando el Santo Rosario, plegaria que no se interrumpió hasta la partida de la sagrada Imagen.
4. Los Hombres. A las 21.30 se reunieron numerosos en una hora Mariana, junto a la Sma. Virgen, pasada entre cánticos, preces y sermón. Siguieron después por turnos rezando el Rosario durante toda la noche. No pocos pasaron toda la noche en vela y oración, ofrendando a María Santísima el sacrificio de su reposo, para atraerse su maternal protección. A las 5.30 se les ofició una Misa para ellos en la que casi todos comulgaron, partiendo luego para su jornada de trabajo.
Por ser día de trabajo, se celebró la Misa Cantada de Comunión general a las 6.30. Como en los días de gran fiesta, la iglesia se hallaba repleta y más de 350 Comuniones fueron distribuidas por el celebrante Pbro. Dr. Mario Rodríguez, Cura Párroco de Tacuarembó, y por el Excmo. Sr. Obispo.
Los niños.  A las 9.30 los niños llenaban los bancos de la iglesia para hacer su hora Mariana.
Preces, cánticos, sermón, seguido de unas palabras del Sr. Obispo y la Consagración de la Niñez a la Sma. Virgen, llenaron esa fervorosa hora de la Niñez.
La Mujer Isabelina. Modelo de piedad y fervor Mariano, dejó también bien asentada su ferviente y filial devoción a la Sma. Virgen. A las 15.15 empezó la hora para ellas que debía terminar con la entusiasta despedida de la Virgencita.
Desde las puertas de la iglesia, el público congregado siguió con la mirada el vehículo que llevaba la Santa Imagen hasta perderse en lontananza, como si en su interior se llevase un pedazo de su corazón.
Luego... con paso lento, y mustio, reunidos en grupos en medio de animados comentarios en que se reflejaba a un tiempo alegría y tristeza, la multitud empezó a disolverse por las diferentes calles de la Villa, planeando la peregrinación a Florida para el día de la llegada de la Virgencita, a esa Ciudad, el domingo 28. Peregrinación que llevó a un gran contingente de esta Parroquia.
Es indudable que esa visita de la Virgencita de los Treinta y Tres por las parroquias, encabezada por el Excmo. Sr. Obispo ha dejado huellas de gratísima recordación entre los católicos, y un hálito de devoción mariana más intensa, empezó a florecer entre los fieles de la Diócesis.
------------------------------
-------------
UNA PÁGINA VIVIENTE DE TRADICION CRIOLLA EN MELO
- CON MOTIVO DE LA VISITA DE LA VIRGENCITA DE LOS TREINTA Y TRES –
(EL BIEN PÚBLICO - Año LXVII - Montevideo, Viernes 26 de octubre de 1945)

Está por dar fin a su gloriosa gira la venerada imagen de la Virgencita de los 33. Punto por punto, la diócesis de Florida y Melo, recibe alborozada el paso de la histórica reliquia que guarda la Catedral de Florida. En Melo – por su carácter de aniversario del Congreso – la llegada adquirió contornos insospechados.
LA CARRETA. – Existe en las orillas del Convento esta reliquia auténtica del esfuerzo criollo. Tiene 145 años. La “picó” el hijo del viejo carrero. La carreta en cuestión lleva realizados muchos viajes de Melo a Montevideo. Descansaba a orillas del Convento, cuando la llegada de la Virgencita la sacó de su ostracismo. Sobre el alto de su veral se colocó la imagen, y arrastrada por tres yuntas de bueyes hizo su entrada en Melo.
NOTA. – Esa carreta, el día de la muerte del Gral. Rivera (91 años, el presente año) se encontraba, frente al rancho donde expiró Rivera: venía de Montevideo. La entrada de la Virgencita en carreta, reeditó la recepción del Sr. Nuncio los días del Congreso.
RELIGIOSAS. – Al igual que en el Congreso, se sucedieron las Misas de Comunión General de Señoras, Niños y Hombres. En las tres ceremonias, La Matriz no daba abasto. Se reeditaron casi idénticas las páginas de los días del Congreso. Las mantillas hicieron su aparición y la piedad y el fervor inundó los corazones cristianos frente al Comulgatorio. Vivimos en los días eucarísticos del pasado año.
CARRERAS DE SORTIJAS. – Diez gauchos frente a un cuadro levantado sobre el césped. Ahí va el gaucho, a todo lo que da el caballo, son su varita en la mano. ¡Lindos Gauchos¡ Arrancaron 7 sortijas; lo que dice bien del gaucho arachán. Entre tanto, acordeonistas y guitarras llenaban el campo de sus sones y alegrías con cantores y payadores. No faltaron las vendedoras de tortas fritas. ¿Quiénes eran? Las damas de la localidad en un gesto de homenaje a la tradición.
LA GLICINA DE LOS HÉROES. – Existe en Melo una histórica glicina a cuya sombra, Lavalleja y Rivera se sentaron a tomar mate y proyectar planos para el futuro de la campaña. Esa glicina merecía una recordación, y las damas de Melo se la tributaron, una y bien hermosa. Hela aquí: Ataviadas a la usanza del año 1825, un grupo de damas y señoritas asistió a la Pontifical. Llegaron al templo en volantitas abiertas. Su paso por el pueblo fué un triunfo de aplausos y plácemes. Frente al altar asistieron a la Santa Misa en bancos destinados a ellas. ¡Hermosa conjunción de la tradición con el Dios de los próceres! A la terminación de la Misa, recorrieron a pie la calle principal que conduce hasta la glicina histórica. Frente a ella y en un gran semicírculo las damas patricias tomaron mate y licorcitos cebados y servidos por dos chinitas, procediendo luego a la siembra de unas semillas de la centenaria glicina en una enseñanza por el mantenimiento de las tradiciones. Fue un acto de singulares relieves, la presencia de las damas ataviadas tal cual las patricias del año 1825. Se oía decir por todas partes: eso se llama elegancia.
LA PROCESIÓN. – El mismo recorrido que la del Congreso. Multitud incontable llevando a la Imagencita en andas. En el parque donde se celebraron las fiestas eucarísticas, se detuvo la imagen y se izó la bandera entonando el Himno Nacional. Se repitieron los mismos emocionantes momentos del pasado Congreso.
FIESTAS POPULARES. – A las 21 de la noche del 14, sobre un tablado de 8 por 8, se desarrolló un vasto programa de fiestas. Su coronación fué el elegante Pericón bailado con todas sus formas y mudanzas y relaciones por once parejas. Formaban el fondo del escenario al aire libre: la histórica carreta, un ombú y un fogón con fuego vivo, una silla de caderas de vacuno, etc. Un verdadero rincón criollo elevado a su verdadera categoría sobre un tablado en la plaza pública de Melo frente a la glicina de los antepasados. Más de ocho mil personas se reunieron para ver esas fiestas. Dábale categoría y ambiente la presencia de las 32 damas con su indumentaria antigua sentadas junto al tablado con sus alhajas y atavíos de fiesta.
Los que en esos días se encontraban en Melo pudieron apreciar la riqueza que guarda el folklore y las tradiciones criollas. ¿Las suscitaremos en una seria ininterrumpida de presentaciones? Guardar la tradición, cultivándola, nos llevará al engrandecimiento del país.
ASISTENTE.
------------------------------
---------------
1945 - DOCTOR GOROSITO TANCO
¡SALVE, MARÍA DE LOS TREINTA Y TRES!
(Vida Diocesana Nº 140.141 Octubre-Noviembre, 1945)

"En el principio era la madre". "Sin querer faltar al respeto debido a las Sagradas Escrituras, y sin intención alguna de cometer un abuso profano de la Palabra inspirada, me permito empezar así el relato de la Vida de Don Bosco".
Y así mismo comienza Juan Goergensen, su admirable libro. Y está bien; con mi total sumisión reverente al Padre, Creador y Señor. Y al Hijo, Señor y Redentor.
Porque... "en el principio era la madre". No de otro modo pudo decir - y dijo - la humilde mujer que lo había llevado en sus entrañas, a quien más tarde, sentado en el magno sitial de Simón Pedro, le enseñaba, tal vez con cierto orgulloso filialismo, el anillo papal. "Hijo: si yo no hubiese llevado éste, que es mi nupcial anillo, tú no podrías lucir el que me muestras". Exacta verdad. "En el principio era la madre".
Ante esa maravillosa gira que va a emprender la gloriosa Imagen de la Virgencita de los Treinta y Tres, a través de la extensa y bella Diócesis de Florida y Melo, se nos ocurre imaginar que el misionero Obispo - forjador y realizador de una excursión tan providente y peregrina - no habrá pensado de manera distinta.
Por el contrario, evocando en estos días la apoteosis eucarística del Hijo, ha querido pasear, personalmente, la dulce efigie de la Madre, a fin de que la Diócesis entera, le rinda su fervoroso vasallaje, su espiritual tributo.
No puede sorprendernos este nuevo propósito del nobilísimo Prelado. Sabemos bien de su piadoso encendimiento de devoción mariana. Nos lo dice su escudo prelaticio, al lucir ese lirio inmaculado sobre la cumbre de los cerros natales. Lo pregona, ese su ensueño visionario, que el artista plasmó sobre los muros encantados de la mágica Catedral! Tal vez lo consigne - en la más cabal de las expresiones - el éxito rotundo de ese Congreso Eucarístico, celebrado por primera vez en el interior de la República, cuyas proyecciones resonantes perduran y perdurarán a través del tiempo, con la inconmovible perennidad de las obras de Dios!
No habrá escapado, estoy seguro, apoteosis tal, a la divina intercesión de la más tierna y poderosa medianera entre Dios y las obras de los hombres.
Así, "por los blancos caminos de la Eucaristía", paseará la Virgen, triunfalmente, a través de la Diócesis, bajo la mística y patriótica advocación de María de los Treinta y Tres. Embajadora de la gracia, habrá de cumplir su "raid" de luz, de paz y providencia, mientras pregonan su diáfana visita, una eclosión de flores primaverales, un cortejo de arrullos y gorjeos, un multánime coro de oraciones, de musical cánticos!
¡Salve, María de los Treinta y Tres!
¡Que a tu paso triunfal, campos, pueblos, ciudades, te rindan el más férvido homenaje, en la doble eclosión de sus religiosos y patrióticos sentimientos!
¡Que en total armonía, se eleven a los cielos, en tu loa, los acordes del Himno, con las místicas frases de la Salve! ¡Que en vuelo, las campanas te saluden!
¡Que luzcan las banderas a tu paso, sus gloriosos colores de epopeya! La tricolor que se inclinó a tus plantas, te muestre su consigna. dilemática: o Libertad o Muerte. Vale "decir: "o la libertad de los hijos de Dios (que son tus hijos) o la esclavitud de los hijos del mundo".
Ya te aguardan, ansiosos, en el serrano predio, en que el bravío héroe de la inmortal cruzada, redivivo en el bronce, saludará tu paso con su ademán de gesta: ¡Salve, mi Capitana! Desde la cumbre del Verdún, descenderá la gracia de esa bendita Imagen, - sonrisa del camino, tierna visión de un panorama feérico - hasta tus mismas plantas peregrinas...Y el noble corazón del caballero que te escolta, cuando cruce esos valles se habrá de conmover hasta el sagrado tributo de las lágrimas!
Providencial designio que ha enlazado en tu gloria, los nombres de dos hijos de ese lar encantado! Así lo dijo el inspirado numen de aquel inolvidable padre Fontes:

"Ha tiempo, madre mía,
que viste a Lavalleja,
postrándose a tus pies.
Entonces estallaron
rugientes oraciones
de pumas y leones...
Eran los Treinta y Tres".
Hoy ves que otro minuano
te implora de rodillas.
El culto con que brillas
es su íntimo anhelar;
y pide verlo en amplios
impulsos de marea
para que pronto sea
glorioso y popular".

¡Treinta y Tres!...Treinta y Tres, la ciudad gaucha; que el Olimar arrulla con su mansa corriente, también se apresta, para rendirte su filial homenaje! Bien harás, en descansar allí fatigas del camino...Los nombres de su plaza y de sus calles, muy gratos te serán en su eufonía, a tu historial patricio. El propio nombre de ese bendito suelo, te nombre con su gloria evocativa. Estarás en tu casa, El cielo azul, la clara agua del río y el purpúrico rojo de los ceibos, formarán tu oriflama de victoria y así...
Mientras la voz viril del hombre de los campos te aclama sin cesar, mientas la noble madre paisanita te alce al hijo en sus manos levantadas para que lo bendigas cuando pases... Mientras por un momento se aquiete la labranza y la faena, y se musite una oración humilde... tú irás rogando a Dios por la paz de esos campos y la ventura de esas gentes...
¡Y llegarás a Melo!¡Vergel encantado de Arachania!
Tal fuera la apoteosis Eucarística, habrá de ser - oh, MADRE- tu apoteosis! Tus plantas peregrinas andarán por las huellas nacaradas de tu divino Hijo. Y como ayer a Él, un pueblo desbordado de frenesí latréutico, lo aclamó hasta el delirio, te clamarán a Ti, Madre del mundo y honor de nuestro pueblo! Te aclamarán a Ti...

“¡Oh puro cielo que nació en la tierra
y que en la tierra tuvo preso al cielo
(para que el cielo convirtiera en cielo
la tierra, que hasta entonces era tierra)”.
------------------------------
---------------
MEZQUINDAD DE ESPÍRITU
(Vida Diocesana Nº 145. Diciembre 1945)

ADVERTENCIA
El siguiente artículo lo tomamos de “El Camino del Bien” de Rivera, y aunque en particular se refiere a aquella zona, sin embargo tiene alcance para todos lados en lo que se refiere al riguroso silencio guardado, en general, por la prensa metropolitana, respecto de los grandiosos y nada comunes acontecimientos en que fue protagonista principal la histórica imagen de la “Virgencita de los Treinta y Tres”..
Pues hemos de tener en cuenta que salvo raras y honrosas excepciones, la Prensa Capitalina, muy poco o nada dijo de todo aquello, y los corresponsales del interior no vieron o no apreciaron los festejos religiosos y populares en que intervenían en cada pueblo o ciudad millares y millares de personas. Para ello siguió siendo siempre más interesante y novedoso los consabidos “importantes sucesos”, que se titulan: “Jinete en mala”, “Pelea entre vecinos”, “Robo de gallinas”, “Comida de despedida”, “Se lesionó en el futbol”, etc.,etc.

LA REDACCIÓN:
MEZQUINDAD DE ESPÍRITU. – Hemos abierto con interés la prensa metropolitana, para leer en las secciones informativas del Interior, las crónicas de las fiestas habidas en muchas ciudades con motivo de la llegada de la comitiva que acompañaba a la “Virgen de los Treinta y Tres”. Particularmente teníamos curiosidad por conocer la impresión causada en Tacuarembó por los trescientos peregrinos riverenses.
No encontramos nada. Esas fiestas espléndidas y eminentemente populares, pasaron desapercibidas para los cronistas, que sólo tuvieron ojos para ver las vacas de la exposición ganadera.
No sabemos cómo adjetivar esta táctica de combatir lo religioso, por más que presenta todos los síntomas de la vulgar cobardía.
Imposibilitados de negar la realidad de un pueblo que sale a las calles a cantar su fe a la luz del día, los encargados de recoger las vibraciones de la vida cotidiana, optan por ocultarla con un velo sistemático.
A eso llaman, sin duda, imparcialidad informativa. Es la misma táctica usada en las escuelas oficiales. Se le oculta el niño el problema religioso, y luego con ufanía se dice: somos neutrales!”
-----------------------------
---------------
1946 - LA DEVOCIÓN MARIANA
LA DEVOCION MARIANA EN NUESTRO PUEBLO
(Vida Diocesana Nº 151)

Por el distinguido escritor Dr. Carlos Ferres

Estas líneas fueron preparadas por el Dr. Carlos Ferrés para el número de nuestra Revista que apareció ya que coincidía con el traslado de la imagen de la Virgen de los Treinta y Tres por los pueblos de la diócesis de Florida y Melo.
Circunstancia de enfermedad impidieron al Dr. Ferrés concluir entonces su trabajo; lo ha completado y nos lo ha enviado.
La devoción de los descubridores y conquistadores a la Santísima Virgen fue una de las características con que se movieron sus empresas en estas nuestras zonas geográficas. Esculpida en la toponimia de ellas, quedó Buenos Aires, en recuerdo de Nuestra Señora del Buen Aire, a la cual se encomendaban los navegantes en sus arriesgadas navegaciones y bajo el amparo de la cual colocaban sus naves. Iniciada la conquista, los Padres Jesuítas y otras órdenes religiosas en sus reducciones, los Obispos en sus jurisdicciones y los gobernadores civiles y militares en sus empresas imponían por todas partes el nombre de María en sus variadas advocaciones y elevaban sus primeras capillas y templos eligiéndolas por sus titulares. Trajeron las primeras imágenes muchas de las cuales se conservan aún, consagradas con un culto tradicional enriquecido por los constantes prodigios y milagros que sirvieron para crecimiento de la fe.
Esa devoción a la Santísima Virgen se extendió rápidamente en los territorios conquistados y en las tribus doctrinadas, designando los propios indios, en su idioma nativo, el nombre de la Santísima Virgen y denominando los indígenas, con su propia lengua, las comarcas en que se desenvolvía su especial devoción, como ocurrió en superficie que hoy es del Estado de Río Grande donde aún nos encontramos con Tupaceretan, que significa en su traducción a nuestro castellano, "Tierra de la Madre de Dios".
Dentro del designio en que estoy de hacer resaltar el testimonio de nuestros pobladores de la primera edad de España entre nosotros, pasemos a esta banda de los Ríos Uruguay y de la Plata.
Varias décadas antes de ser fundada Montevideo, con el nombre de la Virgen en su advocación a Nuestra Señora de Belén, se designó una artística Capilla que presidía la Estancia de las Vacas, hoy Departamento de Colonia. Esa Estancia era de propiedad de la Residencia de los PP. Jesuitas, situada en Buenos Aires, Residencia de Belén; esa capilla se conoce ahora, después de varias vicisitudes históricas, por Capilla de las Huérfanas.
Al fundarse nuestra ciudad, un bando de Pedro Millán, sujetándose a instrucciones que le trasmitió Don Bruno Mauricio de Zabala, estableció como segunda festividad de la ciudad "la de la Concepción de "Nuestra Señora como titular de la Iglesia Matriz", como más tarde recordaron ese misterio "Concepción de las Minas" en el caserío formado para el laboreo de minas por Don Cosme Alvarez y "Concepción de Pando". Y más allá "Nuestra Señora de los Remedios", "Nuestra Señora de Guadalupe y más afuera, "Nuestra Señora de las Mercedes", "Muestra Señora del Rosario", etc., debiendo destacarse especialmente a "Nuestra Señora de Luján", como patrona de Florida, lugar tan henchido de gloriosos recuerdos históricos.
Y a poco de organizada la ciudad, surgen en su Iglesia Matriz, dos cofradías que atestiguan la devoción de los primeros pobladores hacia la Santísima Virgen: las Cofradías del Carmen y Cofradía del Rosario.
Y en los momentos en que la explotación rural toma extensión en forma regulada, se fundaron dos establecimientos de áreas muy dilatadas, que fueron muy nombradas en su época, en las cuales se veneran en sus capillas a la Madre de Dios, ambas estancias ubicadas en zonas comprendidas en la actual Diócesis de Florida y Melo; la Estancia de Nuestra Señora de los Desamparados, situada en el rincón de ambos Santa Lucia, Santa Lucía y Santa Lucía Chiquito, como decían entonces, y tierras de salida a Mansavillagra, Illescas y Monzón, así nombradas por el P. Cosme Aguilló, jesuita valenciano, advocando a la Virgen en su titulo de Patrona de Valencia, y la Estancia de Nuestra Señora del Rosario, campos entre Cañas y Cordobés, con su capilla con la misma advocación, fundada por la fe y devoción de Don Francisco Rodríguez, oriundo de Galicia y conocido por Farruco, razón por la cual se designó la capilla, como Capilla de Farruco, nombre que aún existe en la nomenclatura geográfica del país!
Más conocidos que los que he expuesto, son los testimonios de nuestros patriotas de su fe y devoción a la Santísima Virgen, especialmente los de Artigas, cuya devoción a la Virgen del Carmen recuerda nuestro pueblo Carmelo y la de los héroes de 1825 prosternándose ante la imagen de Nuestra Señora de Luján, imagen tan popularizada como la Virgen de los Treinta y Tres.
Ahora esta imagen de la Virgen de los Treinta y Tres, ya ha efectuado su primera recorrida por la Diócesis de Florida y Melo, trasladándose en esa su imagen a las poblaciones que caen dentro de los límites de esa Diócesis. Ella vino a ser la visitante de los fieles, en las localidades de sus feligresías, retribuyendo así las visitas que esos fieles le han hecho, o proporcionándoles su visión a quienes estuvieron antes impedidos o remisos en ir a su presencia, o fueron morosos en concurrir a su sede habitual. En esta ocasión, fue la Virgen la que fue a ellos.
Laudable acierto ese de que la Virgen en su imagen se traslade a los otros núcleos poblados, cercanos o distantes, en piadoso trayecto que suscita la devoción de los fieles y recoge las plegarias y las demandas de gracias y favores, práctica ya instaurada en otras partes del mundo. Ha ocurrido recientemente en la Argentina, entre otros casos, con la triunfal recorrida de la Virgen de Luján, que, saliendo de su precioso templo, recorrió la diócesis de Azul, Bahía Blanca y Viedma, por iniciativa de su ilustrísima Anunciado Serafini, que organizó la magnífica embajada, como la realizada hace poco entre nosotros, por Monseñor Paternain, en su Diócesis.
Yo he presenciado un acto similar en Sevilla. Allí es costumbre - creo que anual - de que la Virgen del Rocío sea sacada de su altar de una de las iglesias del barrio de Triana y emprenda sus visitas por las poblaciones comarcanas. La imagen es trasladada, por estricta adaptación a la vieja costumbre andaluza, en una carreta de "bueyes, acompañada de típica comitiva.
Como la recorrida coincide con los rigores del verano, el traslado de pueblo en pueblo hacia la Ermita terminal de la jira, dura 7 días y se hace en las horas del final de la noche y madrugada. Entiendo que por esa circunstancia se denomina a esa virgen, "La Virgen del ROCÍO".
El regreso a Sevilla se efectúa en horas de la madrugada, pero desde el oscurecer está de extraordinaria fiesta la ciudad, en espera de la Virgen.
La ciudad no duerme esa noche: toda la población está en las calles, concentrándose en el arrabal de Triana sobre el Guadalquivir. Toda la riqueza de Sevilla, la alegría, el lujo, los romeros típicos, los festejos populares propios de la ciudad, en un conjunto abigarrado de alegría y algarabía que destruye las separaciones de clases sociales, y que pone en un conjunto al caballero principal, al militar, a la autoridad civil, al empleado, al torero, al jornalero, a la obrera ataviada con la sencillez de su Vileza y su donaire, a la mujer linajuda, ornada con sus alhajas y sus vestidos clásicos y vistosos, todo, está allí encendidas las almas en su devoción a la Virgen representada por la imagen ante la cual se prosternan todos en un rezo común.

CARLOS FERRES
Casi todos los datos históricos que expongo en este apartado, los tomo de mi libro "Época Colonial - La Compañía de Jesús en Montevideo".
--------------------------
-------------
1946 - San Fructuoso
(Vida Diocesana Nº 146. Abril de 1946)

Acción Católica
San Fructuoso (Tacuarembó). Tiene 15 socias actualmente. Misa de Comunión y algunos Retiros. En la propaganda radial que se trasmitió diariamente a las 19,30 en preparación al homenaje que rindió Tacuarembó a nuestra reliquia Patria, la Virgen de los Treinta y Tres, correspondió al Centro de Mujeres el día lunes, en el que las socias expusieron temas marianos con verdadero amor a la Santísima Virgen. Tiene 16 suscriptoras de "Irradiemos". La Sra. Presidenta actúa con dificultades por razones expuestas muy atendibles.
------------------------------
---------------
1946 - La III Asamblea Nacional de Acción Católica
LA PREPARACIÓN DE LA III ASAMBLEA NACIONAL
(Vida Diocesana Nº 132, Octubre de 1946)

Hace más de un año visitó la presidente del Consejo Nacional al Exmo. Sr. Obispo de Florida y Melo, a fin de solicitar su autorización para realizar en la ciudad sede de su Diócesis la III Asamblea Nacional de la F. U. S. A. C. Concedido este pedido el Consejo Nacional envía a los Excmos. Srs. Obispos, «para su aprobación, el lugar y fecha elegidos para realizar esta Asamblea los que contestan aprobando y bendiciendo este pedido:
Con toda el alma nos adherimos a las magnas jornadas de la III Asamblea Nacional de Señoritas, que han de tener lugar en la histórica ciudad de Florida. ..Deseamos vivamente que estas magnas reuniones jalonen una nueva etapa en el ritmo ascendente que las jóvenes de Acción Católica han impreso a su Federación.
Bajo la mirada amorosa de la Virgencita de los Treinta y Tres, la labor de nuestras jóvenes será provechosa y eficaz; y confirmará una vez más las esperanzas que la Iglesia pone en esta nueva legión que viene, la frente ungida de su Jordán, que fijos en alto los ojos tiene y sus dos manos sembrando, van.
Para que así sea, imploramos sobre esta III Asamblea .de la juventud femenina nuestra más amplia y paternal bendición.

ANTONIO MARÍA BARBIERI Arzobispo de Montevideo
Acuso recibo de la nota en la cual piden mi aprobación para realizar la Asamblea Nacional en la ciudad de Florida en los días 10, 12 y 13 de octubre.
Me complazco en reiterarles la aprobación que de palabra tuve ocasión de concederles en Montevideo, verdaderamente complacido que se haga ésa Asamblea en la Sede de la Diócesis hermana y augurando que ella sea de grandes resultados espirituales y de eficaz adelanto en la recristianización y enfervorizamiento de nuestra juventud femenina en todo el país.
Bendigo de todo corazón, a todas las dirigentes de la Federación de Señoritas, a sus socias y muy especialmente a las que trababan en la ardua tarea de preparación de esta magna Asamblea que se proponen realizar.

ALFREDO VIOLA,
Obispo de Saltó

La F. U. S. A. C. entra en ésta fecha en un periodo de actividad intensísima, la preparación de su Asamblea Nacional. La autoridad máxima de la Federación ha dado a las socias de toda la República su palabra de-orden: todas a Florida en octubre. .
Y las socias con plena visión de su responsabilidad, conscientes de su deber, santamente orgullosas de la misión para la cual la Iglesia las llamó, responden a su Consejo Nacional desde todos los ámbitos del Uruguay. Por Cristo, por la Iglesia, por la Patria...
¡Presentes!...
En los días de la Asamblea estudiará la Federación sus propios problemas, y bajo la mirada dulcísima y maternal de María dé los Treinta y Tres, retemplará su espíritu para seguir siempre adelante, teniendo por meta más sublime de los ideales: EI Reinado de Jesucristo en la Patria amada.
Y cuando terminada la tarea retornen a sus puestos de trabajo las socias de la F.U. S. A. C., tenemos plena seguridad de que todas llevarán, renovado una vez más, el propósito firmísimo de ser como querían que fueran las jóvenes de la Acción Católica Pío XI el grande: angélicamente puras, eucarísticamente piadosas. apostó1icamente activas.
Estos son nuestros votos, éstos nuestros más fervientes augurios. A ellos unimos nuestra bendición pastoral que de corazón impartimos a las beneméritas dirigentes de los Consejos Nacional y Diocesano a todos los Socios, a todas las Niñas.

MIGUEL PATERNAIN,
Obispo de Florida y Melo

PREPARACIÓN POR LA ORACIÓN
Se inicia inmediatamente la preparación básica de nuestra III Asamblea Nacional: la 'de la oración y el sacrificio; ha sido el primer trabajo de nuestra F. U. S. A. C. doblar sus rodillas ante la imagen de la Virgen de los Treinta y Tres, para implorar bendiciones por el éxito de las jornadas de octubre.
El 25 de marzo, tiene lugar en el oratorio de la Sede de la Acción Católica: una Misa celebrada por el Excmo Sr. Obispo Diocesano Mons. Miguel Paternáin a la que asisten el Consejo Nacional, sus auxiliares y el Consejo Arquidiocesano. Finalizada la Santa Misa, el Excmo. Sr. Obispo dirigió unas palabras exhortándonos a trabajar activamente por el éxito de esta Asamblea, la que' puso en manos de la Santísima Virgen.
En Consejo Nacional, exhorta a toda la Federación a unirse en la oración y el sacrificio, y las dirigentes y socias, aspirantes y niñas recogiendo este pedido lo convierten en el magnifico tesoro espiritual de nuestra Asamblea y con este fundamento sobrenatural, nos disponemos a su realización. Dios estará con nosotras, porque la oración ha sido nuestro primer instrumento de trabajo y Jesús en la Sagrada Comunión nuestro mejor consejero.

LA ORACIÓN DE LAS RELIGIOSAS
Una de las primeras tareas fue solicitar por medio de una carta oraciones y sacrificios todas las Comunidades Religiosas establecidas en nuestra Patria. Este pedido encontró amplia y cálida acogida y vemos así unidas a nuestras religiosas con toda la F. U. S. A. C. en una misma intención.

PATRONA DE LA ASAMBLEA
La Virgencita de los Treinta y Tres, cuyo manto cobija a toda la Patria Uruguaya, fue proclamada patrona de nuestra Asamblea; en sus manos pusimos nuestros esfuerzos y trabajos, nuestras oraciones y sacrificios, seguras de alcanzar por su intermedio las gracias necesarias para el engrandecimiento de nuestra F. U. S. A. C.

ORACIÓN HIMNO Y LEMA
El Reverendo Padre Altolaguirre redactó una hermosa plegaria a la Virgen cita de los Treinta y Tres, como oración oficial de esta Asamblea...
...Leída ésta en todas las Iglesias de Florida, salen las jóvenes del Consejo y sus auxiliares en busca de alojamientos. Horas y horas de trabajo lento, pesado, explicando la necesidad de este pedido: casa por casa, cuadra por cuadra, manzana por manzana. Y Dios bendice este esfuerzo 100, 300, 500 alojamientos que la ciudad de Florida en un gesto hermoso pone a disposición de las jóvenes de la F. U. S. A. C. Podéis estar orgullosos de Muestra ciudad; vuestras puertas no han permanecido cerradas como las de Belén cuando José pedía albergue para María, antes bien se han abierto generosas ofreciendo lo mejor de vuestros hogares para esas jóvenes que como María también llevan a Jesús en sus corazones. Que la Virgen de los Treinta y Tres atraiga sobre cada una de ellas la bendición de Dios.
Según prescribe el Reglamento el Consejo Nacional con 3 meses de anticipación convoca a sus Consejos Diocesanos para la III Asamblea Nacional;

CONVOCATORIA
El Consejo Nacional de la F. U. S. A. C. convoca a los Consejos Arquidiocesano y Diocesanos para la III Asamblea Nacional que, de acuerdo al articulo 16 del reglamento, se realizará D. M. le 13 de octubre del corriente año, en la ciudad de Florida. Exhorta además a dichos organismos y a todas las socias de la F. U. S. A. C. a concurrir a las jornadas de Oración, y Estudio que en preparación a la Asamblea, tendrán, lugar en la misma ciudad los días 10, 11 y 12 del mismo mes.
Al convocar para la III Asamblea, el Consejo Nacional se propone, además de cumplir con una disposición reglamentaria, estudiar juntamente con las dirigentes diocesanas y parroquiales, los medios de lograr un mayor perfeccionamiento de la F. U. S. A. C. en su organización y en su actividad.
Para llegar a este fin, el mejor medio ha de ser indudablemente estas reu-niones de estudio y de examen de las dificultades y de los problemas con que hemos tropezado en la persecución de nuestros fines. Con la mayor sinceridad, nos pondremos frente a nuestro trabado, dispuestas a reconocer nuestros errores y a recibir nuevas orientaciones. Trataremos de vivir en esos días, al amparo de la Virgen de los Treinta y Tres el lema de nuestra Asamblea: FIRMES EN LA FE, HEROICAS EN LA ACCIÓN; las lecciones y conferencias que allí se dicten tendrán todas un único fin; especializadas o generales, públicas o privadas, las sesiones de la Asamblea nos llevarán todas a reafirmar nuestra Fe porque será éste el único medio para que, en la Acción, nos mostremos heroicas y abnegadas hasta el sacrificio.
Dirigentes y socias, comprended bien vuestra responsabilidad en esta hora preparatoria de la III Asamblea Nacional; echad mano al arado, y cada una en su campo de acción haga el propósito de ser la forjadora de este movimiento que, si ha de ser ruidoso, ha de serlo por su, valor aleccionador para gloria de Dios y bien de la F. U. S. A. C.
Que cada una de las dirigentes y de las socias, dejando de lado sus miras personales, acuda a Florida llena de entusiasmo y de confianza en el porvenir, porque si es cierto que quizás encontremos muchos defectos en nuestra Federación, no es menos cierto que de Florida vendremos con un nuevo bagaje de conocimientos y de experiencia que nos llevará al mejor ejercicio de nuestro apostolado y, por lo tanto, al mejor cumplimiento de nuestros deberes de servidoras de los intereses de Cristo. Montevideo, 13 de julio de 1946.
Esther Dellacqua, Presidenta; Juan Altolaguirre, S. S. Su Asesor; Ana Celia Dermit; Mafia Catalina Barreiro; Alba Urreia; María Angélica Piqueros; María Alicia Zaffaroni; Socorrito Aguirre; Blanca Hughea; María Luisa Cabrera.

PALABRAS DEL ASESOR NACIONAL
En vísperas de la Asamblea nuestro Asesor Nacional se dirige a las jóvenes de la F. U. S. A. C. diciéndoles:
Corren vertiginosamente los días y las semanas. Ya se vislumbra el mes de octubre con sus días primaverales.
En los corazones cristianos y patriotas de las Señoritas de la A. C. Uruguaya, brille el calor incontenible de postrarse ante la Virgencita de los Treinta y Tres y venerar con patriotismo santo la Piedra Alta sobre la que se asentó la cuna de la Patria recién nacida a la vida de la libertad.
El Consejo Nacional, los Consejos Arquidiocesano y Diocesanos, los Centros Parroquiales de toda la República están en estos momentos preparando con sin igual amor y dedicación la III Asamblea Nacional.
Desde todos los ámbitos de la Patria se elevan preces a Dios por el éxito del acto más trascendental de la Federación. Y se ofrecen sacrificios. Y se hacen toda clase de preparativos. Y se elevan al cielo los ojos de nuestros venerados Pastores y arrojan sus manos raudales dé bendiciones.
Todo ello hará que sea muy grande la Asamblea Nacional de la F. U. S, A. C., en Florida. Y en las pocas semanas que nos separan del 10 de octubre, la preparación no hará más que aumentar, el entusiasmo de las jóvenes, seguirá su ritmo ascendente.
Aspiramos a una gran Asamblea.
Nos lo exige la presencia de la Virgencita de los Treinta y Tres.
Nos urge a ello la veneración que a nuestro Episcopado profesamos.
Nos lo demanda el cariño entusiasta para con la F. U. S. A. C., con su pasado, con su presente, y sobre todo, con su porvenir.
Pronto los caminos de la Patria se despertarán con el rumor de juventudes femeninas que anuncian la paz, que anuncian el bien. Y los vientos llevarán a todos los ámbitos de la tierra uruguaya, armonía de cantos juveniles.
Todo el Uruguay verá a las mejores de sus jóvenes hijas, dirigirse a Florida.
Y Florida, la ciudad patricia, al recibir esa magnífica oleada de vida exclamará emocionada:
Esta es la nueva legión que viene
La frente ungida de su Jordán;
Fijos los ojos en alto tiene
Sus dos manos sembrando van.

Juan Altolaguirrre. S. S. S.


------------------------------
---------------
1946  - EL VIAJE TRIUNFAL DE LA VIRGENCITA DE LOS TREINTA Y TRES
 (Vida Diocesana Nº 145. Marzo de 1946)

Muchas son las cartas y mensajes recibidos en el Obispado con motivo del Viaje triunfal realizado con la venerada Imagen de la Virgen de los Treinta y Tres en el pasado octubre; no pudiendo dar a conocer a nuestros lectores todas esas cartas y mensajes, publicamos hoy la siguiente, llegada desde la lejana Curitiba, en el Estado de Paraná (Brasil).

Curitiba, 17 Janeiro de 1946.
Exmo. e Rvmo. Monseñor Miguel Paternáin, D. D. Bispo de Florida y Meló:
Louvado seja N. S. Jesús -Cristo!
Que o ano que se inicia seja de multo, prosperídade para V. Exia. e a querida Diocese de Florida y Meló de quem já fui membro.
Lendo o artigo do Rmo. P. Pascasio Bresque entusíasmei me e näo podendo silenciar, dirijome a V. Exia. e á ele congratulandome pela belissima excursäo que ambos proporcionaram aos devotos filhos da Virgencita de los Treinta y Tres.
Lamento nao residir mais em Tacuarembó, onde tive a dita de conhecer a V. Exia. personalmente, e ali presenciar espectáculo täo comovedor; porem mesmo distante nesta longinqua Curitiba onde Na. Senhora tambem é Pedroeira sob o titulo tíe Na. Senhora da Luz, si fira possivel iría genuflexa rendherla as homenagens que tributaramlhe os seus diletos fílhos uruguayos.
Humildemente peço vos as santas bençäos. Serva em Jesús e María

ROSA MACEDO DE BUENO.
------------------------------
---------------
1946 - Himno a la Virgen de los Treinta y Tres
(Vida Diocesana Nº 152. Octubre de 1946)

CORO
Estrella del alba del paterno día ;
que el sol de la Patria miraste nacer,
nuestra voz te aclama "Capitana y Guía" '
como fuiste un día, de los Treinta y Tres.

ESTROFAS
1.- En los torvos ojos de la tribu huraña,
tus ojos pusieron luz de amanecer,
y en sus fieros labios, que crispa la saña,
puso sus blanduras tu nombre de miel.

2.- Fuiste toda nuestra, Virgen campesina,
flor de nuestra tierra, como el macachí;
se doraba el trigo bajo tu hornacina
e iban los corderos balando hacia Ti.

3.- Tuya fue la gloria de la audaz Cruzada,
se inclinó a tus plantas su invicto pendón,
sus héroes juraron, bajo tu mirada,
la Carta sagrada de emancipación.

4.- Porque nunca fuiste sierva del pecado
y tus libres manos no esclavizó el mal,
Por eso te hicimos, Virgen , del Pintado,
el signo inviolado de la Libertad.

Este Himno fue compuesto por el renombrado poeta Salesiano, Padre Arturo E. Mossman Gros, a pedido del Consejo Nacional de Señoritas de la Acción. Católica que deseaba tener un Himno propio para entonarlo en honor de la Virgen de los Treinta y Tres en los días de su III Asamblea Nacional. No es necesario ponderar tan preciosa y delicada poesía.
Puso música a esta letra, el maestro Alberto González, Director de la nunca bien ponderada Polifónica "Don Bosco". A propósito de su obra musical, se expresa así el maestro González en una carta:
"Traté de hacer una cosa popular, pero al mismo tiempo revestida de la seriedad que merece la música litúrgica. Empleé, al comienzo, (introducción y coro), el hermosísimo tema basado en el "Alleluia" del Sábado Santo, que se canta al comenzar las Vísperas. El recuerdo del amanecer pascual, lo quise asociar a la Santísima Virgen, que en los albores de nuestra independencia regocijó a nuestros patriotas llenando sus almas de grandes esperanzas, cuyo símbolo es este «Aleluia» temático, que con tanta emoción cantamos el Sábado Santo con ansias del día pascual. Por todo esto y por lo hermoso del tema elegido, me resolví adoptarlo para este himno a la Virgencita".
El Excmo. Sr. Obispo ha aprobado la letra y la música de este nuevo Himno y desea ardientemente que los floridenses lo aprendan cuanto antes para cantarlo, unidos a las Asambleístas, en los grandes actos de los días 10, 11, 12 y 13 de este mes de Octubre.
------------------------------
--------------
1946 Juana de Ibarbourou — NOVIEMBRE – DICIEMBRE
 (Vida Diocesana 153 -154)

OFERTORIO
Por Juana de Ibarbourou
Día jueves, 26 de Setiembre

Señoras y caballeros católicos de la Florida;
Elsa Raquel Ipuche, que es una fervorosa artista mariana, y yo, hemos venido hoy a vuestra ciudad histórica, a compartir con vosotros una de las fiestas más hermosas que puedan conmover a esta Diócesis: las bodas de plata sacerdotales de nuestro Obispo.
Lo que significa este aniversario es tanto, y tan grande, que dan ganas de arrodillarse para contarlo, porque veinticinco años de la vida de un sembrador de la doctrina de Cristo, son, uno a uno, veinticinco años de la más pura y luminosa labor de salvación que se conoce sobre la tierra.
Discúlpeme la humildad de Monseñor Paternáin, lo que de él voy a decir estando presente, y acepte, con resignada y paciente indulgencia, cuanto pueda violentarlo mi propósito de hacer resplandecer ante todos, sus virtudes y su obra, que ejercita y realiza tan calladamente. Acéptelo con un deber más de su excelso y difícil ministerio, pues el ejemplo es una lección viva - la más fecunda - y siempre estamos necesitando las grandes lecciones de los grandes maestros.
Monseñor Paternáin, incansable constructor místico, entre todas sus empresas, ha dado, por sobre todo, a la Florida, tres obras esenciales: su espléndida catedral - todo un poema de arte mariano - orgullo de este país joven que recién se está edificando, y que aún pocos templos posee de los que con justicia pueda decir el creyente:
¡Qué hermosa es la casa de mi Padre!

La realidad viva y ya triunfante de su Seminario, creado desde el ensueño hasta los capiteles por este hacedor de sacerdotes, que conociendo la necesidad de esta Diócesis de 500.000 mil almas, con sólo 20 sacerdotes ordenados para su servicio, se puso a la enorme tarea de formar nuevos soldados de la fe, para que de esta manera no empalidezca y siempre brille promisora, la llama de la Lámpara Potens, entre los remolinos de las tormentas.
Y la devolución al pueblo, de la Virgencita de los Treinta y Tres, obra de Prelado y de patriota, como si un secreto mandato de aquellos otros sacerdotes que firmaron en la Piedra Alta, en Agosto de 1825, la declaratoria de la Independencia de la Provincia Oriental, lo hubiese impulsado a revivir el culto de la imagen patricia, que acompañó en la cruzada heroica a aquellos 33 hombres visionarios, que realizaron una de las hazañas más grandes, más dignas del verso epopéyico que tiene la Patria en los anales de sus luchas por la libertad. Lírico, contemplativo y constructivo a la vez, Monseñor Paternáin, que, a su profunda cultura une un claro y valeroso espíritu fuerte, sabe, como Job, que "la vida es milicia sobre la tierra" y que las almas tibias y cobardes, no son dignas de trasmitir la ley del Evangelio. Por eso, propugnando el progreso de su Diócesis, se ha dado entero a su ministerio, en una lucha sin capitulaciones, venciendo perezas e indiferencias, para que sus fieles alcancen la plenitud de la vida cristiana, que es la meta admirable a que debe aspirar todo creyente.
De su Seminario han de salir, hechura suya, sacerdotes de fe apasionada e inflexible grandeza moral, dignos de secundarlo en su obra, y continuarla. En esta hora de tinieblas en que la paz del mundo no es más que una tragedia parcial, extremecida y anhelante, el buen torrero, no sólo no abandona su faro, sino que multiplica las lámparas. Cuanto más se espesan las sombras, más debe intensificarse la acción hacia la luz. Monseñor Paternáin sigue ardientemente la tradición apostólica de prevenir y de salvar. Es la táctica de los grandes médicos y los grandes conductores. Y sabiendo cuanta fuerza directriz contiene el ejemplo, él es, el primero en darlo, con una indestructible integridad de diamante.
El catolicismo es la única valla efectiva que se levanta potente contra la estructuración materialista del mundo moderno y cada sacerdote tiene un activo rol de Jefe en la gran lucha que se entabla por la salvación universal. Por eso, este Seminario de la Florida, ensueño y edificación de nuestro Prelado, que es todo un reducto espiritualista traspasado por la sustancia misma del Evangelio, ha de asegurar a la Diócesis la salvaguardia que necesita.
El Padre Lacordaire, el más grande orador sagrado del siglo XIX, dice que la Iglesia es "el centro en que se unen la máxima libertad y la ley más deslumbradora". Sus ministros y sus príncipes tienen la responsabilidad de continuar esta tradición, y enseñando y trasmitiendo la doctrina de Cristo, cumplen la misión de divina conquista, que tan efectiva esperanza ofrece al mundo.
La vida de relación y compenetración de la Iglesia y la sociedad civil y políticamente organizada, se funda en la soldadura de "la ley natural y la revelación divina", según dice Su Santidad Pío XII .
Monseñor Paternáin, en su obispado, realiza sin ostentaciones dificultosas, y con admirable tacto diplomático, esta soldadura; la realiza sin alardes en el triunfo de empresa tan llena de escollos, y su acción está dando tales frutos, que Melo, mi pueblo natal, cuya fe religiosa colectiva no pareció nunca ser muy grande, dio ya, en el Congreso Eucarístico organizado el año 1944 por nuestro Obispo, un ejemplo tal de fervor que asombró y conmovió al mismo Señor Nuncio Apostólico Monseñor Lévame, acostumbrado a asistir a muchos Congresos de esta sublime naturaleza, en grandes ciudades del mundo. En toda su obra, firme, silenciosa y tenaz, Monseñor Paternáin disimula su actuación, pero no puede disimular sus victorias, pues si él oculta el rostro ellas le iluminan la mano.
Cuando se llega a los 25 años de vida sacerdotal con tal saldo, bien se puede dejar serenamente que la grey agradecida y conciente de los inmensos bienes de toda especie recibidos, festeje las excepcionales bodas de plata con todos los ditirambos. Pero ditirambos, entiéndase, no en el sentido de ampulosidad, sino en el de exaltación, de desborde afectivo, de plenitud de júbilo en la fiesta.
Así estamos esta noche ante vos, Monseñor Paternáin, ejemplar Obispo nuestro. Así os damos las gracias y así, Monseñor, pedimos al cielo que os haga celebrar las bodas de pro y, las bodas de diamante, lleno de la pura gloria de vuestra fecunda misión apostólica largamente cumplida. En la constante obligación cristiana del espiritual progreso diario, habéis ido elevando, Monseñor, vuestra escala de Jacob. Por ella ya suben y bajan cantando los ángeles sonrientes: son vuestras intenciones logradas. Y si un extremo de la escala se apaga en esta tierra de pruebas cruentas, de absorbentes deberes de amor universal a cumplirse con Dios y sus criaturas, como quiere el Apóstol San Juan, el otro extremo ya os aguarda en la luz inmutable de la gloria beatífica, que sólo se alcanza cumpliendo a conciencia las leyes del Señor, siendo a la vez un edificador y un meditativo, poniendo todas las facultades del alma y de la inteligencia, al servicio de ese espléndido ideal cristiano que se resume en la frase inflexible de Jesús "Sed perfectos como el Padre que está en los cielos".
Vuestros fieles se contemplan en vuestras virtudes, Monseñor, como en el espejo en que definitivamente quisieran verse reflejados.
Y en la plenitud triunfante y feliz de éste aniversario vuestro, toda la Diócesis es un solo salmo en vuestro loor y vuestra alabanza.
------------------------------
---------------
 1946 - CONSEJO DIOCESANO DE MUJERES
(Vida Diocesana Nº 145. Marzo de 1946)

Diversas informaciones
Fiesta de la Virgencita de los 33. En colaboración con las otras ramas de A. C., y por disposición de la Junta Diocesana, hace una colecta popular, una exhortación domiciliaria a que concurran todos a homenajear nuestra reliquia patria, arrojando flores a su paso y engalanando sus casas con banderas; adornó un coche de A. C. para Formar fila en la magnífica caravana de autos para la recepción de la Imagen; puso en venta banderitas nacionales en gran cantidad; formó su coro en el Rosario continuado que dirigió la Presidenta en la noche del sábado 27, y por moción de la misma, por la mañana de ese día el Consejo ofreció la Misa y Comunión por el éxito de la fiesta en honor a su Celestial Madre que, acompañada por el Excmo. Señor Obispo, que le custodió amorosamente en la gira, retornaba a la sede graciosa y triunfante.
Obsequio. Recibe el muy expresivo de la Sra. Faustina G. G. de Secco Illa, consistente en 20 láminas del Corazón Inmaculado de María, que lo ofrece en honor a la Virgencita de los Treinta y Tres, y que el Consejo tanto agradece esta fineza y recuerdo a la vez, en su fiesta mariana con tanto éxito celebrada por la Diócesis de Florida y Melo.
------------------------------
---------------
1946 - PEDIDIDO DEL CLERO ASISTENCIA AL SOLIO PARA MONS. PATERNÁIN
(Borrador: Archivo de San Fructuoso)

Excelentísimo Señor:
Los que suscriben este petitorio humildemente suplican a V.E. quiera gestionar ante la Santa Sede, la Asistencia al Solio Pontificio para el Excmo. Sr. Obispo Diocesano Mons. Don Miguel Paternáin, que este año cumplirá sus bodas de plata sacerdotales. El jubileo se cumple el 19 de Febrero, pero la Diócesis lo festejará en Setiembre con una semana vocacional.
En su fecundo Episcopado de diecisiete años, Mons. Paternáin se ha manifestado siempre un incansable luchador de la causa de Dios - basta echar un vistazo a lo que era la Diócesis en 1929 cuando él asumió el gobierno de la misma, y a lo que es hoy para aquilatar su tesonero esfuerzo - .
I) Seminario
En 1929 la Diócesis no tenía seminario y sólo contaba con nueve seminaristas. Hoy tiene un magnífico Seminario menor y cincuenta seminaristas. En 1929 había diecisiete sacerdotes, hoy cincuenta y siete.
II) Parroquias y Templos.En 1929 había doce Parroquias y hoy son veintiséis las Parroquias de la Diócesis. Todas con floreciente vida espiritual. Se han levantado doce nuevos templos, algunos de valor y se han hecho en otros substanciales reparaciones, como en la Catedral, en cuyo hermoseo se han gastado cien mil pesos, Paso de los Toros, Rivera, Treinta y Tres y Matriz de Melo.
III) Comunidades Religiosas y Colegios
En 1929 la Diócesis tenía una comunidad masculina y seis femeninas. Hoy tiene ocho de varones y dieciséis femeninas. Había en 1929 cinco colegios católicos, hoy hay catorce.
IV) Acción Católica
Mons. Paternáin se preocupó intensamente de la Acción Católica. En 1936 hizo en Florida una semana de A.C. para los párrocos de la Diócesis. En junio de 1942 una semana en Melo. En setiembre de 1942 una semana en Florida. En agosto de 1943 una semana en Tacuarembó. A pesar de la falta de elementos lucha por fundarla en todas las parroquias en continuas circulares insta a los párrocos que presten especialísima atención a esta obra.
V) Misiones
En los diecisiete años de Episcopado ha realizado cincuenta y dos grandes misiones en las ciudades e innumerables pequeñas misiones en las aldeas y núcleos de la campaña, atendiendo él personalmente en estas misiones, la instrucción catequística y el confesionario.
VI) Catecismo
Mons. Paternáin ha dedicado preferente atención a la enseñanza catequística. Vigilando continuamente la marcha de los catecismos de la Diócesis y obligando a los párrocos a enviar un detalladísimo informe a la Curia sobre esta materia.
VII) Culto
Ha fomentado por todos los medios a su alcance el esplendor del culto y la observancia de la liturgia. En 1936 y 1940 realizó en Florida, Semanas litúrgicas. Él personalmente enseña en la Catedral al pueblo el Canto litúrgico. Especialmente se ha empeñado en el culto al Santísimo y a la S.S. Virgen. En 1944, realizó el primer Congreso Eucarístico Diocesano en Melo que precedido de los Congresos parroquiales, fue un despertar eucarístico de la Diócesis y en octubre de 1945, llevó en triunfal recorrido a la venerada Imagen de la Virgencita de los Treinta y Tres, por toda la Diócesis.
VIII) Sínodo Diocesano
(Parte tachada: En nuestra diócesis por razones del apartamiento de las parroquias, se habían infiltrado insensiblemente pequeños abusos. Mons. Paternáin afrontó la situación y…)
En 1940 se realizo el primer Sínodo Diocesano.
IX) Devoción al Papa
No pierde oportunidad de inculcar a los fieles la inquebrantable adhesión que todos debemos al Romano Pontífice. Esa devoción al Papa está concentrada en el Sínodo diocesano.

Por todos estos motivos Excmo. Señor, suplicamos pida a la Santa Sede la distinción que indicamos.
Besando reverente el anillo de V.E. piden la bendición
Mario S. Rodríguez …
---------------------------
---------------
1947 - CARÁGUATA
(Vida Diocesana Nº 146. Octubre de 1947) 

El 12 de Octubre será un día de eterna memoria para los fieles de Caraguatá.
En ese día nuestro Excmo. Señor Obispo bendecirá solemnemente la primera piedra de la que será la iglesia parroquial de aquel simpático y progresista paraje del departamento de Tacuarembó, que bañan las aguas del Caraguatá y del Río Negro.
En Paso de las Toscas se ha adquirido un terreno amplio y muy apropiado, donde se levantará la iglesia y casa parroquial.
Esperamos que el entusiasmo que ha despertado esta idea en aquella zona, y la visión clara de lo que significará para ella el nuevo templo y la presencia estable del sacerdote que rija esa porción de la Iglesia diocesana como Párroco, esperamos que todo eso ha de contribuir a que los trabajos emprendidos tengan pleno éxito muy pronto.
Que la dulce Virgencita de los Treinta y Tres, recibida con muestras extraordinarias de filial cariño por los habitantes de Caraguatá hace ahora dos años, bendiga estos anhelos y los convierta cuanto antes en realidad.
------------------------------
---------------
1947 - DÍA DEL SEMINARIO
 (Vida Diocesana Nº 163. Setiembre de 1947)

En esta Diócesis de Florida y Melo, el cuarto domingo de Setiembre, este desafío el 28 del corriente, se celebra el DÍA DEL SEMINARIO. Con este motivo, desde estas páginas familiares, llegan hasta ti, querido lector, amable lectora, las sugestiones contenidas en estas línea. No olvides nunca que en la formación sacerdotal está la base de toda obra constructiva espiritual y de la restauración cristiana de tu Diócesis. Todo lo que no se cimente sobre esto, quedará CIMENTADO SOBRE ARENA....Las mismas obras educacionales y de asistencia social, en que muchos se empeñan para remediar miserias morales y materiales, necesitan urgentemente del Sacerdote, del Ministro de Dios.
Los colegios católicos requieren los servicios de sus capellanes, las congregaciones piadosas claman por directores, la Acción Católica necesita Asesores...Y no hablemos del HAMBRE DE DIOS que tiene nuestro pueblo, hasta sin saberlo. ¿Recuerdas el Congreso Eucarístico Diocesano de Melo?... ¿Recuerdas el viaje triunfal de la Virgencita de los Treinta y Tres? ... ¿Recuerdas las Misiones dadas en tu parroquia o en medio de los campos?... ¿Qué significa todo ese despertar espiritual sino que es verdad que nuestro pueblo tiene hambre de Dios? Cruza una sotana por un barrio obrero, que no está ENVENENADO... por una población rural, que no está MALEADA...
-----------------------------
---------------
1947 - SAN FRUCTUOSO MARÍA REGGI CENTENARIO

Octubre
El 28 del pasado Agosto celebró en Tacuarembó el centenario de su nacimiento la señora Verónica Conti de Reggi.
En esa oportunidad el Excmo. Señor Obispo envió a la venerable anciana su pastoral bendición en un expresivo telegrama.
VIDA DIOCESANA se une a la señora Verónica Conti de Keggi en las acciones de gracias tributadas por ella a Dios Omnipotente en la fecha centenaria de su vida, y se congratula con sus familiares, especialmente con la señorita María Beggi, su hija, tan benemérita de la Causa de Dios en Tacuarembó, por este fausto y desacostumbrado acontecimiento.
-----------------------------
---------------
1948 Acción Católica Tacuarembó - Rivera
 (Vida Diocesana Nº 167. Enero 1948)

PELÍCULA DEL RECORRIDO DE LA VIRGEN DE LOS TREINTA Y TRES
GARDEN PARTY
Fue realizada con éxito esta fiesta en pro de nuestras obras de apostolado el 11 de diciembre en la que se exhibieron por gentileza amable del R.P. Dr. Pascasio Bresque las hermosas películas del Congreso D. de Melo y recorrido de la Virgencita, de los 33 y divertidas cómicas. Interesantes tómbolas; Feria de Novedades y servicio de bar y confitería completaron la atracción variada del programa.
Visitas. El 2 de Diciembre la Presidenta del Consejo sale en gira de apostolado, llega a Tacuarembó por la tarde donde es esperada afectuosamente en la Estación; momento después realiza una reunión en la Parroquia de la Santa Cruz y otra en la Parroquia de San Fructuoso. Saluda a los Señores Párrocos de las dos Parroquias que abren sus sesiones. Se conversa animadamente con los dos Centros, de la vida de ello interna y externa: San Fructuoso cuenta sus dificultades, la Santa Cruz entrega la solicitud de oficialización para el suyo que alegra de verdad a este Consejo. Al día siguiente muy de mañanita a Rivera! A las 8 ante de parar aun el tren divisamos desde la ventanilla los rostros cariñosos y sonrientes de las "nuestras", están ¡todas! Y saludan a la distancia ¡qué alegría y cuántos abrazos! En primer término una visita al Santísimo, luego pasamos todas en corporación a saludar al Sr. Obispo y también saludamos al R. P. Lor . Sr. Cura Párroco de aquella querida Parroquia y K. P. Carlos Parteli Asesor del Centro con el que dejamos ya fijada la hora para una reunión en la tarde, y antes de la oficialización, con la Presidenta del Centro y otra compañera que se considera un gran volante admiramos las bellezas de Rivera y Santa Ana La sesión de la tarde nos reúne nuevamente a todas con el R.P. Asesor. Una sesión muy movida, muchas preguntas, respuestas y buenos propósitos. Se nombra a la vez la pro Secretaria y con las oraciones finales pasamos a la Iglesia donde se realizará la oficialización. El Excmo. Sr. Obispo antes de iniciar la ceremonia les dirige la palabra, habla de deberes, responsa-bilidades... disciplina, caridad, vida interior, obediencia... sacrificio... palabras que, llegan muy adentro disponiendo los corazones al recogimiento y meditación. Luego de leer el Padre Asesor el Decreto donde nuestro Prelado nombra la Presidenta y Vice, impone las insignias, y con el Canto del Credo, la Bendición y Christus Vincit termina este acto que ha llenado de emoción a todos los asistentes. A la salida llueven las felicitaciones y pasamos a la Sede de A. C. con la rama de Srtas. a quienes les cupo esta misma gracia de la oficialización, y a la que ha acudido la Presidenta Diocesana, Marucha Costa y allí jun tas con nuestras "hermanitas menores" tenemos gratos momentos de camaradería, donde se halla presente el R. P. Asesor y en donde las hábiles manos de nuestras hermanas de Rivera han puesto el sello de muy buenas reposteras y excelentes dueñas de casa.
El día 4 a Paso de los Toros; en la Estación aguardan a la delegada, la Presidenta y Secretaria con la cordialidad de siempre. Saludamos al R P. Franco; a las 14 h celebramos nuestra reunión con el Centro, el que está aumentado con 4 postulantes que empiezan su periodo de prueba y asisten todas a la reunión que realiza con la presencia del Sr. Cura Párroco, cambiamos ideas dan cuenta de la marcha de su labor la Delegada de Niños, Srta. Pepita Baldriz cuenta que ya llegan a 30 sus niños que asisten en corporación con ella a la misa de los Domingos, comulgando todos, que confiesan los días Sábado y que necesita más de una subdelegada para su instrucción; se dispone nombren las que sean necesarias. La Delegada Diocesana les recomienda la vida de piedad encáustica, la meditación diaria y hace moción para asistir esa tarde en corporación al mes de María, que dará comienzo momentos después. Con este propósito levantamos la sesión y vamos a la Iglesia. Fiesta del alma puede considerarse las visitas a los Centros, porque en unión más completa de hermanas formamos un sólo corazón para ofrecerlo por nuestro apostolado al Señor y Dios nuestro.

Agentes de VIDA DIOCESANA
------------------------------
---------------
1949  - PARROQUIA SANTA ISABEL. PLAN QUINQUENAL
TERMINACION DEL TEMPLO
( Monografía de Paso de los Toros. P. Daniel Franco. OMI. 1950. págs. 138-140)

Uno de los problemas más arduos que se le presentaban al Párroco al hacerse cargo de esta feligresía y al mismo tiempo de más urgente necesidad era la terminación de la Iglesia parroquial...por otra parte se imponía la terminación de una obra que demasiado tiempo ya, había ofrecido el triste espectáculo de un esqueleto abandonado…Más de 50.500 mil pesos se calculó en esos instantes costaría la terminación de la obra. Después vino la sequía del año 43, guerra, la carestía, los consejos de salarios…
Ante esta incógnita que era necesario solucionar, la ORACIÒN fue nuestro recurso. SE recurrió con fervor a Aquel que todo lo puede y para quien era la obra proyectada. Al pie del Altar de Jesús, y a las plantas de su Madre Inmaculada, fue donde recibimos la inspiración del “Plan Quinquenal”. Nos retiramos de allí llenos de y de optimismos.

PLAN QUINQUENAL
Consiste este plan en conseguir treinta y tres personas, fue elegido este número en memoria de los Treinta y Tres Orientales que en heroica y legendaria empresa, conquistaron la Independencia de nuestra Patria.
Cada uno de estos 33 debía suscribir el compromiso - no se le pedía nada de donar - siempre que se llegase a suscribir la cantidad necesaria para la terminación de la obra, - la suma de pesos 1. 500.00 en el plazo de cinco años - de ahí el nombre de plan quinquenal. Podía ser donación propia o por medio de suscripciones mensuales de $ 25.00, recaudados entre el vecindario. En caso de no poderse suscribir la suma calculada para la terminación de la obra, $ 50.000.00, a nadie se le pediría un centésimo. O se terminaba o se dejaba como estaba.
Con esto se calculaba terminar el edificio propiamente dicho, pero sin ningún detalle interior, y. gr.: Altar de los 33, Vía crucis, Vitraux, Sacristía y muebles, Instalación eléctrica, etc. Detalles que por sí solos han costado unos veinte mil pesos.
Como recuerdo de esta Campaña se debía erigir un altar dedicado a la Virgencita de los Treinta y Tres, con una copia del cuadro de Clanes de los 33 Patriotas, y dos lápidas con los nombres de los 33 donantes.
El año 43 azotó al país una sequía de las más terribles que se han conocido en la República; en las estancias se veían los animales muertos a montones, ocasionando pérdidas fabulosas y la ruina de muchos. Esto trajo algunas dificultades para la realización de nuestro plan; pero, a pesar de ello, salvo pequeñas nubecillas, y pequeños desengaños, muy bien previstos, por cierto, Dios ha querido que el optimismo del primer momento, basado en el sólido cimiento de la protección celestial, jamás decayera.
Ahora, terminada ya la obra, hemos visto que no esperamos en vano. La oración a la Virgen de los Treinta y Tres, rezada todos los días pública y privadamente por muchos fieles de la Parroquia, nos alcanzó mucho más de lo que pedimos; pues no solo se terminó lo proyectado, sino también todos los detalles mencionados, y al mismo tiempo tuvimos también donaciones para la edificación de las Capillas de los barrios mencionados en otro lugar.
Faltaríamos a la modestia si cualquiera de nuestros feligreses, y nosotros mismos en primer término, quisiéramos atribuirnos algún mérito en estas obras de la Parroquia; a no ser quizás, la que no nos pertenece tampoco, de haber sido elegidos como instrumentos circunstanciales.
Nadie puede atribuirse mayores méritos, ya que para llevarlas a cabo no se formaron Comisiones Pro Templo, ni de Colecta, ni de clase ninguna. A nadie se molestó, si no es ahora al final. Casi a nadie se le fue a pedir tampoco. Ellos, ellos mismos, los donantes han venido, a la Parroquia a ofrecer libre y espontáneamente su donación. O al sumo ante una leve insinuación del Párroco o de alguna alma buena...
-------------------------------
---------------
1949  - Santa Isabel (Historia de Paso de los Toros)
LA PATRONA DEL PLAN QUINQUENAL
NUESTRA VIRGEN CRIOLLA

Ella lo ha hecho todo. Ella la celestial capitana que guió los ejércitos libertadores.
A ella, la madre bondadosa que nos dio la inspiración y nos proporcionó los medios, debemos nuestro templo.
A ella rendimos filialmente tributo de perenne reconocimiento.

ORACIÓN A LA VIRGEN DE LOS TREINTA Y TRES
Virgencita de los Treinta y Tres, Inmaculada Madre de Dios y Madre nuestra; a tus plantas venimos hoy con el corazón henchido de gratitud, a darte las más rendidas gracias por la sobrehumana y milagrosa protección que te has dignado dispensarnos.
Obra tuya es nuestro Templo. Tú sola has buscado los recursos y allegado los medios para su construcción; Tú has movido los corazones, doblegado las voluntades y encaminado los pasos de cuantos han contribuido a la edificación de esta obra.
Acepta pues hoy, oh Madre de nuestra Patria, el homenaje más completo de nuestra gratitud y de nuestro reconocimiento.
Y para que nuestros homenajes te sean más gratos, humildemente te pedimos que apartes de nosotros toda mancha de pecado, que embellezcas el templo viviente de nuestro corazón con las joyas de acendrada piedad, de intensa vida interior y de todas las virtudes cristianas.
Te pedimos también que colmes de celestes bendiciones a cuantos movidos por tu inspiración han hecho realidad esta obra con el aporte de sus bienes o de su esfuerzo personal.
Y finalmente que después de alabarte y bendecirte y agradecer tus beneficios todos los días de nuestra vida, merezcamos gozar en el Cielo de Tu compañía por toda la eternidad.- Amén.

Aprobamos esta plegaria y concedemos cien días de indulgencia a todos los que la rezaren devotamente.

Florida, 27 de diciembre de 1949.
+ MIGUEL Obispo de Florida y Melo.
------------------------------
---------------




No hay comentarios:

Publicar un comentario